En negrita, algunas frases del discurso sobre el caso Bárcenas de Mariano Rajoy. discurso sobre el caso Bárcenas de Mariano Rajoy
Mariano Rajoy: “No es la primera vez que hablo de esta materia. Ya lo hice en una comparecencia abierta para todos los españoles a principios del pasado mes de febrero”
Falso. Aquella “comparecencia abierta para todos los españoles” fue su famoso discurso a través de una pantalla de plasma. En aquella ocasión, ni siquiera se atrevió a pronunciar la palabra “Bárcenas” ni tampoco quiso cuestionar la actuación de su extesorero, a pesar de que ya entonces habían aparecido sus millones en Suiza.
“En numerosas ocasiones y en diversos escenarios se me ha preguntado sobre el mismo. Otra cosa es que mis explicaciones no gusten.”
Falso. El problema no es que sus explicaciones no gusten. El problema es que no ha dado ninguna. Decir “la segunda ya tal” no es dar explicaciones. Decir “todo es falso salvo algunas cosas” no es dar explicaciones. Manipular las pocas preguntas que permite a la prensa para poder leer un papel como respuesta no es dar explicaciones. Y comparecer ante los diputados como ha hecho hoy, sin permitir un debate parlamentario más fluido y evitando a cambio la habitual rueda de prensa de verano no es dar explicaciones.
“No comparezco por ninguna otra razón, Señorías, y mucho menos porque me inquiete en lo personal esa irreflexiva Moción de Censura, de la que hablaré luego y que yo tendría especial gusto en debatir, si ello fuera gratuito para España. ”
Falso. Su intención inicial fue irse de vacaciones sin acudir antes al Congreso; por eso su partido rechazó las peticiones de otros grupos para que hablase allí. Solo lo ha hecho después de que la oposición amenazase con una moción de censura para obligarle a comparecer, después de que la prensa internacional cuestionase sus silencios y después de que sus propios votantes den más veracidad a la palabra del imputado Bárcenas que a la suya.
“Ésta es una historia que comenzó hace más de cuatro años, a principios de 2009, cuando, un buen día, nos enteramos de que al tesorero del Partido Popular lo habían imputado por el llamado ”caso Gürtel“.
Falso. Esta es una historia que comenzó mucho antes, hace más de dos décadas, cuando el caso Naseiro quedó cerrado en falso y el PP echó al jefe pero mantuvo en el puesto a los demás hombres de la tesorería, incluido Luis Bárcenas. ¿O es que acaso el presidente del PP, que lleva lustros en cargos de dirección, quiere hacernos creer que no sabía absolutamente nada sobre cómo funcionaba la financiación de su partido?
“El juez Garzón, que era el instructor, acusaba al señor Bárcenas de haber cobrado comisiones ilegales. Poco después supimos que la operación judicial había venido acompañada de una cacería en la que, entre otros, participaron el juez instructor y el entonces ministro de Justicia, que tuvo que presentar la dimisión por este episodio.”
Falso. El ministro de Justicia dimitió por cazar sin la licencia adecuada para la comunidad autónoma en la que estaba, no por coincidir en público –junto con decenas de personas más– con el juez Garzón. Si Bermejo quisiera conspirar con Garzón habría hecho lo que ha hecho el actual ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, que se ha reunido en secreto con uno de los abogados de los procesados en la Gürtel.
“Estaba muy reciente un episodio en el que una persona que hoy, con toda justicia, se sienta en el banco azul, el ministro de Industria, Energía y Turismo, había experimentado en carne propia una injustificada persecución por acusaciones que después se revelaron como totalmente falsas.”
Falso. Las acusaciones contra el ministro José Manuel Soria no se revelaron falsas. Lo que pasó fue algo muy distinto: que el presunto delito de cohecho había prescrito.
“Aún bajo el anterior Gobierno, en julio de 2011, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid archiva la causa contra él y en octubre de ese mismo año ratifica el archivo.”
Falso. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid depende en gran medida de la Asamblea de Madrid, que era y sigue siendo del PP. Además, el juez Pedreira retiró la imputación a Luis Bárcenas después de innumerables presiones por parte del PP, tras varias gestiones de su intermediario, el abogado Trías Sagnier, y bajo la solapada amenaza de acabar como Baltasar Garzón por no haber rechazado las escuchas en prisión que sirvieron para sacar de la Audiencia Nacional al juez que destapó la Gürtel.
“Cuando tras varios recursos sobre la competencia del Tribunal el sumario vuelve a la Audiencia Nacional, el instructor en ese órgano jurisdiccional, en marzo de 2012, decide reabrir la causa contra el ex tesorero. Es decir, bajo el Gobierno anterior se archiva la causa y bajo este Gobierno se le vuelve a imputar.”
Falso. No fue el juez: fue la sala. Y lo hizo porque las evidencias eran palmarias, como después se demostró.
“La Justicia ha actuado en este caso sin interferencia alguna del poder político.”
Falso. Las presiones del PP sobre el caso Gürtel han sido innumerables y bastante obvias. No solo sacaron de la carrera judicial al juez Garzón, después de cuestionar a cada paso su investigación. No solo presionaron al juez Pedreira hasta que retiró la imputación a Luis Bárcenas. No solo se personaron como acusación popular en el caso para, desde dentro, torpedear la investigación e intentar que la justicia retirase las acusaciones contra el extesorero. No solo cambiaron al fiscal en cuanto llegaron al poder, y también a la cúpula antifraude que investigaba el caso. No solo el propio Rajoy llamó por teléfono al presidente del CGPJ para interesarse por el tema un día antes de que Barcenas acudiese a testificar. Es que las “interferencias” continúan hoy para apartar del caso al titular del juzgado número cinco, Miguel Carmona.
