Está claro que durante la historia de la tamborrada las mujeres han tenido gran presencia en la fiesta. Sin embargo, su participación ha cambiado durante los años. El primer documento en el que se tiene constancia de su participación es una fotografía de 1929, donde se ven a mujeres con pantalones bombachos, ya que eran tamborreras turcas. Esta evolución de la participación de las mujeres en la tamborrada se interrumpió en 1936 y el franquismo eliminó la progresiva incorporación femenina a la fiesta.
Estos y otros hitos se han recogido en el libro ‘Paso a paso hacia una tamborrada en igualdad. 1813-2013: Cómo las mujeres hemos ido conquistando nuestro espacio en la Tamborrada’. El alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, ha destacado que en él se pueden encontrar datos, documentos históricos, anécdotas, imágenes, pero sobre todo “una fotografía completa de la tamborrada”. Así, ha recordado que “si bien en la actualidad el 90% de las tamborradas son mixtas, en absoluto podemos decir que la tamborrada sea paritaria”. La concejala de Igualdad, Naiara Sampedro, también ha apuntado que este trabajo de investigación de dos años “deja en evidencia que la historia no se cambia sola, sino que es alguien la que la cambia”. En este sentido, ha alabado la valentía de las mujeres de Kresala que en su día “hicieron frente a lo que supuestamente era tradicional superando obstáculos”.
La coordinadora del trabajo, Beatriz Moral, ha indicado que durante la investigación no se han centrado únicamente en la izada y en la arriada, sino que han analizado la fiesta en su integridad, empezando desde los preparativos, la salida de las tamborradas a la calle, las cenas o los premios. En este último caso han llamado la atención al Ayuntamiento, ya que entre los Tambores de Oro, sólo el 8,5% es mujer, y entre las Medallas al Mérito Ciudadano, el 21%. El investigador Xabier Kerexeta ha señalado que la existencia de tamborradas mixtas “no significa que la tamborrada tenga que ser obligatoriamente igualitaria”, ya que sólo un tercio de sus miembros son mujeres y en poquísimas pueden participar en cualquier puesto.
Historia de las mujeres en la Tamborrada
La tamborrada nació a finales del siglo XIX y fue a principios del siglo XX cuando algunas mujeres comenzaron a incorporarse a la tamborrada como cantineras, soldados y tamborreras. En 1936 el proceso se interrumpió y si el franquismo no lo hubiera interrumpido, muy probablemente las mujeres se habrían ido incorporando progresivamente y sin grandes traumas con tambor o uniforme militar.
En 1980 todas las tamborradas eran masculinas y Kresala fue la pionera en incorporar mujeres a sus filas, ya que inventaron un personaje inspirado en el imaginario histórico: las aguadoras. Tras años de avances, en 2006 las mujeres participaron por primera vez en la izada oficial de la bandera con la compañía Gaztelubide. No obstante, esa noche no pudieron cenar en la sociedad. En la Unión Artesana las mujeres no pudieron cenar hasta 1978. Y en otras sociedades, el veto se sigue manteniendo en la actualidad.
Finalmente, Sampedro ha reivindicado que la tamborrada sea, poco a poco, una fiesta totalmente igualitaria y conseguir este objetivo “depende del conjunto de la sociedad donostiarra”, porque todavía quedan “muchos pasos que dar”.