El PNV no incluye en sus programas electorales para Álava, presentados este lunes, que la conexión de la 'Y vasca' con Pamplona se haga por Vitoria. “No. Se habla de impulsar la entrada del tren de alta velocidad, pero no hay un apartado específico para [la línea Vitoria-Pamplona]”, ha indicado a los periodistas José Antonio Suso, que ha comparecido con sus candidatos, Ramiro González y Beatriz Artolazabal. En todo caso, ha recalcado que la “posición” es de apoyar esa solución frente a la de Ezkio/Itsaso, defendida por este mismo partido en otros ámbitos institucionales, aunque no es una incoherencia territorial exclusiva del PNV. Suso ha afirmado desconocer si el PNV de Gipuzkoa o la coalición Geroa Bai en Navarra (que integra a 'jeltzales' y Socialverdes) recogerá expresamente una defensa de la línea Pamplona-Ezkio/Itsaso.
Artolazabal, en la entrevista electoral concedida a este periódico, ya se pronunció también sobre ello: “Creo que la llegada del tren de alta velocidad de Pamplona a Vitoria es la más acertada. Es una decisión que va a estar condicionada por los estudios que se vayan a realizar y ya se ha anunciado que hasta el año 2024 el Ministerio no se va a pronunciar. Habrá que analizar desde el punto de vista económico y también desde el punto de vista medioambiental, sostenible y geológico cuál es la solución más acertada. Pero, como candidata en Vitoria, creo que la solución por Vitoria es la mejor”.
A veinte días de las elecciones forales y municipales y a cuatro del inicio oficial de una campaña ya lanzada desde hace tiempo, el PNV alavés ha querido presentar los compromisos con la ciudadanía de González y de Artolazabal. Según Suso, hay un resumen de ambos programas, que se han entregado en 'pen drive': “Modelo PNV”. “Como partido, sabemos las necesidades, tenemos experiencia y conocimiento y las personas y equipos adecuados”, ha apuntado el líder del Araba Buru Batzar. En la misma línea, González ha asegurado que no es lo mismo leer el programa del PNV que el de otra candidatura. A su juicio, esto “parte de un conocimiento exhaustivo de la realidad” y del hecho de “haber gobernado durante los últimos ocho años”. “Otras opciones sin responsabilidad [de Gobierno] pueden prometer, prometer y seguir prometiendo [...]. Nosotros somos el partido que garantiza la estabilidad. Somos la seguridad y la confianza para una futura Álava próspera. Somos gente de palabra [...]. Es mucho más que una declaración de intenciones. Es la propuesta de la formación política que lidera el Gobierno”, ha apostillado.
El programa foral tiene 370 medidas en cinco ejes. Ha citado González las renovables y los regadíos -necesarios por la sequía, ha indicado-, la necesidad de seguir ampliando la oferta de plazas en las residencias -también concertadas y no solamente públicas-, impulsar políticas industriales y hasta nuevas líneas de transporte público. Su mapa-resumen de proyectos -Treviño incluido- pretendía mostrar actuaciones en toda la provincia y no solamente en Vitoria, que copa el 75% de la población.
En el caso de Vitoria, son también “casi 300 medidas”, según Artolazabal, que ha decidido dedicar un apartado entero del programa a algo que ha llamado “Orgullo de ciudad” para “llevar a la capital de Euskadi a un futuro ilusionante” porque “es una gran ciudad a nivel internacional”. Ya presentado, el denominado “anillo azul” parece constituir la gran promesa de campaña del PNV, que optó por relevar a Gorka Urtaran para apostar por la exconsejera de Iñigo Urkullu. Se trata de un complemento al ya existente anillo verde para “integrar” el río Zadorra en la ciudad con espacios de ocio y hasta playas fluviales. “Queremos mirar ahora a nuestro tesoro azul”, ha afirmado. “Tenemos fuerza. Tenemos ilusión”, ha solemnizado Artolazabal, que cree que “las encuestas marcan tendencias” y que todas son “positivas” para sus aspiraciones.
Entretanto, el presidente del partido ha recalcado que Urtaran no fue “apartado” y que reservan para él “otras responsabilidades” por su “valor político”. No ha dado Suso ninguna pista, aunque Euskadi encara un año completo de elecciones con las generales, las autonómicas y las europeas después de estas municipales y forales.