La vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha reprochado este martes al PP que critique el anteproyecto de ley presentado por el Gobierno para drenar los denominados “beneficios caídos del cielo” o windfall profits de las eléctricas descontando el llamado “dividendo del carbono” a las tecnologías no emisoras de CO2, básicamente hidroeléctrica y nuclear. Ribera ha recordado a los populares que acaban de proponer una medida similar en una enmienda presentada “hace apenas diez días”.
“Si quieren hablar de windfall profits podemos hablar de algunos sueldos o subvenciones como las de Plus Ultra”, ha señalado durante la sesión de control en la Cámara Baja el senador del PP Juan Manuel Juncal, que ha expresado “serias dudas” de que ese mecanismo “no sea recurrido” por las empresas y se tengan que devolver las cantidades cobradas en el futuro.
Según Juncal, la solución propuesta “se carga el principio de neutralidad tecnológica”, “ignora las pérdidas que reflejan las centrales nucleares” y las aboca “al cierre”. En suma, se “cargaría” la seguridad jurídica y la transición energética.
“Me sorprende que usted critique esta medida cuando hace apenas diez días”, en una enmienda presentada en el Congreso, “nos instaban a que en el plazo de tres meses presentáramos un proyecto de ley de minoración” de esos beneficios extraordinarios, ha señalado Ribera en su respuesta a Juncal.
El pasado 26 de mayo, el PP presentó una enmienda al artículo 5.4 del Proyecto de Ley de Medidas Urgentes de Apoyo a la Solvencia Empresarial y al Sector Energético, y en Materia Tributaria, en la que, entre otras medidas, plantea esta: “el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, desarrollará en el plazo de tres meses, un mecanismo de limitación de la sobrerretribución que puedan recibir las tecnologías no emisoras de CO2 como consecuencia de la incorporación del precio del CO2 a los precios del Mercado Mayorista de la Electricidad por parte de las tecnologías emisoras”.
En esa enmienda, publicada el lunes en el Boletín Oficial de las Cortes, el Grupo Popular explica que esa medida permitiría, entre otros efectos, amortiguar “los efectos perniciosos de la extrema volatilidad y las prácticas especulativas en los precios del CO2, para mitigar los que se ha venido en denominar ”windfall profits“, beneficios sobrevenidos o ”beneficios caídos del cielo“ que pueden generar a las tecnologías que no precisan de derechos de emisión de CO2.”
Durante su intervención, ante las críticas del senador popular al “tarifazo” de la luz con el recibo que acaba de entrar en vigor, “complicando la vida a familias y empresarios con horarios imposibles de llevar a cabo”, según Juncal, Ribera ha recordado que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) “es quien ha propuesto esta nueva estructura” para enviar a los consumidores “señales de eficiencia”, “descongestionar” las redes y reducir las necesidades de nuevas inversiones.
Ribera ha señalado que “al Consejo de Consumidores y Usuarios”, en el que se sientan las organizaciones de consumidores (que llevan semanas criticando la nueva factura), también le pareció “una buena cosa” ese modelo. El Gobierno está “siguiendo con mucha atención” su implementación y ha pedido a la CNMC que siga el impacto de su aplicación en los consumidores industriales, domésticos y “sobre todo”, las pymes, en un momento de precios altos que “previsiblemente” va a continuar.
La vicepresidenta ha reclamado un “debate a fondo, serio, sin demagogias ni ruido” sobre el asunto del precio de la electricidad, que “el Gobierno no fija por decreto” y ha asegurado que se ha transformado un modelo “caro y sucio” que iba hacia “el colapso” por otro “más limpio, más eficiente y con mejor precio”, y “atractivo para el inversor”, tras la “pesadilla” de los arbitrajes por los recortes a las renovables del Gobierno del PP.