Los 'fichajes' del PSE-EE en Donostia: una candidata del PP, ediles de IU y EA y una asesora del PNV

El anuncio del exalcalde Odón Elorza de que dará la batalla en unas primarias socialistas por ser candidato de nuevo en 2023 contra la elegida por la dirección del PSE-EE, Marisol Garmendia, ha puesto el foco en la situación del partido en Donostia y en su composición. Este martes, a través de 'El Diario Vasco', medio centenar de cargos y militantes mostraban su apoyo a Garmendia. Entre los firmantes aparecen todos los 'fichajes' de los últimos años, como Miren Albistur, candidata del PP en 2015 y desde hace unos años asesora socialista, Duñike Agirrezabalaga, edil en su día con IU y luego escindida a Alternatiba –formación ahora integrada en EH Bildu–, o Harkaitz Millán, líder de la oposición en tiempos de Elorza como portavoz de EA y que llegó a liderar las juventudes de ese partido independentista también ahora en EH Bildu, Gazte Abertzaleak. La propia Garmendia fue asesora del PNV antes de iniciarse en el PSE-EE con las mismas funciones hasta escalar en el organigrama.

“Yo mismo procedo de otro partido”, bromea el secretario general en Donostia, Enrique Ramos. Su caso, en todo caso, es muy diferente. Se afilió en 1990 a Euskadiko Ezkerra (EE), una formación que mediada esa década se fusionó con la federación vasca del PSOE para crear el actual PSE-EE. Preguntado por la conjunción de exmiembros destacados de otros partidos en el actual socialismo donostiarra, Ramos sostiene que “es una cosa bastante natural”. El dirigente del PSE-EE destaca el carácter “liberal, abierto y de ciudad moderna” de Donostia, donde la gente “tiene menos prejuicios y evoluciona”, lo que da pie a que haya “más diversidad”.

Contar con Albistur, con Agirrezabalaga y con Millán, además de apostar por Garmendia como candidata, hace “más plural” y “más abierto” al PSE-EE, según Ramos. Se “ensancha la implantación social”. “Es algo muy natural, insisto. Siempre hablan de lo bien acogidos que se han sentido. Nadie les hace de menos por el hecho de venir de otra sensibilidad política”, incide Ramos, que matiza que la “eclosión” de Podemos hizo que también simpatizantes socialistas recalaran en las filas moradas. Críticos con el partido han acabado apoyando a EH Bildu –como la exconsejera Gemma Zabaleta– o siendo candidatos a lehendakari por Vox previo paso por UPyD –como Niko Gutiérrez–.

“En San Sebastián siempre han tenido esa capacidad de sumar gente que venía de otras organizaciones, pero al final para llevar adelante siempre un proyecto de izquierdas y socialista”, destacan fuentes del PSE-EE a nivel de Euskadi. “Nosotros actuamos con esa pretensión de aglutinar a la izquierda vasca”, abundan rememorando las elecciones locales de 2015 en las que Ernesto Gasco, entonces candidato, no ocultó en ningún momento los fichajes de Millán y Arrizabalaga precisamente para enfrentarse, entre otros, al PP de Albistur.

Los socialistas vascos tienen ya muy próximo el arranque del proceso de conformación de candidaturas. Solamente en Donostia se prevé una elección entre dos candidatos. Los alcaldes actuales, como José Antonio Santano en Irún o los regidores de Ermua, Eibar o Lasarte-Oria, tienen más blindaje frente a candidatos alternativos y en Vitoria y Bilbao parece existir consenso con las figuras de Maider Etxeberria y Nora Abete. Para las elecciones forales los cabezas de lista serán, si no median sorpresas, Teresa Laespada en Bizkaia, Cristina González en Álava y José Ignacio Asensio en Gipuzkoa. En todo caso, estos nombres se harán oficiales el 19 y 20 de septiembre. Solamente si se completan las primarias el resultado no se confirmará hasta el 16 de octubre.

Además, en el caso de Donostia Elorza tiene que llegar al mínimo de avales para concurrir y que haya urnas. Los de Garmendia se dan por hechos por el apoyo recibido del aparato y del medio centenar de cargos significativos, entre los que también está la parlamentaria Susana Corcuera, el histórico Julio Astudillo o Alfonso Gurpegui, viceconsejero en el Gobierno vasco. El exalcalde, que ha iniciado un diario de precampaña en Facebook, afirma que está peleando los avales “uno a uno”, sin facilidades, y lamenta que un número tan alto de cuadros se haya decantado ya por uno de los dos contendientes en liza sin esperar al debate e intercambio de ideas.

“Antes de iniciar el proceso de primarias, antes del más mínimo debate ante la militancia, sin escuchar al otro ni haber podido mantener una reunión con los afiliados, ya hay quienes expresan –en un importante medio local– su total apoyo a la candidata oficial y hacen algunas afirmaciones que yo no quiero ni debo rebatir públicamente”, escribe Elorza.

Así ha criticado el manifiesto de apoyo a Garmendia y también al alcalde Eneko Goia, del PNV y al que los socialistas apoyan en coalición: “Con total respeto a la actitud de mis compañeros, afirmo que unas primarias van de otra cosa. No se van a convertir en una colección de adhesiones o una exposición de músculo. Eso no interesa a la ciudadanía ni sirve para aportar más fuerza social ni más claridad de proyecto ni más legitimidad pública a las posiciones de un partido como el PSE-EE (PSOE). Esa práctica de las listas de adhesiones sin un debate previo representa la vieja política orgánica ya superada por el PSOE en su reglamento federal. Lo realmente importante es poder debatir delante de la militancia socialista en las diferentes agrupaciones. Quiero explicar con detalle mi crítica rotunda a la mala gestión del alcalde del PNV, quiero exponer mi opinión sobre la tarea realizada por el grupo socialista en el Ayuntamiento y tengo ganas de defender las ideas fuerza de mi proyecto de ciudad para afrontar los difíciles retos de Donostia–San Sebastián. Curiosamente, todo lo anterior requiere aplicar el sentido de la libertad y las reglas democráticas de unas primarias ejemplares, con neutralidad efectiva de todas las personas que formen parte de los órganos de dirección del PSE-EE donostiarra”.