Fallece Rodolfo Ares, exconsejero vasco de Interior y factótum del socialismo de Euskadi

El exconsejero de Interior vasco entre 2009 y 2012 e histórico dirigente del PSE-EE Rodolfo Ares ha fallecido a los 68 años, según ha trascendido este jueves. Estaba hospitalizado. Nacido en un pequeño municipio de Ourense, de niño llegó con su familia a los barrios obreros de Bilbao. Maestro industrial, era afiliado del partido y del sindicato UGT desde 1977. Ocupó un escaño en el Parlamento Vasco desde 1994 hasta 2016 -salvo su etapa de consejero- y fue portavoz del partido en la Cámara entre 2000 y 2005. Llevaba años apartado de la política.

Ares acumula un larguísimo currículum de cargos políticos. Ha sido edil en Bilbao entre 1983 y 1990, donde llegó a ser teniente de alcalde en coalición con el PNV y asumió competencias como Urbanismo. También fue teniente de diputado general en Bizkaia, igualmente con competencias en Urbanismo. En 1994 dio el salto al Parlamento autonómico y él mismo recordaba como su momento más duro el haber tenido que asumir la portavocía en 2000 tras el asesinato a manos de ETA del dirigente Fernando Buesa. A nivel orgánico, ha participado en las ejecutivas de Bizkaia, de Euskadi y de Ferraz. Como responsable de Organización, era el factótum del partido, hasta el punto de controlar cada proceso. Sus amigos y enemigos destacaban de él que no tenía problemas en poner y quitar sillas para los mítines. Dada su cercanía con Alfredo Pérez Rubalcaba llegó a tener también grandes responsabilidades en el PSOE y, desde luego, estuvo implicado de manera directísima en las negociaciones para el final de ETA abiertas en la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero.

En 2009, lideró las negociaciones ahora impensables para cerrar un pacto entre socialistas y PP para propiciar un Gobierno alternativo al del PNV en Euskadi condicionado por una aritmética parlamentaria en la que estaba ilegalizada la izquierda abertzale y años de distanciamiento con el nacionalismo de Juan José Ibarretxe por sus planes soberanistas. En aquel Ejecutivo, liderado por Patxi López, Ares nunca tuvo el cargo de vicelehendakari, pero lo era 'de facto'. En algunos momentos se le denominaba 'coordinador'. Asumió la competencia de Interior con un mensaje de “tolerancia cero” hacia el entorno de ETA, entonces todavía operativa. Propició iniciativas para retirar pancartas en las calles.

Con todo, su etapa en Interior quedó marcada por el fallecimiento del joven Íñigo Cabacas en una carga con pelotas de goma de la Ertzaintza tras un partido europeo del Athletic de Bilbao en el viejo San Mamés. Eso ocurrió en la Semana Santa de 2012, a pocos meses del final de la legislatura. Aunque no vinculó su marcha con esto, no completó el mandato y fue Idoia Mendia la que asumió al final de la etapa de López la cartera de Interior. A instancias de los mandos, Ares estuvo a punto de negar públicamente que existiera la carga.