El 'backstage' de la arquitectura
Cuando el Centro Andaluz de Arte contemporáneo propuso a Mediomundo arquitectos que organizara una exposición sobre arquitectura, sus integrantes, Marta Pelegrín y Fernando Pérez, aceptaron con una condición: no mostremos solo la obra final sino también cómo se llega a ella. Así nació la muestra Arquitectura dispuesta: preposiciones cotidianas, que tras pasar por Sevilla y Évora (Portugal) está ahora en Madrid para enseñar el proceso de ideación, construcción y uso de más de 30 proyectos que se han ido sumando a la exhibición en el año y medio que lleva de recorrido.
A través de la muestra, que se puede visitar hasta el domingo 6 de marzo en el espacio CentroCentro del Palacio de Cibeles, es posible ver el backstage o las bambalinas de la producción de arquitectura, y que habitualmente no se muestra al público. “Todos estos proyectos comparten una actitud que desde la arquitectura proponen una práctica material y una propuesta espacial crítica, que devienen en una intensificación de la relación con el medio urbano, socioeconómico y productivo en que se construyen”, explica Pelegrín.
“Disponer”, explica la arquitecta, significa mostrar colocar y exhibir pero el título de la muestra también juega con el significado de algo que “se pone a disposición”. Los organizadores de la muestra pidieron a cada equipo que mostrara el material de trabajo que consideraran más representativo en un momento concreto del proceso de desarrollo. Y el resultado es tan variado como los proyectos que se exhiben: desde maquetas y planos en papel vegetal donde se ven los diferentes avances de los procesos, hasta cronologías fotográficas y bocetos que se despliegan sobre las mesas y las paredes a modo de instantánea de ese momento específico.
Muestra creciente
La muestra comenzó con 22 proyectos y en su tercera exposición ya hay 33 imágenes diferentes. “En el camino hemos ido encontrando nuevos proyectos que se han ido incorporando”, señala Pelegrín, quien también subraya que se van añadiendo conocimientos, experiencias y debates que surgen en los talleres y mesas redondas que acompañan la muestra.
Durante el recorrido de la exhibición se encuentran diferentes enfoques que subrayan los aspectos particulares de los proyectos. Así, en Viviendo vivienda se muestran procesos sobre “hábitats individuales, grupales y nuevos colectivos” y propuestas que plantean, documentan e informan “sobre diferentes accesos a la vivienda, como puede ser la cooperativa o el derecho de uso”, explica la arquitecta. En Procesando Proyectos los equipos muestran “una actitud crítica y reflexiva con el espacio cultural y el medio económico y social en el que se desarrolla”.
Los proyectos que reivindican el uso y la construcción del espacio común “desde la dinamización social y el trabajo con la vecindad” aparecen agrupados en torno a las mesas Compartiendo espacios, y en ella se pueden ver procesos como el de La Carpa: espacio artístico, que Recetas Urbanas, puso en marcha en Sevilla, o el Plan Cañada que llevó a cabo Todo por la Praxis en Madrid.
“Desde diferentes enfoques se muestran procesos de proyectos de equipamientos urbanos, como puede ser una biblioteca, un centro social o una residencia de estudiantes y procesos donde se implica a diferentes agentes ya sean sociales, productivos, institucionales o vecinos y usuarios en su diseño y construcción”, afirma la comisaria de la muestra. Y añade: “Si proyectar en arquitectura es un despliegue de acciones y verbos con los que sintetizar un proceso de pensamiento que genera espacio, las preposiciones nos ubican en él: construyen una posición consciente que relaciona los sujetos con su situación en el espacio -ante, bajo, entre, desde, en, hacia, hasta, sobre, tras…-, y, sobre todo, vinculan la arquitectura con aquellos a los que implica -de, contra, sin, a, por, con, para…- para producir, diseñar y transformar nuestro espacio cotidiano”.