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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Bilbao enfila el último tramo de la legislatura con la asignatura pendiente de la entrada de la alta velocidad

El alcalde de Bilbao, Juan María Aburto, ha reclamado este martes que se “agilice” la entrada soterrada de la alta velocidad en la capital vizcaína. Es un proyecto que, tras innumerables retrasos, está todavía pendiente de arrancar, aunque ya existe un acuerdo entre el Gobierno vasco y el central para llevarlo a cabo. “Bilbao necesita mas conectividad por tierra, mar y aire para poder crecer en expectativas y atender las demandas de una ciudad de pequeño tamaño pero referente en la zona sur de Europa”, ha señalado el alcalde en el último pleno del estado de la villa antes de las elecciones municipales de la primavera, lo que significa que se arranca el ultimo tramo de la legislatura sin tener concretado uno de los proyectos en los que más se ha implicado el alcalde y que le ha costado también enfrentamientos con la Diputación Foral de Bizkaia, que todavía no ha concretado si financiará parte de esta obra que Aburto considera estratégica para Bilbao y también para Bizkaia.

En su intervención ante el pleno, el alcalde ha reclamado también respuesta al arranque de las obras del soterramiento de las vías de FEVE en Zorroza y el avance de la línea 4 del Metro de Bilbao, la que llegará hasta Rekalde. Todo ello como contribuciones a unas transformaciones de la ciudad para que el denominado 'Efecto Guggenheim' “se convierta cada día más en el ”Efecto Bilbao', tal y como nos lo reconocen a nivel internacional“, ha señalado. Frente al ”panorama apocalíptico“ pintado por la oposición, Aburto ha considerado que ”Bilbao tiene un estupendo presente pero tiene un gran futuro por delante, que los estamos construyendo a diario“. ”Queremos llegar desde lo local a lo global“, ha afirmado. Y en este sentido, ha asegurado: ”Cada día son más las ciudades, empresas y personas que se nos acercan a conocer, a colaborar, a invertir, a desarrollar sus proyectos en Bilbao“. Ha recordado las cifras récord de entrada de viajeros por el aeropuerto de Bilbao o el verano que hemos vivido con gran afluencia de turistas, y, por ello, ha querido transmitir ”confianza frente a la incertidumbre“ que se cierne sobre este otoño: ”Se está en una situación de mayor dificultad pero no ante un panorama apocalíptico“, ha dicho, y ha recordado que Bilbao ”ha salido de varias crisis económicas“: ”Estamos seguros de que vamos a volver a conseguir hacer frente a cualquier situación adversa“.

En un discurso autocomplaciente con la gestión de su equipo de Gobierno hasta ahora, ha destacado que en situaciones muy adversas para la gestión, como ha sido todo el periodo de pandemia, se ha conseguido completar hasta el 81% del programa de plan de mandato, y que se han desarrollado otros planes que no estaban incluidos como consecuencia de la necesidad de responder a cuestiones específicas de la crisis. En cualquier caso, ha asegurado que en estos ocho meses que quedan de legislatura esperan completar el 100% del plan porque, según ha recordado, “no es que nos queden solo ocho meses, sino que nos quedan todavía ocho meses de trabajo continuo”. “El futuro electoral no hace que bajemos la guardia”, ha reiterado.

Aburto, que todavía no ha desvelado si repetirá a la reelección, ha calificado esta legislatura como la del “recuerdo” y del “acuerdo”. El recuerdo, fundamentalmente por la crisis de la COVID-19 y las personas que han sufrido o fallecido. Y el acuerdo porque, según ha destacado, el Ayuntamiento de Bilbao ha sido un ejemplo de consitorio en el que “todos los grupos hemos hecho piña a favor de la ciudadanía”, frente a lo que ha calificado de “ruido político en otros puntos del Estado”. En este sentido, ha dado las gracias a todos los partidos de la oposición -pese a que después han sido muy críticos con su gestión- y sobre todo ha puesto en valor la coalición PNV-PSE que ha conseguido “un Gobierno fuerte y sin fisuras”, ha dicho, y ha llamado ha seguir “colaborando” todos “sin peleas estériles”.

En cuanto a los proyectos de futuro, el alcalde ha puesto en valor las actuaciones en los distintos barrios de Bilbao. “Por difíciles que sean algunas peticiones, siguen siendo nuestra prioridad”, ha señalado. “Los barrios son las venas que bombean sangre al corazón de la ciudad”, ha dicho. Además de los grandes proyectos como avanzar en los “Planes Especiales de Peñascal, Punta Zorrotza o Abando”, adelantándose a la llegada soterrada del AVE a Bilbao, Aburto ha destacado los eventos deportivos que están previstos para los próximos años en la capital vizcaína y que siguen colocándola en el foco internacional: el primero de ellos la salida del Tour en 2023, y después las finales de futbol de Champions Femenina en 2024 y de Europa League masculina en 2025.

Protestas de la Policía Municipal

Poco tiempo ha dedicado el alcalde a hablar de la seguridad en Bilbao, más allá de reiterar su apuesta por aumentar la presencia de la Policía Municipal en las calles de Bilbao -de jueves a domingo, sobre todo- y realización de una OPE anual además de los talleres de Seguridad en todos los distritos de Bilbao.

