Pablo Casado: “No es posible que haya papeles para todos y que España pueda absorber millones de africanos”
Falso. Nadie ha hablado de dar “papeles para todos” ni mucho menos estamos ante un problema de “millones de africanos” entrando en España. En lo que va de año, han llegado en España por el mar o por las fronteras de Ceuta y Melilla unos 24.000 inmigrantes. Si todas estas personas se quedaran en España –cosa improbable, muchos se van a otros países de Europa–, estaríamos hablando de un inmigrante por cada 2.000 españoles. Esto significa que en una ciudad como Teruel (35.000 habitantes) la “invasión” sería de 17 personas.
A este ritmo, para que entre en España el primer “millón de africanos”, harían falta 25 años.
Ni siquiera si contamos el flujo total de inmigrantes desde África y Oriente Medio hacia Europa se alcanzan a sumar los “millones” de Casado. En lo que va de año han entrado en toda Europa unos 50.000 inmigrantes por su frontera sur, gran parte de ellos huyendo de la guerra. Muchos menos de los que llegaban otros años. Y para la población de la Unión Europea, todo un continente con 508 millones de personas, es una cifra ridícula: solo un inmigrante por cada 10.000 europeos.
Pablo Casado: “Hubo un efecto llamada con la visita del presidente del Gobierno para recibir a los inmigrantes del barco Aquarius”
Falso. El presidente Pedro Sánchez no fue de visita para recibir a los inmigrantes del Aquarius. Y el repunte en la inmigración desde la costa africana hacia España empezó mucho antes siquiera de que el PSOE llegará a La Moncloa. Arranca en 2016, con el PP en el Gobierno, y lleva subiendo desde 2013. Los datos son bastante claros (gráficos sobre la llegada de inmigrantes a España).
Pablo Casado: “Hay estudios policiales que dicen que hay un millón de inmigrantes en las costas libias que están planteándose una nueva ruta a través de España” (...) “Hay ONGs que calculan que hay 50 millones de africanos que están recabando dinero para poder hacer esas rutas”
Falso. Los “estudios policiales” de los que habla Casado simple y llanamente no existen. Desde eldiario.es hemos preguntado al PP por ellos, sin obtener una respuesta concreta. Lo más parecido a las afirmaciones de Casado es este tuit de un sindicato policial, la UFP; un falso dato que sus portavoces también han hecho circular por algunas tertulias. La UFP también parece ser la “ONG” de la que habla Casado, citando cifras sin fundamento con la misma ligereza con la que plagió la web del Congreso para un libro sobre la marca España.
Aparte de los supuestos “estudios” de este sindicato policial, el dato real más parecido al que difunde Casado es un informe de 2016 de la Organización Internacional de Migraciones, que cifró en “alrededor de un millón” de personas el número de inmigrantes que acogía Libia, una cifra tan redonda como probablemente poco científica. Pero ni son datos actualizados, ni el informe dice que todos ellos estén planeando entrar en España, ni tampoco que se encuentren en la costa. Muchos de ellos llevan años viviendo en Libia, desde la época de Gadafi.
Por comparar, en España viven alrededor de 5 millones de extranjeros, la inmensa mayoría legales –son casi un millón menos de los que había hace ocho años–. Deducir de este dato que 5 millones de inmigrantes están esperando en Los Pirineos para entrar en Francia sería tan manipulador como los bulos que difunde Casado.
Pablo Casado: “Nosotros somos solidarios con quien lo necesita”
En lo que va de año han muerto en el Mediterráneo unas 1.500 personas. Y el único cambio relevante en la política de inmigración que ha tomado el nuevo Gobierno, y que el PP cuestiona, ha sido abrir los puertos españoles a los barcos de las ONG que los rescatan desde alta mar, en cumplimiento de los tratados internacionales suscritos por España, frente a la política xenófoba italiana de Matteo Salvini. ¿Cuál habría sido la “solidaridad” de Casado ante las personas del Aquarius? ¿Dejar que se ahogaran? ¿Cerrar los puertos, como hace la ultraderecha italiana?
Pablo Casado: “Voy a visitar Ceuta y Algeciras para abrazar a la Guardia Civil y a la Policía Nacional”
Sin desmerecer el trabajo de las fuerzas policiales, que es cierto que están desbordadas, son muchos más quienes merecen un abrazo. Ya que viaja Casado hasta allí para hacerse la foto, que abrace también a los voluntarios de las ONG que, de forma altruista, también trabajan en la frontera ante esta crisis humanitaria.
Pablo Casado: “No es sostenible un Estado de bienestar que pueda absorber a los millones de africanos que quieren venir a Europa”
Falso. Es justo al contrario. El impacto económico de la inmigración sobre los países europeos es positivo. Los inmigrantes reciben por prestaciones sociales menos de lo que aportan en impuestos a las arcas públicas, según demuestran varios estudios. En el caso de España, con su envejecida pirámide de población, la inmigración no solo es positiva sino también imprescindible. Según el FMI, España necesitará 5,5 millones de inmigrantes durante los próximos 30 años para poder mantener las pensiones.
Pablo Casado: “Como no es posible tenemos que empezar a decirlo, aunque sea políticamente incorrecto”
Cada vez que alguien dice ser “políticamente incorrecto” hay altas posibilidades de que vaya a lanzar un discurso xenófobo, fascista, machista o reaccionario. En el caso de Casado, sus mentiras sobre la inmigración son las mismas que también utilizan Donald Trump, Matteo Salvini o Marine Le Pen. O Santiago Abascal, el líder de Vox, un partido al que el PP cada día se parece más.
Pablo Casado está utilizando la inmigración por puro interés electoral, porque en toda Europa, lamentablemente, ha quedado acreditado que tocar este resorte funciona. Porque la realidad de los inmigrantes es más difícil de explicar que la demagogia irresponsable de los “millones de africanos”.
Es cierto que las rutas de inmigración hacia Europa desde el norte de África y Oriente Medio se están desplazando a España, pero como consecuencia de factores muy distintos al cambio de Gobierno o la decisión de acoger al barco Aquarius: por la situación política de Marruecos, el acuerdo de la UE con Turquía y el de Italia con Libia.
Este cambio de rutas sin duda provocará la llegada de más pateras y también espectaculares saltos de las vallas de Ceuta y Melilla, unas imágenes impactantes que llenarán los telediarios y que suponen un problema específico en esa frontera y en esas ciudades. Pero la llegada de inmigrantes sigue aún por debajo de las del año 2006 –con la crisis de los cayucos–, e incluso si llegamos a esas cifras, el problema real no será una crisis migratoria que ponga en peligro el Estado del bienestar, como plantea el líder del PP, sino una posible crisis humanitaria por la gestión de esas personas en los colapsados centros de recepción de migrantes en Andalucía, Ceuta y Melilla.
Hay un problema y se va agudizar en los próximos meses. A esa ola se quiere subir Casado. No es un problema nuevo ni imposible de gestionar; ya pasó antes con la llegada de los cayucos a Canarias. Pero es un problema diferente y de una magnitud muy distinta a la que señala el nuevo líder del PP.
Pablo Casado: “Tenemos que ser responsables y no populistas”
Y eso es justo lo contrario a lo que está haciendo Pablo Casado.