Investigan a dos profesoras de un colegio de Donostia por una presunta agresión sexual a una niña de 4 años

Dos profesoras de un colegio privado de Donostia que tiene alumnos de entre 3 y 6 años fueron detenidas y posteriormente puestas en libertad por una presunta agresión sexual a una menor de 4 años. La Ertzaintza, según ha contado 'Noticias de Gipuzkoa', habría acometido los arrestos en el domicilio de las docentes, en Donostia y Hondarribia. La Policía, preguntada por este periódico acerca de este extremo, se limita a informar de que el caso ha quedado bajo secreto de sumario. A las 15.00 horas de este martes las dos personas investigadas estaban a la espera de ser interrogadas en sede judicial, donde antes habían comparecido ya los denunciantes.

Se trata de un colegio totalmente privado de Donostia, Emeki-Emeki. No tiene, por tanto, concertación ni financiación pública. El Departamento de Educación del Gobierno vasco también confirma que no tiene ninguna relación con él. Este periódico se ha puesto en contacto con el centro para recabar su versión de lo sucedido, pero apenas ha obtenido contestación. “No vamos a dar ningún tipo de información. Parad de llamar. Gracias y agur”, han espetado. Su plantilla es de apenas cuatro personas, dos de las cuales permanecen bajo custodia policial.

Villa Landetxe, el edificio en el que se encuentra el centro, sí es, sin embargo, de titularidad pública. Es del Ayuntamiento de Donostia. Lo ha confirmado el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, en una rueda de prensa celebrada este martes en la que ha informado de que se encuentra cedido a la asociación cultural Catalina de Erauso. En su página web, Emeki-Emeki explica que el espacio del que dispone es una “cesión” del Ayuntamiento a la asociación cultural, que es a su vez “asociación patrocinadora” del proyecto educativo.

Goia ha indicado que el Ayuntamiento va a “mirar” qué actividades ha llevado a cabo la asociación en el edificio “una vez que se ha producido esta situación”, según recoge Europa Press. “Cuando uno lee noticias de este tipo, lo primero que tiene es una honda preocupación de que se puedan producir situaciones como las descritas”, ha abundado Goia, que ha reconocido que no conoce “gran detalle” y ha apelado a la “prudencia” hasta que se conozcan más detalles acerca del caso, sobre el que se ha decretado el secreto de sumario.

¿Qué ha ocurrido? Fuentes conocedoras del caso refieren que la menor y su hermano, de edad similar, habrían verbalizado -de un modo acorde a su cortísima edad- conductas inapropiadas que, de ser ciertas, implicarían un delito grave de índole sexual. Este martes han comparecido ante el juzgado que, por estar de guardia, ha asumido inicialmente las pesquisas, el de Instrucción 5 de Donostia, a cuyo frente está la magistrada Silvia Villanueva. Se trata de una declaración ayudada por profesionales y que servirá de prueba “preconstituida”, es decir, que no tendrá que repetirse una y otra vez en las diferentes fases de la causa. También se tomará declaración a las dos docentes arrestadas, que se hacían llamar “acompañantes”.

Las fuentes consultadas, aunque no aportan detalles del caso, sí admiten que “no es habitual” que un asunto de este tipo se intente resolver con detenciones y con total hermetismo. Eso da una medida de la gravedad de los posibles hechos acaecidos, insisten estas fuentes. También recalcan que la investigación está en una fase “muy inicial” por lo que es totalmente precipitado extraer conclusiones.

En rueda de prensa, la consejera de Educación, Begoña Pedrosa, ha insistido en que Emeki-Emeki es totalmente “privado”. De hecho, “no tiene autorización administrativa”. Recalca que hasta los seis años no es una enseñanza “obligatoria”, de modo que no hay relación alguna. Tapoco la Inspección tiene competencias. No ocurre lo mismo con los otros cuatro colegios privados de Euskadi en etapas obligatorias, que sí están sometidos a cierto control e incluso a la observancia de los “protocolos” para este tipo de situaciones. “No disponemos de información. No nos corresponde gestionarlo”, ha indicado Pedrosa a los periodistas. Con todo, se ha dicho “preocupada” y “ocupada” por la aparente “gravedad” de los hechos que se investigan.