Cinco limpiadoras denuncian que llevan 35 años cobrando hasta un 30% menos que sus compañeros sólo por ser mujeres
Cinco limpiadoras del hospital público Perpetuo Socorro de Badajoz han sentado en el banquillo a las dos empresas que han sido responsables del servicio de limpieza tras constatar que han cobrado durante 35 años hasta un treinta por ciento menos que sus compañeros por el simple hecho de ser mujeres.
Se trata del plus por peligrosidad y toxicidad de obligado cumplimiento que recoge el convenio colectivo, y que durante todo este tiempo se ha 'obviado' en las nóminas.
Denuncian que durante décadas han dejado de percibir cada mes entre 100 y 200 euros, dependiendo de la antigüedad de la persona trabajadora. Una cantidad importante si se tiene en cuenta sus bajos sueldos, en torno a 700 euros hasta la entrada en vigor del nuevo salario mínimo.
Palicrisa y Eulen, a juicio
En el juicio, que se celebró días atrás en los Juzgados de los Social de Badajoz, han denunciado a las empresas Palicrisa y Eulen, responsables del servicio. Ésta última subrogó el contrato de limpieza hace dos años, aunque la brecha salarial ha continuado según denunciaron en la vista oral.
Se da además la circunstancia de que son ellas las que han estado en contacto con materiales tóxicos. Han sido las mujeres las encargadas de recoger toda la basura de quirófanos, urgencias, diálisis o salas de hepáticos, explica Estrella María Santiago, abogada de las mujeres.
“También en las habitaciones de aislamiento, expuestas a enfermedades infecciosas, mientras que sus compañeros hombres se han limitado a transportar el contenedor azul cuando ya estaba todo el material peligroso insertado dentro”.
Una vulneración 'fragante' de sus derechos
La letrada ha explicado a este diario que en el juicio han reclamado una indemnización por los honorarios que no han percibido durante 35 años consecutivos.
Ante estos hechos entiende que se ha cometido una vulneración 'flagrante' de sus derechos como trabajadoras, contraria a la Constitución Española. Todos, hombres y mujeres, pertenecen a la misma categoría profesional y tienen el mismo nivel retributivo (en teoría).
Han aguantado muchos años, y la abogada apunta al miedo que puede sentir una mujer veterana a perder el empleo que ha tenido toda su vida laboral. Ante las circunstancias, y por ‘dignidad’, la letrada se ha decidido a apoyarlas “e ir a por todas”.
Una desigualdad más
Se suma una desigualdad más, y es que durante los años que el servicio ha estado en manos de Palicrisa –la primera empresa adjudicataria– los hombres han recibido un plus adicional de entre 60 y 215 euros que no aparece en el convenio. Se trata de un extra voluntario y arbitrario que casualmente iba siempre destinado a los hombres. De modo que las mujeres han estado doblemente discriminadas.
De las 900 nóminas a las que ha tenido acceso la abogada, en sólo dos casos una mujer ha sido beneficiaria del complemento voluntario. En los 888 casos restantes siempre ha recaído en nóminas de hombres.
Cuando Eulen subrogó el servicio hace dos años eliminó este incentivo voluntario, aunque denuncian que la desigualdad ha continuado porque no se les ha abonado el plus de obligado cumplimiento, el que está recogido en el convenio colectivo. “Por muchos derechos adquiridos que tengan los hombres no puedes seguir vulnerando y discriminándolas a ellas por ser mujeres. Se puede subsanar cuando sabes que estás cometiendo una conducta discriminatoria”, señala la letrada Estrella Santiago al respecto.
En este sentido quiere aclarar que sus clientas no se oponen a que los hombres cobren el plus, lo que defienden es su derecho a disfrutarlo al igual que ellos.
“Siguen realizando el trabajo peligroso”
La empresa, explica la abogada, ha alegado que hoy en día no se producen este tipo de toxicidades “y que ahora mismo no lo debería cobrar nadie”. Sin embargo incide en que en la vista oral se pudo demostrar delante del juez que ellas siguen entrando en quirófanos. Que ellas han seguido en contacto con las jeringuillas o agentes contaminantes, que “siguen expuestas a riesgos químicos, biológicos y patológicos”.
Tras la celebración de juicio, y a la espera de que salga la sentencia, su sensación es positiva. Tienen a su favor otros fallos similares que han marcado jurisprudencia en el mismo sentido, en este caso emitidas por el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.
En estas sentencias el alto tribunal obliga a devolver a otras trabajadoras la reclamación de la cantidad que no han percibido por pluses recogidos en el convenio.