Euskadi cierra la semana con un 12% de positivos notificados menos que la anterior, la peor de toda la pandemia

Euskadi cierra la que, estadísticamente, es la segunda semana de la pandemia de un total de 28 con más casos positivos notificados, tantos como 4.063. Sin embargo, se aprecia también un descenso de casi el 12% respecto a la semana anterior y cierra un ciclo ascendente de diez semanas consecutivas. La ya exconsejera Nekane Murga solía repetir que un cambio semanal de más del 10% -hacia arriba o hacia abajo- era ya un indicador significativo para hablar de un cambio de tendencia y ella se despidió del cargo aludiendo a una estabilización de los nuevos contagios de COVID-19. Este domingo el Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha notificado 608 nuevos casos, el 8,4% del total de pruebas PCR realizadas en las últimas 24 horas. Esta tasa de positividad ha descendido también desde el entorno del 10% que alcanzó la pasada semana, pero no es menos cierto que lleva en ligera subida varias jornadas y alejándose del objetivo ideal, que es que se sitúe por debajo del 5%. No hay datos sobre la evolución del R0, que esta semana ha bajado de 1 por vez primera en dos meses e indica una contracción de la cadena de contagios.

Del total de positivos, 324 se han dado en Bizkaia, 188 en Gipuzkoa -es el territorio que presenta una curva de incidencia diferente en las últimas semanas- y 94 en Álava. Asimismo, hay dos personas de fuera diagnosticadas aquí. 36 personas tuvieron que ser ingresadas este sábado en los hospitales de Osakidetza por un empeoramiento de sus síntomas. 47 de ellas presentan un cuadro clínico crítico y están en la UCI. No hay más información acerca de los hospitalizados totales o fallecimientos -que no dejan de producirse- ya que desde julio el Departamento de Salud redujo notablemente la información de seguimiento del coronavirus.

Eso sí, este domingo se ha hecho público un informe con datos generales sobre la segunda ola en Euskadi hasta el jueves y firmado por el equipo de análisis epidemiológico que ha trabajado para el Departamento de Murga en estos meses (Arantzazu Arrospide, Joseba Bidauzarraga, Montserrat Calvo, Igor Goirizelaia, Nuria González, Ania Gorostiza, Gonzalo López-Arbeloa e Imanol Montoya). Desde el 6 de julio hasta el 3 de septiembre se han detectado 19.158 contagios con 332.991 pruebas PCR realizadas. Ello deja la tasa de positividad en un 5,7% por término medio, pero la media esconde que al inicio del verano era de solamente un 0,8% y ha alcanzado un pico semanal del 8,4% a finales de agosto.

En este período se observa un incremento notable en los test diarios practicados (entre 2.000 y 5.000 en julio frente a máximos próximos a 10.000 en la segunda mitad de agosto). Se da la circunstancia de que uno cada veinte test en Euskadi -unos 18.000 en estos dos meses- no los hace la Sanidad pública sino laboratorios privados, cuyas tarifas son elevadas. Sólo entre el 20 y el 30% de quienes se hacen una PCR y dan positivo tenía síntomas. El resto o son contactos estrechos de personas infectadas y son detectados de forma temprana o son localizados en programas de cribado al aparecer un foco o en otros casos ya predeterminados, como al acceder a un hospital. En la primera semana de septiembre el 51% de positivos eran asintomáticos (o presintomáticos) y ya habían sido aislados por ser contactos de otros enfermos. Según Osakidetza, “lo óptimo sería que a más del 50% de los casos positivos se les hubiera realizado la prueba PCR por ser contactos estrechos de otro caso positivo”.

La tasa de incidencia ha tenido un ascenso imparable hasta hace unos pocos días pero ahora ha parecido tocar techo e incluso bajar ligeramente. En las últimas dos semanas, la tasa de Bizkaia es de 404,60 casos por cada 100.000 habitantes, la de Álava de 396,38 y la de Gipuzkoa de 333,38. La evolución es diferente por territorios, ya que Bizkaia y Álava responde al patrón general de freno en el crecimiento, pero en Gipuzkoa ha habido un repunte de casos, aunque siempre ha sido la zona menos golpeada en la pandemia. El pueblo con más casos en relación a su población ha sido Aulestia en estos 14 días, con 31 de sus 665 vecinos enfermos. Entre las grandes localidades, sobresale Gernika por su brote en la zona de ocio. Su tasa de incidencia triplica a la media de Bizkaia. Este foco se aprecia también en pueblos de su comarca como Muxika o la propia Aulestia. En cuanto a las capitales, Donostia es la que menos positivos ha registrado pero la que mayor tasa presenta por delante de Bilbao y de Vitoria. En esta segunda ola, las tres ciudades han pasado de no tener casi casos a ver disparada su tasa. Donostia ha rozado los 350 casos semanales de promedio, Bilbao los 300 y Vitoria los 250. También Getxo y Barakaldo han tenido una tendencia similar. Los focos de Azpeitia, Ordizia, Eibar o Gernika han hecho que las tasas en esas localidades hayan tenido máximos en algún momento del verano.

En el verano han fallecido 96 personas, el 0,5% de los infectados, cuando la tasa general de la pandemia es del 4,3%. Desde principios de agosto se han producido muertes diarias aunque no haya datos regulares y precisos. La letalidad crece con la edad hasta el punto de que, desde que llegó el coronavirus en febrero, el 28,2% de los positivos mayores de 90 años han muerto, el 20,9% de los ancianos de 80 a 90 y el 10,2% de las personas de 70 a 80.No consta ninguna muerte entre los menores contagiados.