UGT propone reducir la jornada a los cuatro días con el mismo salario para hacer frente a la automatización

Trabajar menos tiempo por el mismo salario debido a la mayor implantación de las nuevas tecnologías en el mercado laboral. Es una de las propuestas de UGT, caminar a jornadas semanales de cuatro días en “los próximos cinco a 10 años”, tras un estudio del sindicato sobre más de un centenar de investigaciones acerca de los efectos de la automatización en el empleo. Dado que la mayoría de los análisis apuestan por que habrá una destrucción de puestos de trabajo, el sindicato ha elaborado varias medidas para responder a esos efectos y limitar las repercusiones negativas en las vidas de los trabajadores.

El secretario de Política Sindical de UGT, Gonzalo Pino, y el experto en digitalización de la economía, José Varela, han presentado este miércoles las conclusiones de su estudio Impacto de la automatización en el empleo en España. El sindicato destaca que la mayoría de las investigaciones científicas se inclinan por que la automatización generará empleos, pero que destruirá más puestos de los que creará. La horquilla se sitúa entre “el millón de pérdidas y los 6,6 millones hasta 2030”, explica Valera, responsable del estudio de UGT.

Uno de los sectores más afectados por la pérdida de empleos, continúa Valera, será “el de la automoción”, aunque Gonzalo Pino precisa que podrá afrontar mejor la automatización dadas las mejoras tecnológicas acometidas en los últimos años frente a otros sectores menos modernizados hasta el momento. En la cara opuesta, los sectores de cuidados y dependencia, así como los de ocio, se verán beneficiados por la generación de empleo, explica José Valera.

La organización sindical apuesta por tomar medidas a corto, medio y largo plazo para aliviar los efectos negativos del cambio tecnológico. De manera inmediata, UGT apuesta por el desarrollo de un Plan Nacional de Inclusión Tecnológica, “para no dejar a nadie atrás”, así como la renovación de los planes educativos, políticas activas de empleo, la formación continua de los trabajadores y que los sindicatos formen parte de las decisiones de innovación tecnológica en las empresas, con la elaboración de memorias de impacto sobre los puestos de trabajo.

Jornadas laborales de cuatro días

A medio plazo, en “los próximos cinco a 10 años”, UGT plantea “reducir paulatinamente la jornada laboral y la vida laboral a medida que el empleo se va automatizando”. La premisa de la que parte la organización es que la irrupción tecnológica permitirá producir más con menos mano de obra y que las empresas aumentarán aun así sus beneficios y su productividad.

El planteamiento de UGT consiste en reducir la jornada a “las 32 horas semanales, estamos hablando de cuatro días de trabajo” sin reducción de salario para los trabajadores. “Las empresas no tendrán pérdidas por esta reducción de jornadas, porque el efecto de las nuevas tecnologías permitirán el aumento de la productividad y competitividad”, defiende Gonzalo Pino.

Una “robotasa” a los beneficios empresariales

A largo plazo, la central sindical considera necesario implantar “nuevos sistemas de reparto de los beneficios empresariales a través de nuevos impuestos asociados a las nuevas tecnologías y a la maquinización del trabajo”. Lo que en UGT denominan “robotasa”, explica Gonzalo Pino, que asuman las empresas que obtengan un impacto positivo del cambio tecnológico en sus cuentas de resultados.

Valera explica que en la actualidad “nuestro sistema económico se basa en que el trabajo es un mecanismo fundamental de reparto de la riqueza”, pero en los próximos años la automatización y robotización previsiblemente limitarán la creación de puestos en las empresas, aunque no sus beneficios. Como resultado UGT considera necesario crear estas “nuevas formas de reparto de la riqueza”.

El sindicato exige al Gobierno cambios legislativos y acuerdos en la negociación colectiva para comenzar a tomar medidas. Algunos trabajadores, estima UGT, ya no podrán adaptarse a estas nuevas realidades tecnológicas, por lo que la organización demanda también “nuevos sistemas de rentas” que alivien su salida del mercado laboral.