Talgo ha confirmado este martes que ha recibido una propuesta del grupo checo Skoda Transportation que consiste en una combinación de negocios y de integración industrial y que no contiene una oferta económica, ha precisado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El fabricante ferroviario español ha solicitado a Skoda Transportation información detallada y que indique si implica el ofrecimiento a los accionistas de una contraprestación superior a la ofrecida por la húngara GanzMavag en la opa anunciada el pasado 7 de marzo y si ésta se satisfaría en efectivo.
Asimismo, Talgo ha pedido a la compañía checa que explique sus actuales capacidades industriales y financieras a fin de poder valorar los siguientes pasos.
Skoda Transportation, presencia local e internacional
El grupo de ingeniería Skoda Transportation, con sede en Pilsen, está especializado en desarrollar y fabricar vehículos ferroviarios eléctricos para el transporte urbano y ferroviario. Aunque comparten nombre, Skoda Transportation no forma parte de la automovilística Skoda Auto, del grupo Volkswagen.
Además, posee total o parcialmente otras empresas activas en el campo del desarrollo y la fabricación de material rodante, motores eléctricos y productos relacionados en varios países europeos.
Las regiones de negocio clave del grupo son la República Checa, Finlandia, Alemania, los países bálticos, Polonia y Eslovaquia. El grupo de ingeniería desarrolla una gama completa de soluciones de transporte público para trenes, tranvías, metro, trolebuses y varios tipos de autobuses, acompañadas de un servicio y mantenimiento integrales.
El grupo de empresas Škoda Transportation es uno de los mayores fabricantes mundiales de tranvías y unidades de propulsión para trolebuses y un importante productor regional de vehículos ferroviarios.
Búsqueda de opciones alternativas a la opa de GanzMavag
La propuesta de Škoda Transportation llega en plena opa del grupo húngaro GanzMaVag (Magyar Vagon) sobre la compañía española, una operación que no gusta en el seno del Ejecutivo español, que ha sondeado distintas alternativas con socios industriales y capital español.
El grupo húngaro ofrece cinco euros por acción en su oferta, dirigida al 100 % de su capital por un importe total de 619,3 millones de euros.
El pasado 15 de abril, Magyar Vagon entregó a la CNMV, dentro del plazo estipulado de siete días hábiles desde la solicitud, el aval de un banco húngaro de 619,3 millones de euros de la opa sobre el fabricante de material rodante español.
Como parte de esta oferta, el grupo húngaro solicitó en marzo al Gobierno español la autorización del Consejo de Ministros a esta entrada de capital extranjero.
Se trata de una operación que, en principio, no cuenta con el respaldo del Gobierno porque entiende que Talgo es un operador estratégico, con una tecnología única en el mundo, y que desempeña un papel fundamental en el transporte ferroviario.
De hecho, en varias ocasiones el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha apuntado que el Ejecutivo “observa la opa con máximo cuidado y a la espera de otros actores en el juego, inversores y otros fabricantes”.
El oferente es una sociedad húngara formada por Ganz-Mavag (55 %) y Corvinus (45 %), participada esta última por el Estado húngaro a través del Ministerio de Economía.
A su vez, Ganz-Mavag está íntegramente participada por Magyar Vagon, propiedad de un fondo de capital riesgo (Solva II), cuyo principal accionista, con el 50 %, es el ciudadano húngaro Csaba Töro.
Detrás de este consorcio -que se ha consolidado en el sector ferroviario a través de privatizaciones en el país centroeuropeo- están DJJ y András Tombor, que fue consejero de asuntos de seguridad nacional del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, durante su primer Ejecutivo, entre 1998 y 2002.
Las acciones de Talgo se mueven en la actualidad en 4,01 euros y en lo que va de año se han devaluado un 8,6 % en la bolsa española.