El Gobierno de Iñigo Urkullu ha presentado ya en siete ocasiones las nuevas ayudas a la emancipación juvenil, un programa llamado Emantzipa y que no estará operativo hasta, al menos, “principios” de 2024. Se trata de la medida estrella del área de Juventud del Gobierno vasco, que en septiembre del pasado año pasó a depender directamente del propio lehendakari. Se da la circunstancia de que, en Euskadi, el área de Vivienda la dirige la parte del PSE-EE de la coalición y que desde allí se gestiona un programa de apoyo al alquiler juvenil llamado Gaztelagun y que ofrece cuantías idénticas a las que ofrecerá Emantzipa, 300 euros mensuales. En marzo eran 5.276 los beneficiarios “activos” y hasta 7.861 la han cobrado en alguna ocasión.
Las primeras informaciones sobre Emantzipa fueron el 7 de diciembre de 2022. Ese día, el responsable de Juventud dentro del equipo de Urkullu, su estrecho colaborador Jonan Fernández, presentó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno la estrategia para favorecer la emancipación desde la constatación de que en Euskadi es muy tardía (por encima de los 30 años de media). La medida central era la nueva prestación. Semanas después, el 27 de diciembre, Fernández volvió a comparecer en el mismo foro -habitualmente reservado a los consejeros- y de nuevo se habló de las futuras prestaciones.
El 9 de febrero se presentaron las “diez prioridades” de Juventud. La nota oficial se iniciaba así: “La primera prioridad es regular la ayuda económica para la emancipación de jóvenes entre 25 y 29 años, de modo que esté disponible en 2024”. Unos días después, el 17 de febrero, el PNV preparó una autopregunta a Urkullu en la sesión de control al Gobierno del Parlamento Vasco para que hablara de Emantzipa. El lehendakari concretó entonces que las prestaciones serían de 300 euros mensuales y 7.200 euros totales. 300 euros es la cuantía de todas las ayudas de Vivienda existentes en Euskadi, la PCV, la PEV o la propia Gaztelagun, por ejemplo. El 21 de marzo, el Consejo de Gobierno dio luz verde definitiva a la estrategia juvenil de diciembre. En el cuarto punto de la nota oficial se informaba de que el plan “contempla, como una de sus novedades, una ayuda de 300 euros al mes durante dos años para jóvenes de 25 a 29 años que entrará en vigor en 2024”.
El 4 de mayo, a horas del arranque de la campaña de las elecciones municipales y forales, el Gobierno vasco difundió la siguiente información: “El lehendakari firma el decreto que da inicio a la tramitación de la ayuda de 300 euros para favorecer la emancipación”. “La firma por parte del lehendakari de este decreto de inicio confirma la previsión de que la norma que regule la nueva ayuda para favorecer la emancipación pueda estar aprobada y entrar en vigor a principios de 2024”, se indicó entonces. Sin embargo, este martes se ha difundido este titular: “El lehendakari firma el decreto de aprobación previa que regulará la ayuda de 300 euros para favorecer la emancipación juvenil”. “De esta manera, la tramitación de esta iniciativa avanza conforme a lo previsto y cabe prever que pueda estar definitivamente aprobado y entrar en vigor a principios de 2024”, se agregaba. A preguntas de los periodistas, el consejero-portavoz, Bingen Zupiria, indicó que el plan Emantzipa será aprobado definitivamente “antes de final de año”.
Fuentes de la Presidencia vasca confirman que Emantzipa es una prioridad para el Gobierno en la medida en que es la gran medida dentro de las políticas de Juventud, ahora lideradas por el propio Urkullu. En todo caso, entiende el Ejecutivo que “siendo esta medida una iniciativa, sin duda, importante, quizá lo más relevante es que no se trata de una actuación aislada”. “A esta ayuda de 300 euros al mes durante dos años para jóvenes de 25 a 29 años se unen la ayuda de 200 euros al mes por hijo o hija hasta los tres años, las ayudas al alquiler del programa Gaztelagun que pueden llegar hasta los 300 euros al mes, la gratuidad de la etapa 0-2 años de las Haurreskolak, las deducciones fiscales por descendiente, o las medidas que ya están en vigor en materia de conciliación”, manifestó este martes el Gobierno.
¿Y qué es Gaztelagun? Como Emantzipa, está enfocada a la población más joven. Con todo, este programa de Vivienda -creado en 2019- apoya con hasta 300 euros mensuales el alquiler y Emantzipa financia la vida independiente. Son planes similares pero no idénticos. Hace aproximadamente un año el área de Vivienda reformuló Gaztelagun. Por un lado, se elevaron los máximos de rentas para poder acceder a las ayudas, que se han fijado en 24.500 euros anuales para un solicitante individual y en hasta 32.000 euros para unidades de convivencia más amplias. Asimismo, las ayudas no se pagan solamente durante tres años sino de manera indefinida hasta cumplir los 36 años. La cuantía es de hasta 300 euros mensuales y puede cubrir hasta el 60% de la renta. Son condiciones no tener pisos de más de 800 euros mensuales y llevar al menos seis meses residiendo en la comunidad autónoma. Se pueden leer aquí los requisitos para pedir esta prestación.
Con estos cambios, se produjo un cierto colapso en las peticiones, según admitió el consejero socialista del ramo, Iñaki Arriola, en respuesta a varias preguntas de EH Bildu en el Parlamento Vasco. En concreto, “durante el 2022 se ha recibido un inusual volumen de solicitudes, ampliamente superior a los años anteriores”, indicó el Ejecutivo. “A veces las expectativas desbordan las capacidades instaladas operativas. Y eso pasa en las mejores organizaciones públicas y privadas”, añadió. Fuentes de Vivienda indican que ya se ha superado ese cuello de botella.