La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

'On-Giz', la asociación que “despierta a los hombres del silencio y la comodidad de sus privilegios machistas”

“Los hombres tenemos responsabilidad en la desigualdad, pero también en la igualdad. Tenemos el poder de paliar las injusticias que se han dado en la sociedad a lo largo de la historia con respecto a las mujeres y con respecto a nuestra forma de ser. Los hombres hemos estado tradicionalmente condicionados para actuar o ser el rol opresivo con respecto a las mujeres. A raíz de eso hemos creado una sociedad machista y patriarcal donde los hombres encajamos bien, pero que para que las mujeres encajen deben aceptar ser oprimidas y aceptar ser seres humanos de segunda. Mientras las mujeres no llegan a unas posiciones porque las ocupamos los hombres, nosotros no llegamos a otras que tradicionalmente les han correspondido a ellas, como los trabajos relacionados con los cuidados”, asegura Xabi Odriozola, que lleva 40 años creando grupos de trabajo con hombres para abordar estos temas.

¿Por qué es importante la implicación de los hombres para alcanzar la igualdad? Odriozola considera que a pesar de que “el trabajo con mujeres es fundamental para lograr un empoderamiento feminista, las intervenciones con los hombres son necesarias para que eso sea posible”. “Hace décadas entendimos que nuestro papel era importante y que era hora de despertarnos del silencio y la comodidad de nuestros privilegios machistas. Por eso comenzamos a reunirnos en grupos de hombres”. Así nació la asociación 'On-Giz' en la que 200 personas trabajan -120 mujeres y 80 hombres- “en una apuesta clara y muy activa para desprogramar nuestro propio sexismo y el sexismo de la sociedad”.

Odriozola contesta las preguntas de este periódico mientras viaja junto a su compañera Esther Molinero de camino a recoger en un acto en Vitoria el Premio Emakunde a la Igualdad de manos del lehendakari, Iñigo Urkullu, la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa, y de la directora de Emakunde, Miren Elgarresta. 'On-Giz' ha sido galardonada con el premio gracias a su labor con grupos de hombres y mujeres, trabajando con los hombres la toma de conciencia de la dominación masculina, el sexismo y el patriarcado, y con las mujeres el empoderamiento y liderazgo personal y colectivo.

En palabras del lehendakari, “On-Giz nos recuerda que la igualdad es un reto compartido, que nos interpela a todas y todos: hombres, mujeres, instituciones, asociaciones, empresas, familias, medios de comunicación… porque los problemas estructurales y globales solo se pueden solucionar de manera colectiva, trabajando en equipo”.

Trabajamos con hombres que quieren cambiar su modo de vida y entender que son machistas porque son hijos del patriarcado

En la asociación, además de otras funciones como formaciones y talleres específicos, realizan cada semana grupos de trabajo con mujeres, con hombres y mixtos. El perfil de las personas que acuden a 'On-Giz' es variado y está abierto a todo tipo de edades. Sus integrantes tienen desde los 20 hasta los 70 años. Eso sí, tienen que ser personas dispuestas a realizar un cambio en sus vidas. “En un primer momento trabajábamos solo con hombres. Tenían y tienen que ser hombres que quieren cambiar su modo de vida y entender que son machistas porque son hijos del patriarcado. Eso es algo difícil de reconocer y habrá muchos hombres que no lo entiendan jamás, por eso nos interesa que quien se acerque a la asociación tenga la mente abierta. No nos sirve de nada que venga un ejecutivo que quiere hacer un curso de igualdad para ponerlo su currículum y no quiera realizar un cambio real en su vida”, sostiene Molinero.

A pesar de que durante los primeros años trabajaban exclusivamente con hombres, después comenzaron a trabajar con las mujeres e hijas de esos mismos hombres a los que habían instruido el feminismo. Y de ahí el círculo se hizo cada vez más grande. “La gente llega gracias al boca a boca, no somos muy amigos de las redes sociales ni otros medios. Somos selectivos porque queremos trabajar con personas que de verdad sepan que lo que hacemos va a servir para algo”, insiste Molinero.

Según asegura, la palabra que más escucha en sus encuentros tanto con mujeres como con hombres es “libertad”. “Según vamos tomando conciencia de cómo el sexismo opera en los hombres, cómo lo ejercen y cómo eso afecta a las mujeres. De alguna manera, lo que yo veo es que vamos ganando una libertad en la que ya no nos vemos actuando según los mensajes que nos dice el patriarcado. Gracias a este tipo de intervenciones, las mujeres consiguen más recursos para hacer frente al sexismo y los hombres para no actuar de forma sexista o para parar a los hombres que actúan de forma machista a su alrededor”, indica.

No nos sirve de nada que venga un ejecutivo que quiere hacer un curso de igualdad para ponerlo su currículum y no quiera realizar un cambio real en su vida

Desde 'On-Giz' son conscientes de que muchos hombres no están de acuerdo con responsabilizarse del machismo y de que muchas mujeres no están dispuestas a que ellos formen parte de la lucha feminista. “Muchos hombres no reconocerán jamás que son machistas y muchas mujeres pensarán que este trabajo lo debe hacer solo el feminismo o que solo les corresponde a ellos acabar con el machismo. Hemos aprendido a movernos frente a esos oleajes”, reconoce Odriozola. Para ello, desde la asociación reconocen estar en constante contacto con el movimiento feminista en el que muchas de sus trabajadoras forman parte.

El jurado del Premio Emakunde, de un valor de 14.400 euros ha valorado el trabajo de 'On-Giz' con grupos de hombres, con grupos de mujeres, así como con grupos mixtos “para repensar y deconstruir modelos de masculinidades y feminidades hegemónicas y para favorecer la construcción de nuevas identidades de género alternativas, liberadoras y no hegemónicas”. En este sentido, la directora del Instituto Vasco de la Mujer (Emakunde), Miren Elgarresta, ha destacado la labor que está desempeñando en la sociedad “a través de sensibilización, concienciación y formación para la igualdad y para la deconstrucción patriarcal, tanto en territorio vasco, como a nivel estatal e internacional”.  

Por su parte, la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa, ha recordado la importancia y la necesidad del papel activo de los hombres en la construcción de una sociedad más igualitaria y ha señalado que este es un momento “histórico clave para la igualdad”. “Existen discursos contrarios ante los que tenemos que estar alerta, pero, al mismo tiempo, tenemos una sociedad vasca cada día más sensibilizada”, ha reconocido.