Un Seat 124. Esa ha sido la analogía que ha utilizado Andoni Ortuzar para describir los 124 años que cumple el Partido Nacionalista Vasco (PNV). Y es que, el presidente del partido jeltzale, ha definido su modelo de gestión como aquel que el resto de los partidos miran de reojo para tomar ejemplo: “el PNV es hoy a los partidos políticos lo que aquel 124 era entonces a los coches, el coche de una época, todo un clásico. El PNV es el partido que todo partido actual quisiera ser”.
Durante la tradicional ofrenda por la festividad de San Ignacio en Bilbao, con la que los 'jeltzales' han celebrado el 124 aniversario de la fundación del partido, Ortuzar ha señalado que la clave de la longevidad del PNV -el segundo partido más longevo de España, después del PSOE que este año cumple 140 años- es que el partido siempre ha estado por encima de los dirigentes, y el pueblo y el bien común han estado siempre por encima del partido“.
“Con respecto a la investidura fallida, no queremos dar lecciones pero haciendo así las cosas es imposible que salgan bien. Queriendo ganar por goleada, retransmitiendo en directo las reuniones, buscando el choque en lugar del entendimiento, la imposición en lugar de la negociación...Así los acuerdos son imposibles. Hay que cambiar esa forma de hacer política esto es mucho más serio que una serie de televisión. Si esto es la nueva política, me quedo con el modelo PNV. Frente a la política líquida, política sólida, modelo PNV”, ha indicado Ortuzar durante el discurso, que ha tenido lugar en los Jardines de Albia, frente a la estatua de Sabino Arana.
Un modelo de “política sólida” en el que ha puesto como ejemplo a Euskadi, donde se lleva más de tres décadas gobernando prácticamente todas las instituciones en coalición, algo que, según ha apuntado, también ocurrirá en Navarra. “Donde está el PNV, hay acuerdo. En estos momentos de convulsión política, desde aquí debemos mandar una luz de esperanza de que los acuerdos entre diferentes son posibles”, ha defendido.
“El PNV es lo mejor que hay”
María Jesús y Begoña son madre e hija. Ambas viven en Bilbao y esperan, con entusiasmo, en primera fila, las palabras del presidente del partido, pero sin perder de vista a Iñigo Urkullu. “Quiero darle un beso al lehendakari”, le indica María Jesús a su hija, haciéndole señas para que se diera prisa en cruzar la marabunta de personas que rodeban al lehendakari en busca de una foto o, simplemente, para intercambiar con él algunas palabras. “El PNV es lo mejor que hay, eso decía mi aita”, recuerda María Jesús. “Lo que ha dicho Andoni Ortuzar es cierto, el diálogo es fundamental, y yo creo que el PNV está siendo un ejemplo de eso. El PNV no está mirando a su ombligo como los otros partidos, está mirando al bien común. Sin protagonistas”, ha señalado Begoña.
“Una Euskadi libre”
Sobre los retos pendientes del partido con el Estado, Ortuzar ha enmarcado la polémica territorial y ha recordado que “por encima de coyunturas”, el PNV nació “para construir una Euskadi libre, de mujeres y hombres libres” y que, de esta forma “van por el buen camino”, porque “Euskadi es hoy más nación que nunca”. Además, ha afirmado que aboga por “proteger el autogobierno” y por “seguir avanzando” hacia “más cotas de soberanía”.
En un mensaje más de partido, Ortuzar ha anunciado que la Asamblea General del PNV se celebrará el próximo año, en el marco de los actos que la formación organizará para celebrar su 125 aniversario. “Pasado, presente y futuro en un mismo proceso” en el que aprovecharán para preguntarle a la sociedad “qué espera del partido”.