Ciudadanos se estrena en Euskadi mientras desaparece en España: “Nos presentaremos a las elecciones”

Ciudadanos, mientras languidece en el conjunto de España y ha desaparecido de las Cortes Generales y del grueso de las asambleas autonómicas, se ha estrenado en 2023 como partido independiente en Euskadi en el pleno de política general celebrado este jueves en el Parlamento Vasco. Su único representante, José Manuel Gil, rompió en julio la coalición con el PP y se pasó al grupo mixto, donde comparte espacio con Vox. “Pero que nadie se equivoque. Nuestra vecindad es sólo física; no lo es ideológica. De Vox nos diferencian tantas cosas como de cualquier partido extremista”, ha enfatizado José Manuel Gil, citando su “negacionismo” de la violencia contra las mujeres o los derechos LGTBI, además de su antieuropeísmo y ultraconservadurismo.

Gil, en sus quince minutos de estreno, en los que ha asegurado intervenir por vez primera “con plena libertad” aunque fuera antes portavoz de PP+CS en materias de calado como Educación, no ha dejado de explicar su ruptura con el PP. “Nos traicionó en una vergonzosa operación de transfuguismo”, ha clamado recordando que el partido logró dos escaños en realidad en las autonómicas de 2020 y que su excompañero Luis Gordillo saltó a las filas 'populares' al poco tiempo. “Es el partido que más ha hecho por destruir a Ciudadanos”, ha añadido el dirigente naranja.

En el plano más político, Gil ha lamentado el tono “triunfalista” de Iñigo Urkullu en su discurso ante el Parlamento y ha aseverado que se ha roto ya la imagen de buen gestor del PNV, al que ha calificado de partido “conservador” que sigue admirando la figura de Sabino Arana. También ha criticado que el PSE-EE sea sostén del nacionalismo. “Otra Euskadi es posible”, ha repetido a modo de eslogan. Ciudadanos ha denunciado también la ausencia de mecanismos contra la corrupción o de protección a los denunciantes -ha recordado el caso de Ainhoa Alberdi, que inició el 'caso De Miguel' a un alto coste personal- y ha realizado críticas a las políticas de impulso del euskera.

Gil, que ha calificado a Ciudadanos como un partido de “centro” y “liberal”, ha terminado su alocución garantizando este proyecto que en su momento llegó a ganar elecciones en Catalunya no está muerto. “Tengo una mala noticia. Ciudadanos no se rinde. En las próximas elecciones nos presentaremos”, ha clamado antes de dejar paso a su compañera en el grupo mixto, la representante de Vox Amaia Martínez Grisaleña.