Primera reunión en cuatro años de la Comisión de Seguimiento de Cercanías de Madrid entre el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y el Ejecutivo autonómico. Un encuentro marcado por las desavenencias de los últimos días, en los que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, aseguró que los retrasos le cuestan a la región cinco millones de euros diarios y el Gobierno respondió que la puntualidad de los trenes es del 96%. Una disparidad de criterios que está lejos de difuminarse, aunque ambos gobiernos se han comprometido a seguir reuniéndose.
“La presidenta suele ser muy creativa, tendría que ser un poco más rigurosa”, ha asegurado el secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, David Lucas. “Yo no voy a justificar datos que no son ciertos, no se soportan sobre un criterio científico y que seguramente se está utilizando con mucha demagogia política”, ha resumido el número dos del Ministerio. “Todo tren que tarde más de tres minutos en llegar a su parada se computa como un retraso”, ha insistido.
En cambio, sobre los retrasos, el consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, David Pérez, afirma que ese 96% de puntualidad es “imposible”. “Ese dato no lo creemos, no es que lo cuestionemos, pero no se contrasta con la realidad. No es que nos irrite es que lo puede hacer a los ciudadanos que llegan tarde. No hay realismo”, ha afirmado. Es “un caso de ingeniería numérica”.
Discrepancias sobre cuánto se invierte
No hay consenso sobre los retrasos y menos sobre cómo se está invirtiendo. El consejero de la Comunidad de Madrid habla de “discrepancia insalvable” porque, entiende, de la reunión de hoy no ha salido “un plan de choque mediante un fondo extraordinario para resolver el problema de las incidencias en el Cercanías”.
David Pérez afirma que “hay un problema inmediato, de incidencias; y las soluciones que plantean [desde el Ministerio] son a largo plazo, a 10 o 15 años. Y que el Ejecutivo estatal habla de ”movilización“ de recursos y no de ejecución de fondos. También, señala que el plan sobre el que está trabajando el Ministerio es el mismo que diseñó Íñigo de la Serna cuando era responsable de la entonces cartera de Fomento.
En cambio, el número dos del Ministerio de Transportes recalca lo contrario, que las obras se están ejecutando y que el plan del Gobierno de Mariano Rajoy solo era un “power point”
David Lucas ha cifrado el plan de inversión del Estado en el Cercanías de Madrid en 6.400 millones de euros, hasta 2025. “Es un plan actualizado, realista, no sobre la base de un powerpoint que tuvo el exministro, no respaldado por proyectos o ejecuciones presupuestarias”.
De esos 6.400 millones, “más de 3.000 están en ejecución”. “Hay 1000 millones movilizados en estos momentos”, ha enumerado Lucas, en referencia a obras que se están llevando a cabo, contrataciones y proyectos en marcha. “A ellos se suman 2.000 millones proyectados en nuevas infraestructuras y nuevos trenes”, ha enumerado Lucas. Estos últimos comenzarán a estar operativos en 2025 y entrarán en la red a lo largo de cuatro años, según confirmó esta semana el Ministerio.