Euskadi es un destino único para viajeras y viajeros. Con este blog, el Departamento de Turismo, Comercio y Consumo del Gobierno vasco quiere dar a conocer a todos los que tengan interés un modo de vida, un estilo, unos lugares y vivencias irrepetibles en ninguna otra parte del mundo. El blog también se ocupará de las políticas desarrolladas por el Departamento en defensa y protección de las personas consumidoras y usuarias.
Tiempo de sidra
Las sidrerías son normalmente caseríos, en su mayoría situados en Gipuzkoa, que cuentan con instalaciones para la elaboración y el embotellado de la sidra, y con un espacio en el que se instalan las kupelas (barricas) y algunas mesas corridas para dar cuenta de sus especialidades (tortilla de bacalao, bacalao frito con pimientos verdes y chuletón a la brasa).
En la temporada de sidrerías de enero a abril, en medio de una gran animación, se ha convertido en una tradición para los vascos acudir a estos templos de la sidra para practicar el ritual del “txotx”, sumamente bello y curioso. El propietario de la sidrería escoge una kupela y al grito de “txotx” invita a todos los asistentes a probar la sidra. El consumo del caldo es ilimitado.
La mayor parte de las sidrerías tradicionales se encuentran en las localidades guipuzcoanas de Astigarraga, Hernani y Usurbil. Gastronomía y arte se entremezclan en esta ruta que comienza en el Museo Chillida Leku, que acoge la obra de Eduardo Chillida en el caserío Zabalaga del siglo XVI, emplazado en el barrio Jauregi de Hernani. Partiendo del museo, por la GI-2132, llegaremos al casco urbano de Hernani, localidad muy animada, sobre todo los fines de semana durante la temporada del “txotx”. Son visitas de interés la iglesia de San Juan Bautista (siglo XVI), el convento de San Agustín (siglo XIII) y varios edificios en las calles Mayor (Kale Nagusia) y Kardaberaz.
Salimos de Hernani y tomamos la carretera GI-131 dirección a Astigarraga, capital indiscutible de la sidra. Esta localidad, con poco más de 4.000 habitantes, cuenta con una veintena de sidrerías. Merece probar el delicioso caldo, acompañado de bacalao, en tortilla o frito con pimientos; una buena chuleta, asada en la parrilla, bien tostada por sus dos caras y sangrante en el interior; queso de Idiazabal, elaborado exclusivamente con leche de oveja latxa; membrillo y nueces.
En Astigarraga encontramos también el Museo de la Sidra Vasca - Sagardoetxea consta de tres espacios diferenciados: el museo, el manzanal y el centro de cata y degustación. El espacio museístico está dotado de fotografías, paneles informativos, juegos y material interactivo.
Desde la plaza de Astigarraga, ascendiendo por la carretera a la derecha del ayuntamiento, vamos al barrio de Santio, y, desde allí, continuamos por la carretera de ascenso a Santiagomendi. Se trata de un área dominada por caseríos muy antiguos donde existen lagares con aperos utilizados para elaborar la sidra. Carretera arriba, llegamos a la ermita de Santiago, ubicada en el Camino de Santiago por la costa, paraje desde donde hay unas vistas inmejorables de la zona.
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Más info:
Las sidrerías son normalmente caseríos, en su mayoría situados en Gipuzkoa, que cuentan con instalaciones para la elaboración y el embotellado de la sidra, y con un espacio en el que se instalan las kupelas (barricas) y algunas mesas corridas para dar cuenta de sus especialidades (tortilla de bacalao, bacalao frito con pimientos verdes y chuletón a la brasa).
En la temporada de sidrerías de enero a abril, en medio de una gran animación, se ha convertido en una tradición para los vascos acudir a estos templos de la sidra para practicar el ritual del “txotx”, sumamente bello y curioso. El propietario de la sidrería escoge una kupela y al grito de “txotx” invita a todos los asistentes a probar la sidra. El consumo del caldo es ilimitado.