Los precios medios de los vinos sin denominación de origen ni indicación geográfica a granel sufrieron destacadas devaluaciones durante la tercera semana de febrero, más acentuadas en los blancos que en los tintos, que también retrocedieron.
Los primeros se dejaron el 5,17 % de su valor entre el 13 y el 19 de febrero respecto a la semana anterior y cotizaron a 2,54 euros por hectogrado de media, mientras que los segundos retrocedieron el 2,71 % y se situaron en 3,10 euros, de acuerdo con los datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama).
Por plazas o lonjas de referencia, el valor de los vinos blancos a granel -pago al contado, sin IVA- rondó los 2,59 euros/hgdo en Albacete; 2,61 en Badajoz; 2,74 en Ciudad Real; 2,59 en Cuenca y 2 euros/hgdo en Toledo, difunde esta misma fuente.
Y los tintos -12 puntos de color- a granel y salida de bodega cotizaron a 3,29 euros/hgdo en Albacete; 3,08 en Ciudad Real; 3,43 en Cuenca; 3,02 en Badajoz; 3,29 en Murcia; 2,86 en Toledo y 2,91 euros por hectogrado en Valencia, de acuerdo con el Mapama. Una semana antes -del 6 al 12 de febrero-, se constató una subida del 2,08 % para el blanco (2,68 euros por hectogrado), mientras que los tintos se dejaron el 1,86 % y se quedaban en 3,18 euros/hgdo.
Creciente interés de compra
Los graneles españoles reciben creciente interés de compradores que tradicionalmente se suministraban de Chile y Argentina, sobre todo de canadienses, para sortear los altos precios del primero y la escasa oferta en el segundo por sus problemas climáticos.
Los expertos del operador global Ciatti indican, en su último informe de mercado de este mes, que los precios de los blancos “disminuyen lentamente”, pero de forma decidida desde los máximos de octubre, y los tintos lo hacen también, pero en menor medida.
En el caso de los rosados, los inventarios disponibles de buena calidad han caído mucho y “cada vez es más difícil encontrarlos a precios competitivos”, al menos los de “estilo francés”, por lo que Ciatti anima a comprar cuanto antes para asegurar las provisiones. En suma, “España sigue siendo el mejor del mundo cuando se trata de oportunidades de relación precio-calidad”, zanjan los expertos.
En cuanto a la evolución de la comercialización, los analistas del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV), con datos de Aduanas, constatan el descenso de las ventas del granel. Así, España exportó un 10,3 % menos en 2016 (unos 1.254,4 millones de litros en total), lastrada por los vinos sin indicación, y facturó un 2 % menos (494 millones de euros globalmente), si bien el precio medio rebotó el +9,2 %, gracias a los “excelentes datos” de los varietales, que van ganando posiciones en los mercados.
Francia se reafirma como primer demandante del granel español, al acaparar el 40 % del volumen y el 35 % del valor total. Por su parte, las ventas de envasados cayeron un -7 % en volumen y un -0,2 % en valor, con 2.226 millones de litros por 2.635,3 millones de euros, si bien, en el lado positivo, se revalorizaron, porque el precio medio repuntó el 7,3 % hasta 1,18 euros/litro.
En este segmento, los vinos con DOP, varietales y vinos de aguja son los que mejor se comportan y Reino Unido -pese a los temores que despertaba el anunciado “brexit”- se sitúa como principal cliente tanto en valor y volumen, mientras que EEUU confirma su pujanza y se sitúa como segundo destino mundial en valor para nuestro producto.
Si se tienen en cuenta las salidas exteriores de vino, y las de vermut, mostos y vinagres, las cifras resultantes son muy positivas: 2.757,4 millones de litros y 2.915,9 millones de euros. Una mención destacada merece China: la exportación del embotellado español en 2016 duplicó las cifras de 2014, con 720.000 hectolitros a un precio medio de 1,79 euros, mientras que los graneles sumaron otros 188.000 hectolitros y 9,4 millones de euros, aunque el valor medio fue aún muy bajo, apenas 0,52 euros/litro.