El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha anunciado la dimisión del histórico dirigente del sindicato Rodolfo Benito por su implicación en el caso de las tarjetas de crédito en negro de Caja Madrid. En rueda de Prensa, Toxo ha explicado que Benito le ha comunicado su decisión en una conversación telefónica esta mañana. Presidente de la Fundación 1º de mayo y miembro de la Ejecutiva de CCOO, Benito es un histórico del sindicato.
Toxo ha explicado que el dimisionario dirigente de CCOO mantiene que “en ningún momento” actuó de forma ilegal ni en beneficio propio, pero que ha adoptado esta decisión porque entiende el daño que este escándalo está ocasionando al sindicato y a su propia persona.
Sobre el resto de dirigentes implicados, otros cinco, Toxo ha dicho que es necesario conocer qué uso dieron a sus tarjetas; si este estaba vinculado a la representación asumida en la caja o a un uso distinto; y, si ha habido un uso “inapropiado, ilegal o no acorde” al código ético. CCOO, ha dicho Toxo, “tomará las medidas disciplinarias” que contempla su código interno una vez que disponga de toda la información, que ha reclamado a las personas involucradas y que pedirá también a la entidad.
Rodolfo Benito está preparando una nota sobre los motivos de su dimisión. Por su parte, Toxo ha dicho que le parece conveniente que el hasta ahora dirigente de CCOO realice una comparecencia pública para esclarecer el asunto y dar explicaciones.
Eje vertebral del sindicato, Benito lidera una de las tres corrientes del partido, Alternativa Confederal, y es parte de la Comisión Ejecutiva como secretario de educación y preside la Fundación de la central, 1º de Mayo. En 2004 se presentó a unas elecciones como secretario general contra Fidalgo y las perdió. Finalmente su alianza con Ignacio Fernández Toxo le ha dado estabilidad dentro del sindicato.
Fue consejero de Caja Madrid durante casi una década. En el informe interno de auditoría de Bankia se refleja que entre 2005 y 2009 hizo gastos con la tarjeta de crédito de una media de 25.000 euros. Toxo ha dicho que le parece “excesiva” cualquier cifra que supere “los tres ceros” y ha asegurado que la dirección confederal no tenía constancia de la existencia de esas tarjetas.