Los ministros de Finanzas de la UE (Ecofin) han decidido este martes añadir a Anguila y Barbados a la lista de la UE de paraísos fiscales –“países y territorios no cooperadores a efectos fiscales”, según el lenguaje comunitario–, mientras Islas Caimán y Omán han sido sacados de la lista, “después de haber aprobado las reformas necesarias para mejorar su marco de política tributaria”, afirma el Ecofin.
De acuerdo con el ránking de Oxfam, “la gran mayoría de las sociedades que operan desde las Islas Caimán son sucursales o filiales de los 50 mayores bancos del mundo. Ninguna de ellas está obligada a presentar sus movimientos financieros anuales”.
La lista de la UE de paraísos fiscales “tiene como objetivo contribuir a los esfuerzos en curso para promover la buena gobernanza fiscal en todo el mundo”, y “enumera las jurisdicciones no pertenecientes a la UE que no han entablado un diálogo constructivo con la UE sobre gobernanza fiscal o no han cumplido sus compromisos de implementar reformas para cumplir con un conjunto de criterios objetivos de buena gobernanza fiscal, relacionados con la transparencia fiscal, una fiscalidad justa e implementación de estándares internacionales contra la erosión de la base impositiva y la transferencia de ganancias”.
En respuesta a la decisión de los ministros de economía y finanzas de la UE, el eurodiputado Pedro Marqués, portavoz del grupo socialista en el Parlamento Europeo en materia fiscal, ha afirmado: “Me ha sorprendido saber que los ministros de la UE han eliminado a las Islas Caimán de la lista de paraísos fiscales. Las Islas Caimán lideran la carrera por ofrecer una tasa impositiva cero, lo que facilita a las empresas y a los superricos eludir sus responsabilidades de pago. Es evidente que los criterios de la UE para incluir en la lista negra los paraísos fiscales no funcionan. Además, algunos de los paraísos fiscales más dañinos del mundo, como Suiza, Hong Kong o Jersey, no han aparecido nunca en la lista”.
Chiara Putaturo, asesora de política fiscal de la UE de Oxfam, ha reaccionado, por su parte: “Si bien damos la bienvenida a la incorporación de Barbados, la eliminación de las Islas Caimán, uno de los paraísos fiscales más notorios del mundo, de la lista negra de paraísos fiscales de la UE es una prueba más de que el proceso no está funcionando. Los paraísos fiscales privan al resto de países de cientos de miles de millones en ingresos cada año, dinero que se necesita más que nunca durante la pandemia de la covid-19. Sin embargo, en lugar de pedirles cuentas, la UE está permitiendo que los países más agresivos sean excluidos de la lista”.
“Para que la lista negra mantenga alguna credibilidad”, prosigue Putaturo, “la UE debe incluir a todos los países que operan como paraísos fiscales, incluidos los países con tasas impositivas corporativas cero y los países donde las inversiones corporativas superan el nivel de actividad económica real en la que participan”.
Anguila y Barbados se han incluido en la lista de la UE tras los informes publicados por el Foro Global sobre Transparencia e Intercambio de Información con Fines Fiscales, que rebajó las calificaciones de Anguila y Barbados, respectivamente, a “no cumple” y “cumple parcialmente” con la norma internacional sobre transparencia e intercambio de información a petición (EOIR). Las Islas Caimán han sido “eliminadas de la lista de la UE después de que adoptó nuevas reformas a su marco sobre Fondos de Inversión Colectiva en septiembre de 2020”.
Por otro lado, el Ecofin ha considerado que Omán “cumplía con todos sus compromisos después de que ratificara la Convención de la OCDE sobre Asistencia Administrativa Mutua en Materia Fiscal, promulgó legislación para permitir el intercambio automático de información y tomó todas las medidas necesarias para activar sus relaciones de intercambio de información con los Estados miembros de la UE”.
Después de esta actualización, 12 jurisdicciones permanecen en la lista paraísos fiscales: Samoa Americana, Anguila, Barbados, Fiji, Guam, Palau, Panamá, Samoa, Seychelles, Trinidad y Tobago, las Islas Vírgenes de EE UU y Vanuatu.