La UE se prepara ante el escenario de una recesión: “No es inevitable, pero el riesgo evidentemente ha aumentado”

Andrés Gil

Corresponsal en Bruselas —
9 de septiembre de 2022 09:48 h

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Si este jueves actuó el BCE con una subida histórica de tipos de interés, este viernes hay sendas reuniones paralelas en Praga y Bruselas decisivas para el futuro próximo de Europa. En Bruselas se reúnen de urgencia los 27 ministros de Energía para responder a la crisis energética y los cortes de gas ruso, que tienen una traslación directa en la inflación récord que vive la eurozona –9,1% en agosto–. Y en Praga se reúnen los ministros de Economía, donde escucharán a la presidenta del BCE, Christine Lagarde, donde sobrevuela el fantasma de la recesión.

Y el viernes el BCE publicó unas proyecciones cuya horquilla menos optimista preveía una caída del 0,9% del PIB en 2023. Y el propio comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, reconocía a su llegada al Eurogrupo este viernes los que “los riesgos de recesión están ahí. La recesión no es inevitable, pero el riesgo evidentemente ha aumentado”.

“Sabemos que estamos entrando en un otoño con una situación de incertidumbre sin precedentes”, afirmaba Gentiloni: “Por un lado tenemos cierto nivel de crecimiento, todavía tenemos un desempleo muy bajo. Pero, por otro lado, con esta inflación y una perspectiva de dificultades con riesgos de recesión que están ahí”.

En este sentido, el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe, ha dicho: “Los ministros son conscientes de los riesgos de recesión, pero si vemos las proyecciones del BCE y de la Comisión, se ve un buen comportamiento económico. El consenso sigue siendo de crecimiento y que la recesión no es inevitable. Queremos combatir la inflación y apoyar el crecimiento, con medidas temporales y concretas. Sabemos que hay riesgo de recesión, pero no es inevitable. Pero los costes mayores son los de la población de Ucrania, y si la inflación se prolonga a estos niveles, seremos más pobres durante mucho tiempo”.

“Así”, proseguía Geniloni, “en esta incertidumbre, lo crucial desde nuestro punto de vista es cooperar con la política fiscal, con la política monetaria, para mantener la curva de la inflación a la baja. Pero todos sabemos que la verdadera herramienta para frenar la inflación es tener un paquete energético eficaz. Y es muy importante que el próximo martes la Comisión Europea presente finalmente sus propuestas para para afrontar la emergencia energética. Y esto será, creo, una gran contribución también a la situación económica general”.

Gentiloni, así, concede más importancia al a respuesta frente a la crisis energética que a la política monetaria del BCE que enfría la economía por la vía de la subida de tipos: “Esta decisión se esperaba en gran medida, está también en un marco de decisión global de las autoridades monetarias. Tenemos la oportunidad, si trabajamos juntos la política monetaria, la política fiscal, y si tenemos el paquete energético correcto ahora, evitar la recesión es un desafío, pero es posible”.

La subida de tipos, ha dicho Gentiloni, “es decisión del BCE, toman la decisión en base a datos, pero lo normal es que esto sea un proceso. Los tipos de interés antes de la decisión de ayer estaban a cero en Europa. No debemos presentar la situación como si el nivel fuera terriblemente alto. Es una decisión importante. Pero muy esperada en gran medida”.

El ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner, decía por su parte a la llegada a la reunión: “Ayer fuimos testigos de la decisión tomada por el BCE. Desde mi perspectiva, nosotros, como ministros de finanzas, también tenemos que cumplir con nuestras responsabilidades. Ha habido una fuerte señal del BCE para luchar contra la inflación. Éste es nuestro deber también: tenemos que luchar contra la inflación por medio de políticas fiscales, lo que significa que tenemos que mantener en el equilibrio fiscal. Tenemos que apoyar a nuestros hogares, especialmente a los más vulnerables, pero las finanzas públicas sanas son más importantes que en la última década porque tenemos que lidiar con la inflación con la política fiscal a través de finanzas públicas sanas, reduciendo las deudas”.

Mientras los ministros de Finanzas se reúnen en Praga, los de Energía hacen lo propio en Bruselas. “Los gobiernos venimos convencidos de lo relevante que resulta tomar medidas para reducir el impacto del precio del gas en el sistema energético”, ha dicho la vicepresidenta Teresa Ribera a su llegada al consejo extraordinario: “Probablemente es un debate que deberíamos haber tenido hace un año para poder llegar a tiempo y evitar el espectacular coste de la energía en Europa en estos meses, por el uso que se hacía de los mecanismos regulatorios y de las materias primas energéticas como herramienta de guerra”.

“Necesitamos llegar a un acuerdo, una orientación que permita a la Comisión Europea presentar propuestas la semana que viene”, ha afirmado Ribera: “Nuestra regulación no está preparada para situaciones de estrés y necesita ser mejorada para resistir eventualidades en un futuro. Esto requiere tomar medidas urgentes y excepcionales que reduzcan los precios y activar cuanto antes la reflexión sobre cómo hacer evolucionar el funcionamiento del mercado mayorista europeo”.

Además, según Ribera, “es importante abordar si estamos en condiciones o no, y en qué términos, de dar señales de cuál es el precio al que estamos dispuestos a comprar gas natural procedente de Rusia por tubería, o eventualmente procedente de otras fuentes. Esto último quizá no es tan urgente, pero necesita transparencia con respecto a la configuración de precios en las plataformas de compra”.

En cuanto a la propuesta de Bruselas de ahorro eléctrico, Ribera afirma: “La propuesta de la Comisión de ahorrar en las horas pico en las que hay más demanda y más consumo de gas es una buena idea. Pero hay que ver cuál es la estructura de demanda en cada estado miembro, porque en algunas hay poca oportunidad para hacerlo y otros en los que ya se ha avanzado mucho. Es importante que sea para todos por igual y que haya margen para que cada Estado pueda reducir el consumo eléctrico a su manera”.