“Di crédito al señor Bárcenas, Señorías. Era una persona de confianza en el partido. No fue tesorero más que un año, pero desde mucho antes había tenido responsabilidades importantes como gerente.”
Falso. Luis Bárcenas estuvo oficialmente como tesorero un año, pero extraoficialmente continuó llevando las cuentas del PP un año más.
“Creí en su inocencia. Lo hice hasta el momento en que, a los cuatro años de iniciadas las investigaciones, llegaron datos que confirmaban la existencia de cuentas millonarias en Suiza, no declaradas a la Hacienda Pública, a nombre del señor Bárcenas.”
Falso. El apoyo de Mariano Rajoy a Luis Bárcenas no terminó cuando el presidente supo de sus millones en Suiza. El Gobierno tuvo noticia de esas cuentas a finales de noviembre de 2012 y el extesorero siguió con secretaria, despacho, coche oficial, sueldo y abogados pagados por el PP hasta que se fue de la lengua, y aparecieron sus papeles en El País. Es más, al día siguiente de que se publicasen en prensa los detalles sobre la cuenta en Suiza, Mariano Rajoy siguió mandando abrazos y su apoyo por SMS a Bárcenas. “Se fuerte”, decía Rajoy.
“¿Me equivoqué al confiar en una persona inadecuada? Sí. Cometí el error de creer a un falso inocente, pero no el delito de encubrir a un presunto culpable.”
Falso. Las maniobras para proteger al presunto culpable siguieron después de aparecer el dinero en Suiza; una de las más obvias fue la presión para que Gómez Bermúdez no se quedase con el caso Bárcenas. Y también es falso que Rajoy encubriese a un falso inocente. Solo aplicó el protocolo del partido, lo mismo que sigue haciendo, por ejemplo, con Carlos Fabra.
“¿Se han pagado sueldos? Sí. ¿Se han pagado remuneraciones complementarias por razón del cargo? Sí. ¿Se han pagado anticipos o suplidos a justificar por gastos inherentes al desempeño del cargo? También, como en todas partes.”
Falso. En “todas partes” no se pagan esos “suplidos a justificar por gastos inherentes al desempeño del cargo” que el resto del país llama sobresueldos. La mayor parte de los partidos no pagan sobresueldos a sus cargos públicos. Lo normal en muchos de ellos es justo lo contrario: que los cargos públicos aporten un porcentaje de su sueldo al partido, en vez de duplicar o triplicar el sueldo público gracias al partido (cuyo dinero es también público). La diferencia es que no todos los partidos, o casi ninguno, nada en la abundancia, como el PP.
“Declarar los ingresos privados a Hacienda ya es una responsabilidad individual. De eso, ni el señor Bárcenas ni nadie que no sea la Hacienda Pública sabe nada”.
Falso. No se sabe “nada” porque sus principales dirigentes han incumplido un compromiso que el propio Rajoy asumió: mostrar sus declaraciones de la renta. Y pagar en negro es un delito doble: del que no lo declara y del que lo utiliza.
“Mis declaraciones de renta y de patrimonio de los últimos diez años están a la vista de todo el mundo, Señorías, y me parece que tienen bastante más valor que un renglón escrito al vuelo en un papel arrugado.”
Falso. Lo que el presidente define como “un renglón escrito al vuelo en un papel arrugado” es una prueba sometida a investigación judicial en la Audienca Nacional. Y los peritos que han evaluado esa prueba han concluido que el papel es original y que se escribió a lo largo de 20 años. Además, gran parte de los “renglones” están avalados por otra documentación, empezando por la propia contabilidad oficial del PP depositada en el Tribunal de Cuentas.
“Lo que sí sabemos es que el único hecho probado hasta hoy es el del dinero que ha aparecido en las cuentas del señor Bárcenas en la banca suiza.”
Falso. También está probado, entre otras cosas, que Luis Bárcenas trabajó durante más de dos décadas en la cocina del PP y que nunca tuvo responsabilidad directa en ninguna adjudicación ni recalificación. Y que, por tanto, es muy difícil que pudiese robar una fortuna así sin la ayuda de más dirigentes del PP.
“Ése el único hecho cierto hasta ahora, como es cierto que desde hace cuatro años el señor Bárcenas ya no es tesorero del Partido Popular y que desde hace más de tres no ostenta ninguna representación política, ni siquiera militancia en ese partido.”
Falso. El único hecho cierto sobre la relación de Luis Bárcenas y el PP que hasta hace solo cinco meses cobraba el segundo sueldo más alto del PP. No está mal, para no ser siquiera militante.
“Nosotros no presentamos imputados en las listas electorales”
Falso. Ahí está el grupo parlamentario Gürtel de las cortes valencianas para demostrar que es mentira.
“Dejemos que los jueces trabajen, Señorías. Una vez que la especie está lanzada, lo único sensato que se puede hacer no es agitarse, ni amplificarla, sino dar tiempo a que el juez resuelva lo que proceda.”
Falso. Lo único sensato que se puede hacer es dimitir.