Del 14 al 20 de octubre 25 personas más han fallecido con COVID-19 en Euskadi, según el balance semanal hecho público este lunes por el Servicio Vasco de Salud (Osakidetza). Ha habido un día sin decesos -el 15 de octubre- y el máximo semanal es de cinco. Salud, en todo caso, asegura que en 13 de los 25 casos el Sars-Cov-2 no ha sido el causante principal del 'exitus letalis'. Con todo, son ya 8.037 los muertos totales durante la pandemia. 2.954 de ellos han fallecido en 2022, muchos más que los 1.977 de todo 2021. En 2020 se registraron 3.106 óbitos.
En cuanto a la situación hospitalaria, tras varias semanas de cada vez mayor ocupación, este lunes se registra un cambio de tendencia. Son 188 los pacientes en planta o en UCI por 215 de hace siete días. En el caso específico de la UCI son ya muchas semanas con datos muy bajos y estables. Hay cinco pacientes críticos ahora mismo. El cierto alivio asistencial se puede ver con el dato de que ha habido entre 15 y 33 hospitalizaciones diarias por entre 20 y 37 de la semana anterior. Por edades, hay cinco menores ingresados pero la probabilidad de empeoramiento es del orden de diez veces mayor en el caso de los mayores de 60 años.
En cuanto a la incidencia, en la última semana han aparecido entre 99 y 284 positivos nuevos diarios, aunque son ya muchos meses en que este dato no es representativo de la circulación real del virus. La tasa de incidencia es un 7% más alta que el pasado lunes y marca 135 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días. Pero sube a 313 en el caso de la población de riesgo, los mayores de 60. Y ya está por encima de 400 entre nonagenarios y centenarios. Es un nivel de alerta roja y precisamente en el colectivo más castigado: su probabilidad de morir es del 18%. El R0 ha estado toda la semana por encima de 1, lo que indica que la pandemia sigue en un ciclo expansivo. Este indicador muestra el número de casos originados por cada infectado. La tasa de positividad está en el 13,1%, cuando la barrera de riesgo es del 5%. Sube incluso al 16% entre mayores.
Por otro lado, Osakidetza ha informado este lunes de los avances en la campaña de vacunación, que está siendo simultánea con la de la gripe estacional. Son 205.182 personas las que tienen ya la cuarta dosis o, más precisamente, el segundo refuerzo contra la COVID-19. Son inyectables ya readaptados para bloquear mejor los efectos de la variante ómicron, al menos en 192.357 casos. En porcentaje, representan el 53% de los mayores de 80 años y el 16% de la población total.
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