Viento del Norte es el contenedor de opinión de elDiario.es/Euskadi. En este espacio caben las opiniones y noticias de todos los ángulos y prismas de una sociedad compleja e interesante. Opinión, bien diferenciada de la información, para conocer las claves de un presente que está en continuo cambio.
Cierra la puerta al fuego
Son las cuatro de la madrugada y te despiertas sorprendida por un fuerte alboroto. Cuando logras despejarte un poco comienzas a escuchar portazos, pasos precipitados y gritos de angustia pidiendo ayuda. También empiezas a oler a quemado. Hay un incendio en tu edificio.
Un incendio en horario nocturno es en general una situación de alto riesgo, ya que suele estar bastante desarrollado cuando alguien lo detecta y da la alarma. Puede sonar muy teatral, pero lo que hagas en los próximos minutos va a suponer la diferencia entre la vida y la muerte para ti y la gente que te rodea. De repente caes en la cuenta de algo en lo que nunca te habías parado a pensar: tu familia está en peligro y nadie te ha preparado nunca para este momento, no tienes ni la más remota idea de lo que tienes que hacer.
En España hay una media de 47 incendios en viviendas cada día -unos 17.000 incendios cada año- que producen cientos de víctimas mortales, miles de personas heridas, la pérdida de miles de queridas mascotas y enormes daños materiales. Con estas cifras, cuesta creer que en la escuela no te enseñaran la manera de sobrevivir si te ves afectada por un incendio, o que no se hagan campañas en los medios de comunicación para enseñarte cómo actuar. Pero nada de esto se hace, y difundir ese conocimiento tan importante queda en manos de algunos Servicios de Extinción de Incendios que pueden permitirse realizar campañas de concienciación, y del esfuerzo de los y las profesionales que dedicamos nuestro tiempo a ello de manera voluntaria.
Volviendo al escenario inicial, son las 4 de la madrugada y hay un incendio en tu edificio. Has reunido a tu familia y si alguien te lo hubiera contado sabrías perfectamente lo que tienes que hacer:
1- Si el incendio está en tu vivienda y podéis escapar... no lo dudes, ESCAPAD.
2- Si el incendio está en tu vivienda y por lo que sea no podéis escapar, lleva a tu familia a una ventana libre de humo, lo más lejos posible del incendio, y pide ayuda. Si la ventana da a la calle en vez de a un patio interior, mucho mejor, ahí os veremos antes.
3- Si el incendio no está en tu vivienda, NUNCA SALGAS A LA ESCALERA, puede llenarse de humo en un momento y convertirse en una trampa. Como en el caso anterior, busca una ventana libre de humo y pide ayuda.
Y sobre todo, recuerda que hay un pequeño y sencillo gesto que puede marcar la diferencia entre un incidente con daños materiales controlados y una tragedia con pérdida de vidas: CIERRA LA PUERTA AL FUEGO. Aunque no lo parezca, una puerta cerrada mantendrá el incendio confinado hasta que lleguemos y podamos extinguirlo.
Siempre, sin excepción, cierra todas las puertas por las que vayas pasando. En el primer caso, si cierras la puerta de tu vivienda al salir impedirás que el humo invada la escalera, y mantendrás a tus vecinos y vecinas a salvo. En el segundo y tercero caso, si vas cerrando las puertas por las que pases impedirás que el humo y el calor lleguen a la habitación en la que te refugies, y podréis aguantar allí con seguridad hasta que podamos rescataros. Además, haciendo esto limitarás el grueso de los daños materiales al interior de la habitación incendiada.
Después, cuando estés a salvo, hay varias cosas que puedes hacer:
-Llama al 112
-Si es posible, corta el gas y la electricidad.
-Espera la llegada de bomberos y bomberas, entregarles las llaves de casa y proporciona toda la información que puedas.
-Mantén la calma y colabora en lo que te pidan.
También hay una serie de consejos que nunca están de mas:
-Si hay humo, gatea.
-Si una puerta está caliente, no la abras.
-Nunca uses ascensores.
-Nunca te pares a recoger objetos, recoge a tu mascota solo si no te va a retrasar hacerlo.
-Trata solo de extinguir el incendio si lo pillas en su fase inicial. Si el incendio se ha desarrollado, ni siquiera con un extintor lograrás apagarlo, y te pondrás en grave peligro.
Por último, hay algo que puedes hacer ahora mismo y que no evitará que pueda haber un incendio en tu vivienda, pero limitará drásticamente sus consecuencias en caso de padecerlo: instala un detector de humo. Por menos de 10 euros te avisará del peligro, ganando unos minutos preciosos. Y si el incendio es por la noche, os despertará antes de que el humo os deje inconscientes en vuestras camas.
Este artículo está dedicado al joven Egoitz y a su familia, para que nunca nadie tenga que volver a pasar por lo que ellos están sufriendo.
Son las cuatro de la madrugada y te despiertas sorprendida por un fuerte alboroto. Cuando logras despejarte un poco comienzas a escuchar portazos, pasos precipitados y gritos de angustia pidiendo ayuda. También empiezas a oler a quemado. Hay un incendio en tu edificio.
Un incendio en horario nocturno es en general una situación de alto riesgo, ya que suele estar bastante desarrollado cuando alguien lo detecta y da la alarma. Puede sonar muy teatral, pero lo que hagas en los próximos minutos va a suponer la diferencia entre la vida y la muerte para ti y la gente que te rodea. De repente caes en la cuenta de algo en lo que nunca te habías parado a pensar: tu familia está en peligro y nadie te ha preparado nunca para este momento, no tienes ni la más remota idea de lo que tienes que hacer.