La comisaria de Energía, Kadri Simpson, ha explicado, por su parte: “Ahora mismo necesitamos medidas de intervención extraordinarias para hacer frente a los precios altos y volátiles. Y estas medidas son necesarias para proteger a nuestros consumidores y empresas contra los impactos negativos que causan los altos precios. Presentaré a los ministros un paquete de cinco propuestas, cuyo objetivo es abordar problemas a corto plazo. En paralelo, el trabajo para la reforma estructural del mercado eléctrico está en curso. Y espero de la reunión de hoy que los ministros nos den su opinión sobre cómo calibrar bien nuestra propuesta antes de la próxima semana. Debemos ofrecer a los gobiernos herramientas sobre cómo pueden abordar esta emergencia en una situación en la que hay escasez de suministros. No se trata solo de precios, también es un desafío en el aspecto de seguridad de suministro. Esta es una situación en la que uno de los participantes del mercado [Rusia] está manipulándolo. Y por eso en esta propuesta que discutiremos con los ministros también hay una propuesta para abordar los mercados financieros y el mecanismo de formación de precios”.

Calviño: “Yo no he mencionado esa palabra”

La vicepresidenta económica española, Nadia Calviño, ha evitado este viernes hablar de recesión. “Yo no he mencionado esa palabra”, ha respondido a una periodista que le preguntaba sobre la entrada de la UE en ese escenario: “La subida de tipos de interés de ayer del Banco Central Europeo era esperada por los mercados. Estaba dentro de lo que todos esperábamos que se produjese en un contexto de depreciación del euro como el que estamos viviendo. Vamos a escuchar con mucha atención las explicaciones, la presentación de la señora Lagarde, pero todas las previsiones apuntan a una perspectiva de reducción de los precios en los próximos meses y todos los organismos esperan que España tenga un crecimiento fuerte por encima de la media de la OCDE, por encima de la media de la Unión Europea y de la media de los grandes países”.

¿Acuerdo entre gobiernos para el impuesto mínimo de sociedades?

La vicepresidenta española también ha anunciado el movimiento de varios países para llegar a un acuerdo para sacar adelante el impuesto mínimo de sociedades común, bloqueado ahora por Hungría como respuesta a los pleitos abiertos con el resto de la UE por sus políticas autoritarias y homófobas, que le tienen congelado los fondos europeos: “Vamos a impulsar por parte de España una declaración conjunta con respecto a la necesidad de acelerar la adopción a nivel europeo de un nivel mínimo de impuesto de sociedades. Es decir, que tengamos cuanto antes un sistema común, unas normas comunes, para tener un impuesto mínimo de sociedades y que por tanto, las grandes empresas contribuyan también a financiar el impacto de la crisis en los mercados energéticos”.

“Es necesario tener una distribución justa del coste de los altos precios de la energía”, ha dicho Calviño, “y eso requiere que tengamos un sistema que sea adecuado, también en el aspecto fiscal”.

Lindner también ha explicado que Alemania “tomó la decisión el fin de semana de implementar el impuesto de sociedades mínimo a escala nacional si es necesario. Apoyamos firmemente un enfoque europeo, intentamos convencer a todos los Estados miembros, especialmente a uno. Pero tomamos la decisión de implementar el impuesto mínimo en Alemania. Si no hay un entendimiento europeo sobre esto, creo que otros estarán abiertos a un enfoque similar”.

En este sentido, el ministro francés, Bruno Lamaire, con quien llegó Lindner al Eurogrupo, ha afirmado: “Hay muchas opciones sobre la mesa y, por lo tanto, la cooperación reforzada [acuerdo intergubernamental a 26] podría ser una solución. Pero, si no fuera posible una cooperación reforzada, tendríamos que contemplar todas las opciones, incluidas las opciones nacionales. Llevo más de cinco años trabajando sobre el impuesto mínimo de sociedades. La gente quiere justicia y tiene razón. No quiero tener más evasión fiscal en Europa. No quiero que haya más optimización fiscal y tributaria en Europa, y por eso llevo más de cinco años abogando por este impuesto de sociedades mínimo. Es hora de implementar esta decisión. No deberíamos hablar. Deberíamos decidir. Y deberíamos implementar este impuesto corporativo mínimo a más tardar el próximo año”.

“Somos muy conscientes de la situación”

El presidente del Eurogrupo, Paschal Donohe, ha explicado tras la reunión del Eurogrupo que los ministros son “muy conscientes” de la situación crítica. Donohe ha explicado los acuerdos alcanzados por los 19 ministros de la zona euro: “Los precios son causa de la guerra, y por eso estamos determinados a superar le momento. Confiamos en nuestra resiliencia. Afrontamos el momento con grandes niveles de empleo y finanzas públicas sólidas, y usaremos estos fundamentos para la recuperación. Por eso, queremos apoyar los hogares vulnerables, los negocios”.

La respuesta, ha dicho Donohoe, debe “reducir la inflación, que empobrece a las personas. Por eso nuestras intervenciones serán coordinadas con el BCE, por eso priorizamos dos políticas: las intervenciones deben ir a las transferencias concretas y evitar una espiral de salarios alcistas, pero también creemos que no puede haber super beneficios mientras hay gente sufriendo como están discutiendo nuestros colegas de Energía en Bruselas”.

Gentiloni, por su parte, ha insistido en que hay dos palabras clave: “Incertidumbre y cooperación. Las cifras de inflación, energía y los indicadores hablan de reducir el momento económico, lo que está agravando los hogares y los negocios. La recesión no es inevitable, pero el riesgo evidentemente ha aumentado”.