El nuevo Gobierno de Imanol Pradales continúa con sus gestos para hacer ver que soluciona problemas en la Sanidad pública. Este martes, el Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha hecho públicas unas declaraciones de la recién elegida directora general, Susana López Altuna, en las que explica los éxitos de su plan de incrementar los incentivos a los médicos y de facilitar la incorporación de los residentes que estén al final de su formación, algo anunciado la pasada semana y que busca paliar la escasez de personal del verano. Si la pasada semana se indicó a los sindicatos que se iba a garantizar al menos el 80% de los turnos de la planificación ya recortada con la que se inició la temporada estival ahora se eleva esa cifra al 94%.
Según se ha informado, la “instrucción extraordinaria” y las “medidas de emergencia” ideadas por el nuevo equipo a finales de julio han “logrado” la “contratación de 31 profesionales más que el pasado verano (27 de medicina de familia y 4 de pediatría) y sumar a ”58 médicos internos residentes (MIR) de último curso para cubrir vacantes en centros de salud y puntos de atención continuada (PAC) que se han acogido a este nuevo plan“. Los residentes son (o serán) 47 médicos de cabecera, siete pediatras y cuatro anestesistas. ”La participación de estos profesionales es voluntaria, incentivada y, en el caso de los médicos residentes, supervisada“, ha indicado López Altuna en las declaraciones grabadas por el propio Gobierno vasco, sin lógicamente posibilidad de preguntas.
“Cabe destacar que estos profesionales van a realizar un total de 439 actividades extraordinarias, incrementándose en 197 el número de agendas abiertas en medicina de familia y 62 en pediatría. Todo ello ha permitido reforzar la actividad de 40 centros más (de un total de 333), aumentando el horario de actividad y, en consecuencia, la atención y el acceso a los mismos. Todos los centros de cabecera del total de las unidades de atención primaria de Euskadi permanecerán abiertos, aunque algunos pueden reducir su horario de 20.00 a 17.00 horas como es habitual en esta época. Además, del total de consultorios, el 94% permanecerá abierto diariamente y durante todo el verano”, ha indicado López Altuna en lo que parece una enmienda a la planificación que se vendió antes de la llegada de Pradales y que había sido diseñada por el equipo de la anterior consejera, Gotzone Sagardui.
Sostiene Osakidetza que “a los problemas que, en mayor o menor medida, suelen plantearse de manera habitual en los períodos de verano para la cobertura de los diferentes servicios asistenciales, este año la situación se hacía más difícil como consecuencia de que el personal residente (MIR) de medicina de familia finaliza su formación en septiembre de 2024, una vez concluido el periodo estival”. “Finalizan con varios meses de retraso -tenían que haberlo hecho en junio- porque fue la promoción que arrancó en un 2020 condicionado por la primera ola de la COVID-19”, remarca el Ejecutivo.
López Altuna ha agradecido igualmente “el esfuerzo y la implicación de esta generación de jóvenes médicos que están terminando su formación especializada’’, así como a los facultativos que han accedido a hacer refuerzos. Ellos podrán cobrar ahora 70,08 euros por hora extraordinaria, frente a los 60,65 de la normativa anterior, ratificada solamente hace unas semanas, en junio. Los sindicatos acogieron el plan como un parche y demandan medidas estructurales para reforzar la plantilla. La central de enfermería Satse se quejó también de que los incentivos solamente se planteen para facultativos y no para otros colectivos, como las matronas.
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