Euskadi anuncia que creará dos unidades para trastornos de conducta alimentaria, pero sin especificar fecha ni presupuesto
Desde la pandemia, las consultas por trastornos de la conducta alimentaria (TCA) se han disparado en Euskadi, superando los 8.000 pacientes en 2021, un 62,8% más en comparación con el año anterior y hasta un 72,6% en comparación con 2019. Debido a esta situación, la consejera de Salud del Gobierno vasco, Gotzone Sagardui, ha anunciado este lunes la creación de sendas unidades específicas de Trastorno de Conducta Alimentaria en Álava y Bizkaia, hasta ahora inexistentes en la red de Osakidetza. Así lo ha presentado a petición propia en el Parlamento Vasco, en la que, además, ha informado de la publicación de tres informes elaborados por el Consejo Asesor de Salud Mental de Euskadi en torno a los ámbitos prioritarios de la estrategia vasca en esa materia: los trastornos de conducta alimentaria, la salud mental infanto-juvenil y la patología dual (suma de adicción y trastorno).
Acompañada del director de Atención Sociosanitaria del Departamento de Salud del Gobierno vasco, José Antonio de la Rica, Sagardui ha alabado los planes y profesionales de la salud mental en Euskadi, pero ha reconocido la necesidad de “reforzarlos”, debido a que la última estrategia en salud mental data de 2016. “Hay que poner en valor que Euskadi tiene una larga tradición en salud mental y eso se ha demostrado en las sucesivas estrategias y en la cantidad y calidad de profesionales que atienden a estos pacientes”, ha recalcado la consejera. Sin embargo, desde partidos de la oposición como EH Bildu y PP+Cs, han criticado la falta de concreción de medidas y de fechas para implementarlas.
“Usted ha solicitado esta comparecencia para anunciar los planes de salud mental relativos a trastornos de conducta alimentaria, patología dual y atención infantojuvenil, pero no ha presentado planes, sino documentos monográficos. Necesitamos medidas concretas y fechas concretas”, ha criticado la parlamentaria de EH Bildu, Rebeka Ubera. En este mismo sentido también se ha referido la representante de PP+Cs, Laura Garrido, que ha lamentado que desde el Gobierno vasco “no faciliten un cronograma con detalles para saber cuándo se van a implementar las medidas anunciadas”. “Sin la información de ejecución de medidas y el presupuesto que va a costar, es papel mojado”, ha argumentado.
Según ha informado Sagardui, el Departamento de Salud inició el pasado año el proceso de elaboración de los documentos estratégicos íntimamente relacionados con el abordaje de la salud mental en la era poscovid, “manteniendo y reforzando programas y servicios ya existentes, e incorporando nuevas acciones para dar respuesta a los perfiles y necesidades emergentes”. En este sentido, el primero de los informes elaborados por los expertos, que han contado con la participación de asociaciones de pacientes y familiares, es el relacionado con los Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA), donde se subraya la atención precoz intensiva como clave para mejorar el pronóstico. Para ello, Sagardui ha anunciado que “se prevé la creación de sendas unidades específicas de TCA en Araba y Bizkaia, que supondrán un salto cualitativo respecto a los programas y unidades monográficas con que actualmente cuenta Osakidetza” y que “por primera vez” los TCA serán considerados “trastorno metan grave”.
Dentro de la Red Vasca de Salud Mental a día de hoy, Euskadi, cuenta con cuatro hospitales psiquiátricos de personas adultas, con una Unidad de Agudos; cinco servicios de psiquiatría de personas adultas en hospital general; tres unidades hospitalarias de psiquiatría infanto-juvenil; 18 hospitales de día psiquiátricos de personas adultas; cinco hospitales de día psiquiátricos infanto-juveniles; 41 centros de salud mental, además de unidades monográficas (trastorno de personalidad, episodios psicóticos, psicogeriatría, TCA, adicciones, alto riesgo, perinatal, patología dual y violencia de género) y ecosistemas asistenciales (Redes de Salud Mental de Osakidetza, Organizaciones Sanitarias Integradas de Osakidetza y Recursos Sociosanitarios de Euskadi).
Con respecto a los otros dos informes presentados, Sagardui ha anunciado un documento sobre salud mental infanto-juvenil, que, según sus palabras “apuesta por ahondar en el refuerzo de la asistencia emprendido desde el Departamento de Salud y Osakidetza que, en los últimos dos años, y pese a la pandemia, han doblado los recursos humanos y materiales destinados a esta área”. En este punto ha anunciado la creación de un hospital de día para el tratamiento de adolescentes, que se sumaría a los ya existentes en los tres territorios históricos. Preguntada por qué hasta ahora no se ha tomado esa medida, la consejera ha insistido en que se busca “reforzar la atención en Gipuzkoa, pero no significa que hasta ahora no exista una atención”.
El director de Atención Sociosanitaria del Departamento de Salud del Gobierno vasco, José Antonio de la Rica, ha explicado en este sentido que “para mantener un hospital de día debe existir una masa crítica de pacientes”, algo que, hasta ahora, en Gipuzkoa no había y, por lo tanto, eran derivados a hospitales de otras provincias de Euskadi. “Hasta ahora entendíamos que si no hay pacientes suficientes no se podía mantener un hospital de día y la de Gipuzkoa era una cuestión de número y masa crítica. Por ello, en el año 2016 se habilitó un único hospital para adolescentes con problemas de salud mental, sin embargo, ahora ponemos en valor la accesibilidad del paciente y por eso consideramos la apertura de más unidades”, ha confirmado.
Por último, Sagardui ha presentado un tercer estudio que aborda la atención a la patología dual, es decir, la convergencia de un trastorno de adicciones y un trastorno psiquiátrico en los pacientes, donde se prevé la asignación a cada paciente de un Plan Terapéutico Individualizado en función de su tipología clínica, de cara a aplicar en cada caso el recurso o dispositivo más apropiado. “Debemos crear modelos más individualizados y centrados en cada caso”, ha insistido, para recalcar que “no es cierto que en Euskadi no haya investigación o recursos” y que, si realiza estas declaraciones, “no es por el contexto de las elecciones”. “No nos importa si estamos en elecciones o no”, ha concluido.
0