Precisamente al terminar su primera intervención, representantes de varios sindicatos de la Policía Municipal de Bilbao han interrumpido el pleno con carteles en los que pedían la dimisión de la concejal de Seguridad Ciudadana y primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Bilbao, Amaia Arregi. Ha sido la propia concejal les ha informado de que no podían intervenir en la sesión plenaria y les ha pedido que salieran y los congregados se han marchado en un momento en el que la sesión se encontraba en un receso de 15 minutos tras el discurso del alcalde. Los representantes sindicales de la Guardia Urbana se han concentrado este martes en el Centro Municipal de San Agustín y ante el Ayuntamiento de Bilbao, coincidiendo con la sesión plenaria, porque están en contra de los nuevos calendarios que se les quiere imponer para reforzar la presencia de los agentes en las calles en los fines de semana. Esta ha sido una de las cuestiones comunes en todas las intervenciones de los grupos de la oposición, que han reclamado al alcalde que dialogue con los sindicatos para llegar a un acuerdo.

La oposición pide más ayudas

Desde el PP, Raquel González ha reclamado más ayudas para los bilbaínos y a la vez una bajada de impuestos “de forma solidaria y suficiente”, y ha asegurado que es una cuestión que puede hacerse porque los próximos presupuestos se harán con récord de recaudación. También ha criticado que el Ayuntamiento se embarque en proyectos como el de la Torre Bizkaia y el centro de emprendimiento, que se inaugura el próximo lunes, en la que el Ayuntamiento invertirá 7,5 millones en 15 años y a la que la representante popular ha denominado 'Torre batzoki', una denominación ha molestado mucho al alcalde. Ha pedido a Aburto apoyo a la Policía Municipal y ha pintado un Bilbao con con robos e inseguridad en todos los barrios. En su intervención, González ha pedido que proyectos como la ampliación del Bellas Artes de Bilbao, se dejen para “periodos de vacas gordas”. Además ha reclamado más compromiso con las víctimas de ETA poniendo por ejemplo una placa en recuerdo de Miguel Ángel Blanco.

Ana Viñals, de Elkarrekin Podemos-IU-Equo ha criticado que el alcalde hable de recuperación porque está “fuera de la realidad” y ha considerado que las cifras de parados en la capital vizcaína, más de 21.000, son “muy preocupantes”. También ha criticado que el turismo es “muy dependiente del exterior”, por lo que ha considerado que debería pasarse de los grandes eventos internacionales a un modelo de “turismo estatal y sostenible”. Viñals también se ha mostrado preocupada porque el área de Vivienda sea el que tiene menos presupuestos y ha pedido un aumento de las ayudas de emergencia social. En materia de seguridad, ha afirmado que el pacto alcanzado no está resolviendo adecuadamente todos los retos, por lo que debe “evaluarse en profundidad” y ha pedido al Gobierno que negocie “lo antes posible” con los sindicatos policiales “un acuerdo estable” que asegure en Bilbao los medios necesarios. Viñals ha añadido que el alcalde no está dejando “un legado político claro en Bilbao” y Bilbao está “perdiendo liderazgo e identidad como ciudad”.

Por su parte, la edil de EH Bidu Jone Goirizelaia ha hablado de paro “crónico” en Bilbao de 20.000 parados. Junto a ello, ha citado otros problemas también “crónicos” como que las rentas medias no rebasan los 12.000 euros al año en barrios como Otxarkoaga o Uretamendi o la bolsa de 8.000 demandantes de vivienda asequible. Goirizelaia ha destacado que a todo eso se une el aumento de las hipotecas y la inflación. “Con un panorama tan catastrófico como nos auguran ahora, el Bilbao dinámico y lleno de visitantes que hemos visto los últimos meses fue un bello espejismo”, ha dicho. Por ello, ha asegurado que harán falta más medidas públicas frente a la carestía de la vida y cree posible que el Ayuntamiento pueda articular políticas, impulsar la transición energética, mejorar las condiciones laborales de funcionarios o intervenir sobre el derecho a la vivienda.

Por su parte, los grupos del PSE-EE y PNV han puesto en valor el pacto de coalición y han insistido en el mensaje del alcalde de que “no se dejara a nadie atrás”. La portavoz socialista,  Yolanda Díez, ha señalado que se está ante una “situación muy difícil” y desde el Ayuntamiento de Bilbao apuestan por “dar soluciones concretas, apoyando medidas de calado más global”. Diez ha destacado que los socialistas están en todos los gobiernos de los bilbaínos, del municipal, a la Diputación, el vasco y el central, y ha citado diferentes acuerdos del Gobierno de Sánchez como muestra de las medidas que toman. Además ha señalado que los socialistas tienen cultura de pacto y han demostrado ser un socio responsable.

Nekane Alonso, desde el PNV, ha destacado que seguirán “dándolo todo” para garantizar el bienestar y la calidad de vida, sin que “nadie se quede atrás” y ofreciendo “credibilidad y estabilidad”. “Y lo haremos con la vocación y voluntad de diálogo y consenso que nos caracteriza”, ha agregado. Según ha señalado, reivindican “la política con mayúsculas”, la “del acuerdo, la política sana y de verdad”.

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