La asfixia económica de las pequeñas y medianas empresas que trabajan con la Administración autonómica extremeña, la que más tarda en pagar las facturas, ha recibido este miércoles oxígeno con el libramiento por parte del Ministerio de Hacienda de 280,7 millones de euros, con los que se podrán pagar 21.070 facturas pendientes según datos oficiales.
Esto tiene una traducción económica en la supervivencia de pymes y autónomos pero también en el empleo que es el principal problema en la región. “Tú trabajas con la Junta, pero si no cobras primero empiezas a despedir empleados, y si siguen sin pagarte acabas cerrando”, explica Fernando Segador, presidente regional de la organización de profesionales y autónomos OPA.
El departamento del ministro Montoro hará efectivo para la región el fondo de facilidad financiera, 280,7 millones de euros, que según la Consejería de Hacienda y Administración Pública se distribuirá en tres partidas.
La primera, de 58,8 millones, se destina a pagar facturas correspondientes a la administración general de la Junta (lo que no es Servicio de Salud), y con los cuales según esas fuentes quedarán abonados todos los suministros de bienes y servicios hasta el 4 de diciembre pasado.
Medicinas por pagar
La gran partida sin embargo es la segunda, 205,3 millones de euros, para el Servicio Extremeño de Salud (SES), que se irán principalmente en pagar medicamentos, tanto los de uso hospitalario como la aportación a lo que los particulares sacan con receta de las farmacias; esta últimas llevaban desde septiembre sin cobrar según ha recordado este miércoles el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.
El SES es el gran deudor, con facturas de 2014, que penalizan el período medio pago y convierten a Extremadura en la más morosa (112 días a 30 de septiembre pasado, frente a una media nacional de 55 días en pago a proveedores).
La tercera y última partida que se recibe entre este miércoles y el jueves son 14,9 millones de euros para pagar los nuevos tratamientos y vacunas contra la hepatitis C.
Según los datos dados por la Junta, de la cantidad enviada desde Madrid habría un pequeño sobrante ya que el importe adeudado a proveedores es de 279,043 millones, frente a los 280,7 librados por el fondo estatal de facilidad financiera.
Con esa transferencia de dinero solo se cubren las facturas de importe superior a 1.000 euros ya que el Fondo de Facilidad Financiera no contempla las de menos de esa cantidad según el Gobierno extremeño, que hará frente a las mismas con su presupuesto. “Desde la propia administración esta semana se procederá al pago de estas facturas con fecha hasta el 4 de diciembre de 2015 y que ascienden aproximadamente a 340.000 euros”, promete la Hacienda regional.
“Beneficio a la economía”
Esta gran transferencia económica, aportada desde la Administración central, permitirá “mejorar mucho el plazo del pago a proveedores” en la región, ha afirmado el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, quien confirma que dicho plazo medio se ve perjudicado por los retrasos de pago en el sistema sanitario.
Aunque parte de los 280 millones se destinarán a pagar el gasto de los medicamentos hospitalarios, “otra parte importante la recibirán los proveedores extremeños, lo que beneficiará a la economía de la región”. El presidente ha expuesto, en un encuentro de la asociación empresarial Iniciativa+1, que su Ejecutivo se encontró un escenario económico financiero “muy complicado”, con incumplimientos de déficit, deuda, pago a proveedores y regla de gasto, y con un presupuesto con un déficit del 2,5%, “la mayor irresponsabilidad” del Ejecutivo anterior.
“El sistema educativo y el sanitario no admiten más recortes”, ha reiterado el presidente, quien subraya que las farmacias llevan sin pagarse desde septiembre porque “se presupuestaron 200 millones menos”.
También ha explicado cómo la negociación con el Ministerio de Hacienda ha permitido abrir tres líneas de ayuda: evitar que la sanción europea por el tema de pastos repercuta en los agricultores extremeños, la firma de 120 millones de euros para los próximos tres años –este miércoles se cobraban 40- en inversiones, y los 280 millones del fondo de facilidad.
Unos meses malos
Desde la organización de autónomos OPA-Extremadura, su presidente Fernando Segador reprocha que todos los finales de año pasa lo mismo, la Junta deja de pagar porque cierra la contabilidad, lo que supone un momento difícil para las pymes y autónomos porque entre diciembre y enero los gastos para las mismas son abundantes: hay que pagar la nómina extra de los empleados, el IVA de lo facturado, las retenciones de IRPF y los seguros sociales.
“La llegada de este dinero es una gran noticia”.