La alcaldesa de Vitoria ultima un acuerdo con EH Bildu para salvar los presupuestos después de llegar a la alcaldía con el PP

La alcaldesa socialista de Vitoria, Maider Etxebarria, puede lograr la cuadratura del círculo. Tras las elecciones municipales de mayo, cerró una coalición con el PNV que fue apoyada por el PP para impedir que gobernara la lista más votada, la de EH Bildu. Ahora, sin embargo, ultima un acuerdo con la coalición liderada por Rocío Vitero para sacar adelante sus primeros presupuestos tras el 'no' de los 'populares' y la posición también contraria de Elkarrekin (Podemos, IU, Berdeak Equo y Alianza Verde). De momento, este miércoles se ha acordado posponer hasta el viernes la votación de las enmiendas para seguir perfilando las propuestas lanzadas por EH Bildu.

El nuevo referente de la formación, el candidato a lehendakari Pello Otxandiano, ha indicado en Radio Euskadi que hay una “posibilidad” de acuerdo en Vitoria después de meses de fuertes críticas a Etxebarria por valerse del PP para arrebatarles la alcaldía. “Tenemos disposición absoluta también en Gasteiz de llegar a acuerdos”, ha afirmado. EH Bildu no apoyó ni la reforma educativa vasca ni los presupuestos a finales de 2023 pero, con el cambio de año, se han anunciado ya pactos sectoriales en materia de Medio Ambiente o Infancia en el Parlamento Vasco y ahora se ha abierto un nuevo punto de encuentro en la capital, donde a Etxebarria empezaba a pesarle su minoría.

Con todo, Otxandiano entiende que “en este punto” de las conversaciones “la discreción es fundamental”. Desde el equipo de Vitero se limitan a confirmar que existen “negociaciones abiertas” pero no entran en más detalles tampoco. “Se sigue hablando, se sigue negociando, se siguen haciendo cuentas. Hay margen para la negociación, pero no está hecho”, indican, por su parte, desde el PSE-EE de Vitoria. El otro socio del Gobierno local, el PNV, sí ha sido más explícito. “Hay voluntad de ambas partes, tanto del equipo de Gobierno como de EH Bildu. A ver si al final se concreta. Espero que sí”, ha señalado el edil Iñaki Gurtubai, el 'número dos' de Beatriz Artolazabal, la teniente de alcaldesa.

Hace solamente una semana, la regidora socialista apuntó a la prórroga como la opción más factible. De hecho, que se haya iniciado el ejercicio sin tener aprobado un nuevo documento económico ya ha motivado una prórroga automática hasta que se conozca el desenlace de estas negociaciones. El de no tener apoyos es el escenario al que se han visto abocados PNV y PSE-EE allí donde tienen minoría, en las Diputaciones de Álava y en Gipuzkoa, en concreto. Encima de la mesa hay una propuesta de 459 millones de gasto con una subida del 5% con respecto a los números de 2023 y venía precedida de un debate sobre los ingresos en el que la oposición bloqueó los planes de la alcaldesa.

Se da la circunstancia de que en otros municipios de Álava se han producido acuerdos de lo más variado. En Laguardia el PNV ha pactado con el PP después de apoyarse en EH Bildu para que no gobernaran los 'populares'. En Oyón el PSE-EE se ha abstenido para que EH Bildu tenga presupuestos. En Iruña de Oca, los socialistas -en la alcaldía- han cerrado un acuerdo con los abertzales. A nivel de Álava, el Ejecutivo de PNV y PSE-EE ya retiró los presupuestos pero Ramiro González ha salvado las medidas fiscales con el PP. En el caso de Vitoria, durante la pasada legislatura funcionó una coalición inversa liderada por el PNV de Gorka Urtaran y también en minoría. Los cuatro presupuestos salieron entonces no con el PP ni con EH Bildu. Antes, Urtaran llegó al poder precisamente por el apoyo de EH Bildu como alternativa a Javier Maroto, aunque el de PP sí llegó a algunos acuerdos con una marca entonces conocida como Bildu.