Avanza la campaña electoral para las municipales y forales en Euskadi y el grupo de actualidad del centro de mayores Bizan del barrio de Lakua-Arriaga de Vitoria accede a convertir su clase en una suerte de debate electoral para hablar, sobre todo, de pensiones y de Sanidad. Su profesor, Álex Ayala, periodista, les ha pedido que hagan los deberes y que se lean antes los programas electorales. Algunos han cumplido y son capaces de explicar dónde incide el PP o qué plantea EH Bildu. La tertulia dura 90 minutos, com un partido de fútbol. Los intervinientes acceden a ser citados por su nombre de pila y, en su mayoría, también posan para una fotografía de familia. La conversación se divide en dos bloques, uno primero sobre pensiones -¿es suficiente la subida del 8.5% ante la inflación?, ¿qué futuro tiene la Seguridad Social?- y uno segundo sobre Osakidetza y su situación, así como sobre la pandemia y las residencias de mayores.
Las pensiones: “Pobre toda la vida”
— Estíbaliz: “Hay mucha diferencia de unas pensiones a otras. Las que no hemos pagado tanta Seguridad Social porque tenías que estar más en casa por la familia o por los niños, a la hora de cobrar las pensiones nos pagan una porquería. A mí me han subido a 760 pero dime tú a ver si se puede vivir. Hay mucha desigualdad entre las pensiones. Tendría que ser más igualitario el sistema”.
— Rosa: “Las pensiones tendrían que subir un poquito más. Los precios han subido muchísimo, el pescado, la fruta, la carne… Ha subido todo, todo, todo”.
— Juanjo 1: “Soy pensionista desde hace poco y veo que las diferencias son muy grandes. Habría que hablar del sistema, que está basado en que los que trabajan están pagando. No es sostenible en el tiempo. Más que una pensión es un subsidio, porque algunos llevan cobrando 15, 20 o 30 años y no han generado esa riqueza. ¿Es un sistema igualitario? No, no lo es. Si somos todos iguales, igual no tendría que haber una pensión de 2.500 euros a partir de determinados años. Pero nadie quiere mojarse en el tema de las pensiones. Lo utilizan para subir votos. Lo del 8,5% ha sido súper bueno, pero es por encima de los salarios de los trabajadores que sustentan esas pensiones. 1.350 el salario medio y 1.450 de pensión media”.
— Juanjo 2: “Voy a atacar a la Seguridad Social. Las pensiones han subido relativamente bien pero no equitativamente. Han subido el 8,5%. Eso quiere decir que a más pensión, más subida. No es equitativo”.
— José Mari: “Es la sociedad en la que vivimos, que es tremendamente desigual toquemos el tema que toquemos. Hay salarios muy bajos y muy altos y eso ocurre en las pensiones, que son en relación a lo que has cotizado. Has sido pobre toda tu vida y cuando seas viejo vas a seguir siéndolo. Nadie es capaz en este país ni en el otro ni en el de más allá de hacer una sociedad más igualitaria. El pan o el azúcar hay que pagarlo al mismo precio seas la hija de Botín o seas un jubilado. Lo que consumimos los de abajo es lo que más ha subido, la comida, la luz, el gas, el IBI, … Comprarse un coche a lo mejor no sube tanto. Este año las pensiones afortunadamente han sido bastante generosas comparando los sueldos de los trabajadores. El 8% no es mucho para una pensión baja pero menos es el 0,25%. Nos podemos felicitar por que este año, por la razón que sea, el Gobierno ha sido bastante generoso con los pensionistas”.
— Presentación: “Estáis hablando de las pensiones, pero ¿y las viudas? Tuve a mi marido trabajando durante 38 años, se jubiló con 63 años, después de 38 años de cotización a la Seguridad Social. Se jubiló dos años antes y le descontaron un 70%, antes de morir estuvo cinco años jubilado y me descontaron a mí un 40%. Me quedó una porquería de pensión. Menos mal que yo he estado trabajando y he cotizado”.
— Paula: “Soy del ‘baby boom’. Empezamos a trabajar muy pronto: yo con 15 años. Gracias a Dios los últimos años los sueldos han sido altos y mi pensión me parece que es bastante digna. Los que nos jubilamos ahora tenemos pensiones bastante dignas, pero si miras hacia atrás a los que se jubilaron hace 15 o 20 años… ¿Sostenibles? Que lo saquen de otros presupuestos…”
— Mari Sol: “Hemos cotizado lo que nos correspondía. No nos han dado a elegir. Yo pagaba muchísimo y el sueldo no era alto. Tengo una pensión digna. Todo el mundo tiene que cobrar para vivir dignamente. Lo que veo injusto ahora que tengo la declaración de la renta es que tengo que pagar impuestos por la pensión que cobro, que la pagué cuando trabajaba”.
Sanidad: “Está muy bien salvo al que le toque que esté mal”
Y de las pensiones a la situación de la Sanidad pública. ¿Cómo ha afectado la COVID-19? ¿Se nota en las listas de espera? ¿Y las residencias?
— Mari Sol: “Que me aclaren si realmente hay escasez de médicos o si es que no quieren pagar. Cada año salen del MIR, ¿no? ¿O es que se van fuera porque no les pagan? ¿El coronavirus? No lo viví mal. Estábamos en casa mi marido y yo y no teníamos agobios. Aunque tengo una hija, que no vive en Vitoria, y hubo una temporada en que no nos podíamos ver. A mí me dio por hacer trajes de neska, ¡aunque no he cosido en mi vida! Entre coser y descoser se ha pasado el tiempo. Creo que no me ha quedado ningún trauma”.
