España pretende ser el segundo país en el mundo que ratifique el Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) contra la violencia y el acoso en el trabajo, tras Uruguay. La ministra Yolanda Díaz ha anunciado este lunes ante el director general de la OIT, Guy Ryder, que su Ministerio inicia hoy el proceso de ratificación, que debe pasar por más carteras del Gobierno y, en último lugar, por el Congreso de los Diputados.
El Convenio 190 amplía la concepción de qué es el acoso en el mundo laboral, que sufren sobre todo las mujeres, y los trabajadores que deben ser protegidos, ha subrayado la ministra. Los convenios de la OIT son tratados internacionales sujetos a ratificación y son vinculantes para los Estados Miembros que los ratifican.
Yolanda Díaz ha destacado la importancia de que España se convierta en el segundo país que ratifique el Convenio 190, porque estas normativas requieren que dos Estados miembros de la OIT las suscriban para su entrada en vigor. “Se está abriendo la puerta a que más miembros de la Organización se puedan sumar a este protocolo contra la violencia y el acoso en el trabajo”, subrayan fuentes de Trabajo. Sobre los plazos, en el Ministerio de Trabajo prefieren no adelantar una fecha concreta de ratificación, pero confían vaya “pronto” al Consejo de Ministros.
Guy Ryder ha celebrado la decisión de España, en la conversación pública con la ministra Díaz organizada por el Ministerio de Trabajo este lunes, y ha bromeado con que España puede convertirse de hecho en el primer Estado que ratifique el Convenio 190, ya que Uruguay no ha concluido aún todo el proceso.
España deberá aprobar “algunos cambios en la legislación laboral” tras la ratificación en el Congreso de los Diputados, explican fuentes oficiales, para adaptar el marco normativo nacional a esta perspectiva del acoso que recoge el convenio internacional. El plazo que establece la OIT para realizar estas modificaciones internas es de “12 meses después de registrar” la ratificación.
Contra el acoso también entre iguales
La ministra ha explicado que el convenio, aprobado el pasado verano en Ginebra, implicará cambios para las empresas españolas, que deberán prevenir y actuar contra el acoso en el trabajo desde esta nueva perspectiva. Yolanda Díaz ha afirmado que en la actualidad el acoso en la legislación laboral está entendido desde una lógica vertical, de abuso de poder de superiores sobre sus trabajadores dependientes, pero este convenio amplía el concepto de acoso a relaciones horizontales y transversales.
De este modo, se tendrá que prevenir y actuar ante el acoso de un becario contra su compañera becaria sobre la que no ejerce poder, por ejemplo. Otra de las novedades del convenio internacional consiste en que se extiende la protección contra este abuso a más trabajadores, independientemente de su vínculo contractual, como es el caso de las becarias, que no tiene una vinculación laboral con la empresa.
Además, el acoso no quedará encerrado en el centro de trabajo, ha sostenido Yolanda Díaz, sino que se deberá proteger a las víctimas también en otros espacios relacionados con el mundo laboral, como las reuniones fuera de la oficina, los viajes de trabajo y los cursos de formación laboral, por ejemplo. También en las “comunicaciones digitales”, ha precisado Díaz. Fuentes de Trabajo recuerdan en este sentido el caso de la trabajadora de Iveco que se suicidó después de que se difundiera un vídeo suyo de contenido sexual entre sus compañeros.
El Gobierno de coalición también se ha comprometido a ratificar el Convenio 189 de la OIT, para ampliar los derechos de las trabajadoras domésticas, que no tienen derecho a paro, entre otras carencias. Por el momento, tampoco hay una fecha concreta para la firma, pero en Trabajo sostienen que la intención es que “vaya también rápido”.