La Korrika llega a su meta con gran afluencia de público y un mensaje: el apoyo al euskera es “político” y “urgente”
Han pasado once días (y sus noches) y casi 2.800 kilómetros. La Korrika de 2024 ha llegado ya a su meta en Baiona tras recorrer todos los territorios del euskera. Como en otras ediciones, el testigo ha ido pasando de mano en mano desde la partida en Irún hasta este final, convertido en una fiesta.
La escrita Garazi Arrula ha sido la encargada de portar el último testigo. Era la autora del mensaje final. “El asunto lingüístico es político. Y urgente”, ha plasmado. Ha pedido pasos “de manera colectiva” y sin “vergüenza” en el avance de la lengua vasca precisamente en un territorio donde no es oficial. “Korrika es un pueblo con hambre”, ha señalado. Ha apelado también al orgullo, precisamente el lema de la edición, ‘Harro herri’ o ‘pueblo orgulloso’.
Organizada por AEK, la carrera ha contado con mucho seguimiento e importantes apoyos institucionales. Ha escrito AEK en X que ha sido la más populosa. Tampoco ha estado exenta de polémica ya que Covite ha criticado la exhibición de mensajes o fotografías de presos de ETA en varias localidades. La organización también había advertido contra mensajes sexistas o racistas.
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