Los incendios forestales son una amenaza que va en aumento a medida que avanza de forma imparable el cambio climático, que agrava los factores que los originan. A raíz de esto, se están alargando las temporadas con alto riesgo meteorológico y se da una mayor frecuencia de fenómenos extremos, como pueden ser períodos muy secos seguidos de olas de calor o, en el otro extremo, lluvias torrenciales. En el caso de los incendios, lo que ocurre es que a diferencia de lo que se puede llegar a creer, el mayor peligro ocurre en los meses de otoño, después de las zonas se sequen en los meses de verano.
Uno de los incendios más peligrosos que ha tenido lugar en Euskadi en los últimos años fue el de Balmaseda, a finales de octubre de 2022 donde un total de 500 hectáreas se vieron afectadas. Para combatir el fuego y puesto que por aquel entonces Euskadi no contaba con hidroaviones, movilizaron recursos adscritos al Ministerio de Transición Ecológica como dos aviones anfibios de gran capacidad, tres brigadas forestales, un helicóptero Kamov y otro aparato ACO. Las aeronaves fueron pilotadas por miembros del Ejército del Aire (grupo 43) dependientes de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
La falta de recursos propios para hacer frente a situaciones como la ocurrida en Balmaseda ha hecho que desde el Gobierno vasco y las diputaciones hayan decidido financiar el primer helicóptero para la extinción de incendios. “A pesar de que Euskadi está lejos de otras comunidades autónomas en lo que se refiere al número de incendios registrados, la decisión de incorporar un helicóptero de extinción de incendios forestales surgió a raíz de los incendios ocurridos hace dos años, especialmente el declarado en Balmaseda, y responde al deseo interinstitucional de anticiparse a este tipo de situaciones teniendo en cuenta que los efectos del cambio climático pueden aumentar los riesgos”, informan desde el Ejecutivo vasco.
“Euskadi no disponía hasta ahora de ningún medio aéreo específico para la lucha contra incendios forestales, ni propio ni arrendado. Los medios propios de extinción de incendios (entre los disponibles por el Gobierno vasco, las diputaciones forales y los ayuntamientos) han sido hasta ahora exclusivamente terrestres. La disposición efectiva del medio aéreo contribuirá a reducir los tiempos de respuesta en incendios forestales, el número de hectáreas quemadas y el riesgo de acceso a ciertas zonas de difícil acceso a pie. La nueva aeronave de extinción de incendios, utilizada en combinación con medios terrestres, formará un sistema de lucha contra los incendios forestales más eficaz e integral”, sostienen.
El convenio firmado por el Gobierno vasco y las tres diputaciones que permitirá la financiación del helicóptero, se ha presentado este viernes en Bilbao en un acto en el que han participado el consejero de Seguridad Bingen Zupiria, la diputada foral de Igualdad, Euskera y Gobernanza de la Diputación Foral de Araba, Jone Berriozabal, la diputada foral de Medio Natural y Agricultura de la Diputación Foral de Bizkaia, Arantza Atutxa, y el diputado foral de Equilibrio Territorial Verde de la Diputación Foral de Gipuzkoa, Xabier Arruti. “En comparación con otros veranos, este sí que es cierto que ha habido un aviso amarillo por altas temperaturas y en algún caso por riesgo de incendio, pero ha sido un verano tranquilo y únicamente hemos tenido tres incendios que no han sido en ningún caso de grandes dimensiones”, ha informado la diputada foral de Igualdad, Euskera y Gobernanza de la Diputación Foral de Álava, Jone Berriozabal.
En el caso de Bizkaia, la diputada foral de Medio Natural y Agricultura, Arantza Atutxa, ha informado de que durante el año se han quemado 6,5 hectáreas en la zona. “Ha sido muy poco, pero es cierto que el peligro y el mayor riesgo viene a partir de ahora en otoño. Hemos tenido un verano húmero y eso puede hacer que el peligro sea menor”, ha confesado. Mientras que en Gipuzkoa, el diputado foral de Equilibrio Territorial Verde, Xabier Arruti ha señalado que ha habido ocho incendios “muy pequeños” en los que se han quemado 5,5 hectáreas. “En comparación con los años anteriores son insignificantes los incendios hasta ahora”, ha aclarado.
Así, el convenio firmado este viernes posibilitará que, desde el 1 de septiembre, el Gobierno vasco y las diputaciones forales dispongan de un helicóptero para la extinción de incendios. El consejero de Seguridad Bingen Zupiria ha explicado que este acuerdo es “fruto de un profundo análisis llevado a cabo por las cuatro instituciones. Responde a la conveniencia de completar los equipos ya existentes para la extinción de incendios, habilitando también recursos aéreos específicamente diseñados para esta finalidad”, ha detallado.
El Consejo de Gobierno aprobó en febrero de este año una partida presupuestaria de 1,2 millones de euros (891.000€ para el arrendamiento y 330.000 para un máximo de 240 horas de vuelo) para materializar la contratación de este servicio, en régimen de arrendamiento, que se financiará por parte de todas las instituciones de acuerdo a estos porcentajes: un 17,5% lo pagará el Departamento de Seguridad del Gobierno vasco, un 22,32% la Diputación de Álava, un 32,66% la Diputación de Bizkaia y, por último, un 27,52% la Diputación de Gipuzkoa.
Según el convenio, además del coste del alquiler del helicóptero, cada institución financiará los costes por hora de utilización del helicóptero en su territorio. El acuerdo tendrá una vigencia de dos años con posibilidad de prórroga de dos años más. Con el objetivo de coordinar las actividades necesarias para su ejecución, así como para llevar a cabo su supervisión, seguimiento y control, se creará una comisión integrada por dos personas designadas por cada una de las cuatro instituciones.
El helicóptero será un modelo monoturbina con capacidad para transportar 900 litros de agua y volar a más de 200 kilómetros por hora. Los centros de coordinación de las diputaciones forales serán las encargadas de hacer la solicitud de movilización del helicóptero al Centro de Coordinación de Emergencias de Euskadi, SOS-Deiak. Además del piloto, la aeronave podrá trasladar a bordo hasta a cinco personas que participen en el dispositivo de emergencia, si así lo estimaran oportuno.
Según informa el Gobierno vasco, “las misiones que tendrá que realizar la aeronave serán de apoyo al servicio de extinción de incendios consistente, según la circunstancia particular, en el traslado de brigadas a zonas de incendio, el vertido de agua con o sin espumógeno y vuelos de vigilancia, seguimiento y coordinación”. Su movilización se realizará única y exclusivamente a través del Centro de Coordinación Operativa SOS Euskadi-112. El seguimiento del recorrido de la aeronave se realizará por el Centro de Coordinación Operativa y por los centros coordinadores de las diputaciones forales afectadas por medio de una plataforma de seguimiento en tiempo real.
El helicóptero dispone de sistemas de captación, grabación y transmisión de video en tiempo real, y envío de imágenes a los centros coordinadores de las diputaciones forales y al Centro de Coordinación Operativa SOS Euskadi-112 mediante cámara GPRS.
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