El PSE-EE celebrará a más tardar en marzo de 2025 un congreso que revalidará a Eneko Andueza

El PNV y EH Bildu están a punto de sumergirse en procesos congresuales que acabarán en marzo y febrero, respectivamente. Pero también lo va a hacer el PSE-EE, lo que supondrá cambios en las tres principales formaciones vascas. Según indican fuentes del partido, los socialistas vascos celebrarán un congreso como muy tarde en marzo de 2025 para renovar sus órganos internos, aunque todas las voces coinciden en que no habrá sorpresas y en que Eneko Andueza continuará como secretario general.

Andueza, que este sábado tiene un acto público con cargos de su partido, fue designado a finales de 2021 como sustituto de la entonces vicelehendakari, Idoia Mendia. No se han cumplido aún tres años de aquel congreso en el que se impuso con claridad a la exedil de Basauri Soraya Morla, pero la celebración del congreso federal anunciado por Pedro Sánchez para este otoño obliga a todas las organizaciones autonómicas a preparar en cascada los suyos entre diciembre y marzo. Es más, después, con un plazo algo más amplio, habrá congresos provinciales en Álava, Bizkaia y Gipuzkoa, donde está mucho menos claro que se mantengan al frente Cristina González, que acumula varios mandatos, Mikel Torres, que ahora es vicelehendakari, y José Ignacio Asensio, sobre el que pesa una investigación judicial.

El PSE-EE afronta el proceso congresual, según viene insistiendo públicamente Andueza, habiendo consolidado su posición institucional tras el último ciclo electoral. Los socialistas ganaron las generales de 2023, estuvieron a punto de hacerlo en las europeas de 2024 y subieron dos escaños en las autonómicas, también de 2024. En las municipales, accedieron a la alcaldía de Vitoria con Maider Etxebarria, aunque sin ganar los comicios y merced al apoyo del PP. El PSE-EE es socio del PNV en las principales instituciones y, en el caso del Gobierno vasco, han pasado a controlar cinco carteras, Economía, Trabajo y Empleo, Vivienda, Movilidad, Justicia y Derechos Humanos y Turismo, Comercio y Consumo. “Iniciamos el curso político con más fuerza, propulsados por los resultados de las últimas citas electorales”, dijo Andueza el 13 de septiembre en Bilbao.

Fricciones con el PNV

En esa misma comparecencia, Andueza lanzó un primer aviso al lehendakari, Imanol Pradales, sobre un posible interés del PNV en explorar un acuerdo soberanista con EH Bildu para superar el Estatuto de 1979. Le remarcó que no pueden querer una mayoría con los socialistas para tener estabilidad institucional y a la vez coquetear con otra suma abertzale para “transitar otros caminos”. Sin cumplirse cien días de la llegada de Pradales a Ajuria Enea, el plazo que habitualmente se concede de cortesía a los nuevos mandatarios, Andueza ha vuelto ya a exhibir perfil propio. Ya lo hizo con Iñigo Urkullu en la pasada legislatura y es una de las razones por las que optó por no entrar al Ejecutivo.

Esas fricciones, las primeras entre PNV y PSE-EE de la legislatura, se han seguido produciendo esta semana. Otro dirigente socialista, Ekain Rico, tomó la palabra este martes en el Parlamento Vasco durante la comparecencia de la consejera de Gobernanza, Administración Digital y Autogobierno, María Ubarretxena, para afearle que aspire a un “nuevo estatus” y no a un “nuevo Estatuto”, que es lo acordado en el programa de Gobierno, según insistió. Y, este miércoles, en Gipuzkoa, la diputada general del PNV, Eider Mendoza, reclamó para Euskadi el derecho a decidir y, de nuevo, los socialistas salieron al paso asegurando que eso excede lo pactado en materia de autogobierno.

¿Cuál ha sido la respuesta? El PNV ha elevado el tono dialéctico contra el Gobierno de Pedro Sánchez, que precisa de sus apoyos. Los nacionalistas ya se desmarcaron de la mayoría gubernamental en la votación sobre Venezuela y en los últimos días la presidenta del partido en Bizkaia, Itxaso Atutxa, ha sido la encargada de lanzar el mensaje. “Lo tiene cada más difícil. Ni siquiera el voto de [José Luis] Ábalos lo tiene asegurado”, ha ironizado la dirigente vizcaína en Onda Vasca. Y añadió: “Vemos un problema, sobre todo, con su forma de trabajar”.