Hace tiempo que desde diversos sectores se alerta de que Euskadi ya no es el país de atracción empresarial que era antes y de que pierde competitividad frente a otras regiones. Y es en ese contexto, en plena crisis económica impulsada por la pandemia primero y después por las consecuencias de la guerra de Ucrania, cuando surge Zedarriak, el nuevo lobby socio-empresarial. Nace con la pretensión de “reforzar el atractivo económico y empresarial” y que “Euskadi ”no se quede atrás en las transformaciones económicas“. Es un foro que desde su primer informe se ha convertido en un nuevo quebradero de cabeza para el lehendakari, Iñigo Urkullu, y su Gobierno, por pedir cambios fiscales -mirando directamente a la fiscalidad de Madrid y su 'modelo Ayuso'- y sociales de Euskadi y así como una renovación para frenar la pérdida de competitividad de vasca y abordar las grandes transiciones digital, climática y demográfica con éxito.
Zedarriak, que empezó a gestarse a finales del año 2021 y que celebró su primera reunión presencial en febrero de este año, nace con la pretensión de ir más allá de un foro empresarial. Aunque lo integran destacados empresarios, seis de los doce fundadores no están directamente relacionados con el mundo de la empresa. Por eso, según confirman fuentes del foro, en el seno de esta nueva organización no ha caído demasiado bien que su primer informe se haya entendido como una parte más de la presión empresarial al Gobierno para que modifique el sistema fiscal a su favor, y que lleva ejerciéndose desde hace tiempo desde otros foros empresariales como Confebask o el Círculo de Empresarios.
Pero ¿quiénes son los fundadores de Zedarriak? En el foro se sientan catorce personas. Son la presidenta ejecutiva de BunPlanet, Ainhoa Lete Núñez; Amaia Gorostiza Tellería, presidenta de GEO Management y también de la Sociedad Deportiva Eibar; el presidente de CIE Automotive, Antón Pradera Jauregui; la exministra de Ciencia e Innovación con el PSOE, Cristina Garmendia; la presidenta de Gaia y CEO del Grupo LKS Next, Elena Zárraga Bilbao, economista y censora jurada de cuentas; el consejero de Repsol, Indra y Acerinox, Ignacio Martín San Vicente; el presidente de Aernnova, Iñaki López Gandásegui; el presidente de Velatia, Javier Ormazabal; el catedrático de Derecho Internacional Privado de la UPV/EHU, Juan José Álvarez, muy estrecho colaborador de Urkullu y analista de referencia de la actualidad vasca; Josu Ugarte, presidente de Schneider Electric Iberia; la doctora en medicina Maite de Aranzabal; la presidenta de Algeposa, María Luis Guibert; el que fuera consejero de Economía y Hacienda del Gobierno vasco, Pedro Luis Uriarte, uno de los mayores valedores del Concierto Económico; y Consuelo Crespo, miembro del Consejo de Gobierno de la Universidad de Deusto.
El Gobierno vasco conocía de la creación del foro y de proceso de la elaboración del primer informe sobre el 'Diagnóstico Económico y Social' y, según indican desde Zedarriak, lo que se pretende en todo momento es colaborar con las instituciones. Pero el hecho de que el documento se filtrara a un medio de comunicación antes de que se pudiera trasladar al Ejecutivo ha ocasionado que el inicio de la andadura de este grupo socio-empresarial haya sido más que nada de enfrentamiento con el Ejecutivo y con el PNV, que ve entre las filas que forman Zedarriak algunos rostros que entiende como afines y que cuestionan sus políticas. “Nosotros no queremos enfrentarnos al Gobierno, queremos hacer informes para reflexionar”, dicen desde el foro. El propio Bingen Zupiria, portavoz del Gobierno, mostraba su malestar con el informe que alerta de la pérdida de competitividad de Euskadi. “El Gobierno vasco escucha las críticas que se le hacen, pero tiene un plan, un modelo de sociedad y una mayoría en el Parlamento, replicaba tras ser interpelado por el informe tras el consejo de Gobierno del pasado martes.
“Se ha distorsionado lo que quiere ser el foro y se ha estropeado el clima de confianza con las instituciones que queríamos promover. Pero vamos a seguir intentado aportar de forma constructiva”, señalan fuentes de Zedarriak. Los informes de este foro no se externalizan, sino que de momento se elaboran de forma conjunta por los catorce participantes en el foro bajo la coordinación de profesor Guillermo Dorronsoro.
Pese a la polémica de su primer informe Zedarriak se ratificaba en la necesidad de promover “un renacimiento” de Euskadi para el “futuro que nos viene”. Se da la circunstancia de que es concepto utilizado en varios discursos por el propio Urkullu, incluido el pleno de política general del pasado septiembre en el Parlamento Vasco. Se anuncia un próximo informe sobre la juventud “tanto en su diagnóstico de la situación actual, como de los principales retos de futuro”. La fecha en la que se hará público es el 28 de septiembre. Quizás está buscada para no hacerlo antes del pleno de política general de este año y no enfadar más al lehendakari, aunque el Gobierno entiende que todo el mundo tiene derecho a participar libremente en los foros que considere y a emitir sus opiniones.
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