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Txema Alonso

15 de abril de 2022 21:30 h

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El paraciclismo es la adaptación del ciclismo a su práctica por personas con alguna discapacidad funcional o visual. La primera adaptación tiene que ver con el propio instrumento de su práctica. Y así, en la reglamentación vigente de la Unión Ciclista Internacional se admite y regula hasta cuatro tipos distintos: la bicicleta -convencional o con algunas modificaciones en bielas o frenos- el triciclo, el tándem y la 'hand-bike'. La segunda, con el intentar que la competición siga el principio de igualdad de oportunidades, para lo que se establece un sistema de clases de participantes en función del grado de discapacidad, de forma y manera que la rivalidad se exprese entre grupos lo mas homogéneos posibles en términos de potencialidad deportiva.

Entrando en el capítulo de los vehículos, el paraciclismo se puede practicar, ya está dicho, desde estos cuatro tipos diferenciados:

Triciclo

En este contexto, es un vehículo de tres ruedas impulsado por el pedaleo de una o dos piernas. En la normativa UCI son utilizados por aquellos deportistas que presentan problemas de equilibrio y/o motrices que no les permiten utilizar las bicicletas convencionales. Las personas afectadas de parálisis o lesión cerebral son las que más usan este este tipo de ciclos.

En las carreras de ruta, debe llevar instalado una barra de seguridad en la parte posterior para evitar que la rueda delantera de otro triciclo entre en el espacio entre las dos ruedas del deportista que le precede.

Tándem

Es una bicicleta de dos plazas en la que una persona con déficit visual es acompañada por una sin discapacidad alguna que hace la función de guía. El tándem debe disponer de dos ruedas de igual diámetro, que se ajusten a los principios generales de construcción de la UCI para las bicicletas. La rueda delantera debe ser dirigible por el corredor delantero, reconocido como “piloto”. Ambos corredores deben mirar hacia delante en la posición tradicional de ciclista y la rueda trasera debe ser accionada por ambos ciclistas mediante un sistema compuesto por pedales y cadenas.

'Hand-bike'

Es un triciclo adaptado para ser accionado por los brazos. Están ideados para deportistas con discapacidad de movilidad como consecuencia de lesiones medulares, amputaciones, etc. En su construcción, la bicicleta de mano es un vehículo de tres ruedas con un cuadro abierto de construcción tubular, que se ajusta a los principios generales de construcción de la UCI para las bicicletas, salvo que los tubos del cuadro del chasis no tienen que ser rectos y que para la construcción del asiento o del respaldo el diámetro máximo de los tubos del cuadro puede superar el máximo definido por los principios generales de la UCI.

La bicicleta de mano se propulsa únicamente mediante un juego de cadenas y un tren de transmisión de bicicleta convencional de bielas, platos, cadena y engranajes, y las empuñaduras sustituirán a los pedales. La propulsión se realizará con las manos, los brazos y la parte superior del cuerpo. El dispositivo de cambio debe estar dentro de los extremos del manillar, excepto para H1(ciclistas tetrapléjicos), que puede colocar su dispositivo de cambio en el lado de su cuerpo para permitir que su brazo cambie de marchas. El dispositivo de frenado deberá estar fijado en las empuñaduras, excepto para H1, que puede montarlo en cualquier otro sitio que permita el accionado del mismo.

Al igual que en los triciclos, en las carreras de ruta, debe llevar instalada una barra de seguridad en la parte posterior para evitar que la rueda delantera de otro triciclo entre en el espacio entre las dos ruedas de la bicicleta que la precede.El plato más ancho, deberá tener un guarda-cadena bien fijado para proteger al ciclista. Las bicicletas adaptadas son similares a las convencionales aunque pueden presentar modificaciones (sistema de frenos, cambios, bielas…) para facilitar su uso por deportistas con discapacidades tales como la amputación de alguna extremidad o alguna lesión neurológica generadora de disfunciones equivalentes.

La evaluación médico-funcional

Para competir en paraciclismo es preciso pasar por una evaluación medico funcional tras el cual se asigna al corredor una clase deportiva y un estatus de la clase deportiva. Es precisamente el que las competiciones de paraciclismo se organicen en torno a las diferentes clases, que se puede dotar de criterios de igualdad de oportunidades en la misma, toda vez que los y las deportistas compiten en un mismo rango de capacidad/discapacidad.

La evaluación del deportista, que está regulada estrictamente por la UCI y el IPC -Comité Paralímpico Internacional-, incluye las siguientes fases: valorar si el deportista tiene una discapacidad elegible para el ciclismo adaptado. Evaluar si el deportista cumple los criterios de discapacidad mínima para el ciclismo adaptado. Evaluar el grado de capacidad del corredor para ejecutar las tareas y actividades específicas del Ciclismo Adaptado. Realizar la evaluación por observación directa, y finalmente, asignar una clase deportiva a cada deportista

Las discapacidades elegibles en ciclismo adaptado son discapacidades funcionales y visuales. Tras la pertinente evaluación funcional y teniendo en cuenta la herramienta deportiva y el tipo y grado de discapacidad funcional, los y las deportistas se agrupan en distintas clases ordenadas siempre de mayor a menor nivel de discapacidad. Así, en la modalidad de 'hand-bike', se diferencian cinco clases (H1,H2,H3, H4 Y H5).

En la modalidad de triciclos, los deportistas se agrupan en dos categorías, T1 y T2, siendo reservada la primera para quienes presentan mayor nivel de discapacidad.

En la división de bicicletas el reglamento UCI establece cinco clases diferenciadas (C1, C2, C3, C4, C5) en las que se engloban deportistas con lesiones que afectan a la funcionalidad de las extremidades en distintos grados (varios tipos de hemiplejia y de disfunciones motoras, incluyendo diversos grados de amputación de brazos y piernas), pero que sin embargo no les impiden utilizar (a veces con prótesis) bicicletas convencionales ligeramente adaptadas.

En la categoría de tándem sólo se da una clase, la B, en la que se agrupan las y los ciclistas con problemas oculares que afectan total o severamente a su visión, de forma tal que les impiden conducir bicicletas convencionales. La deficiencia visual del deportista debe resultar en una agudeza visual menor o igual a 6/60 o un campo de visión limitado a menos de 40 grados de diámetro.

Las pruebas deportivas en el paraciclismo

En paraciclismo, hombres y mujeres pueden competir tanto en modalidad de pista o ruta. En pista hay pruebas de 500 o 1.000 metros contrarreloj, persecución individual (3.000-4.000 metros), 'scratch' y velocidad por equipos. En ruta hay pruebas de contrarreloj individual, fondo en carretera y relevos por equipos (en modalidad hand-bike).

La estructura competitiva programada y supervisada por UCI, se compone de pruebas estatales, copas continentales y copas del mundo y, en colaboración con el Comité Paralímpico Internacional, los Juegos Paralímpicos.