Según el último estudio del Instituto Nacional de Estadística en los hogares españoles ya viven más animales que niños. En total se calcula que en nuestro país existen alrededor de 15 millones de mascotas, frente a los apenas 6,6 millones de niños menores de 15 años. Todas estas mascotas dejan una huella ecológica que podemos ayudar a reducir si sabemos reciclar adecuadamente los residuos que generan.
Uno de los errores más comunes es el que se da a la hora de que los dueños depositen en un contenedor los excrementos de sus animales de compañía. “Mucha gente se confunde y lo echa en el orgánico, o, simplemente por tener el plástico, lo pueden poner en el amarillo, no siendo ahí porque van excrementos claro” aclara Inés Quintián, presidenta de la Asociación Cultural y Deportiva de Propietarios de Mascotas de Ourense quien añade que las deposiciones de los animales deben tirarse “en el contenedor de restos con su tapa naranja”.
Evaluar el estado de los accesorios
Respecto a los accesorios que rodean al mundo animal como jaulas, juguetes o bebedores, Quintián también matiza que “es importante evaluar en qué estado están los accesorios de los que queremos deshacernos. Si están en perfecto estado yo recomendaría que lo donasen a una protectora. Si no, hay que llevarlo a un punto limpio. Y si tenemos dentro esas bolsas de plástico en las que nos viene la comida, pues al amarillo”.
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