— Paula: “La llegada de la pandemia me tocó trabajando en geriatría. Era auxiliar en una residencia pública. Fue horroroso. No teníamos ni mascarillas ni batas. Los protocolos cambiaban cada día. Me parece que tenemos unos servicios públicos excelentes en Álava, lo mismo en Sanidad que en servicios sociales. Si analizamos lo que supone para el gasto público, en Diputación el gasto mayor es el Instituto Foral de Bienestar Social. Hay residencias públicas con muchas plazas y me parece que estamos lejos de muchas otras comunidades. En Sanidad también. Yo, personalmente, no tengo ninguna queja. Me parece que se trabaja muy bien”.
— José Mari: “Cuando llegó la pandemia nos cogió desprevenidos, sobre todo a los que tenían la responsabilidad. Paula, que estemos mejor igual no debe consolarnos. Si los sanitarios salen a la huelga es por algo. No salen sin más. A veces no llegan. ¿Por qué se ha llegado a este situación? Vivienda pueden construir, pero médicos y enfermeras no se hacen de la noche a la mañana. Vamos a pasar un periodo que no va a ser agradable ni para los que están trabajando ni para nosotros”.
— Juanjo 2: “Últimamente las listas de espera son algo que te desespera. ¿Es posible que en el siglo XXI haya que estar tres años en la unidad del dolor? Me dicen que para lo que tengo demasiado bien estoy. Pero eso para mí no es nada que me halague. Yo no puede decir que la Sanidad esté bien en Traumatología. Las listas de espera me parecen muy amplias”.
— Menchu: “Ayer mismo tuve que estar toda la tarde en Urgencias. En un 95% ha sido maravilloso y les daría casi en general un 10 tanto a los médicos como al resto del personal sanitario. Pero las listas de espera… es traumático. Sobre todo en trauma [risas]. No hay derecho. Sobre el tema de las residencias, considero que sí que se necesitan más, aunque en Vitoria y en Álava estamos bastante bien. Pero no con las privadas, con las públicas. Yo estaría mucho más contenta de estar en una pública, tanto en el sentido del material como de la atención, Por cierto, la soledad es un tema que me parece súper importante. Hay muchas personas que viven solas porque quieren vivir solas, pero otras no”.
— Carmen: “¡Con Traumatología hemos topado! Llevo dos años muy desesperada. He discutido con todo el mundo. La espera y el trato durante la espera ha sido horroroso. La Sanidad está muy bien salvo al que le toque que esté mal. ¿Residencias? Intentan desde hace tiempo privatizar todo lo que se pueda. Han eliminado plazas porque el precio es inasumible. Conozco gente que se ha comido el patrimonio. En las privadas es imposible entrar. Ni pagando 3. 500 euros”.
— Juanjo 1: “¿Este modelo es sostenible a largo plazo? Están en huelga y los sindicatos reivindican cosas que tienen un coste. Pero, como dice la consejera [Gotzone Sagardui], cada año estamos gastando más. El mayor gasto es Sanidad, tanto en Euskadi como en España. ¿Que faltan médicos? Leí que de 1.400 personas que habían sacado la licenciatura no llegaba al 10% los que elegirían la primaria. Los demás, especialidad y a vivir. Ganar más y trabajar menos”.
— Carmen: “Si es difícil en la capital, imagínate en un pueblo. Tuve que saber álgebra para que me recibiera un médico. ¡30 kilómetros para hacer una radiografía! A ver quién elige eso. Ir de médico a un pueblo”.
— Rosa: “Por suerte, he ido muy pocas veces al médico. Pero mi hijo hace poco pidió cita por un resfriado y no se la daban hasta la semana siguiente y no me parece muy normal”.
— Juanjo 2: “Los ambulatorios están vacíos. Lo hacen todo por teléfono”.
— Rosa: “Si tienes algo grave, a Urgencias. Está petado siempre”.
— Juanjo 2: “Según como sea el día, pero, si no es muy urgente, tienes 32 delante de ti”.
— Carmen: “A mí me han hecho esperar hasta cuatro o cinco veces hasta las dos de la mañana…”
— José Mari: “La última vez estuve siete horas allí...”
— Asun: “Yo soy conformista. ¿Que no me encuentro bien? Para qué voy a ir. Ya iré cuando me caiga y me rompa un hueso. Se te ponen los pelos de punta como tengas que andar con traumatólogos”.
— Estíbaliz: “Hace diez años todos estábamos atendidos de maravilla. Ahora ha empezado la inmigración a venir y hay que atender a más gente. No me extraña que no haya más que problemas…”
— Carmen: “No, no. Los extranjeros, cuando son jóvenes, lo que traen son niños. Somos nosotros los que hace 20 años éramos más jóvenes e íbamos menos al médico”.
— Juanjo 2: “Nos hemos hecho viejos a la vez. Por eso es el atasco…”
— Menchu: “Me gustaría hablar de salud mental, tanto en jóvenes como en mayores. Es tremendo cómo está desatendida. Necesitamos psicólogos y psiquiatras. Se esconde mucho, hay un vacío muy grande y hay que darle mucha caña. Lo hemos padecido en la familia con mis nietos… Tú imagínate que vas en mayo con un problema. Tienes que esperar a diciembre. Y lo privado es carísimo. Hay personas que no lo pueden pagar”.