Hasta hace unos años la principal manera de ir en ferrocarril de Badajoz a Madrid era vía Ciudad Real. Una cosa era esa línea que unía ambas ciudades, y otra la línea Madrid-Cáceres por Navalmoral y Plasencia. Pero desde hace cinco lustros la aparición de la alta velocidad obligó a apostar por un trazado de interés regional y se hizo por el que une Badajoz con Mérida, Cáceres y Plasencia.
Es por ello que la Asociación de Amigos del Ferrocarril regional ha reclamado que no se olvide la línea Badajoz-Mérida Puertollano, la segunda en importancia de la región, que mueve según sus datos 220.000 viajeros anuales, y que da una salida extremeña no solo a Madrid para los habitantes del valle del Guadiana, la Serena, Siberia y comarcas manchegas, sino que es un corredor peninsular oeste-este (Levante) nada despreciable.
La asociación sigue de cerca el cumplimiento del anuncio hecho por el ministro de Fomento Íñigo de la Serna sobre una inversión de 310 millones de euros en la renovación de vía y electrificación de Mérida-Puertollano, ya que entre Badajoz y Mérida se hará con motivo de la línea de altas prestaciones (un escalón por debajo de la alta velocidad) Badajoz-Cáceres-Madrid.
El ministro anunció que antes de fin de año se presentarían los proyectos técnicos pero vistas las fechas se cree que no será hasta enero, luego se licitará el primer tramo, Castuera-Guadalmez/Los Pedroches ya en provincia de Ciudad Real, y las obras empezarían durante o a finales del verano que viene.
El tramo elegido es el de peor estado, con 36 kilómetros entre Castuera y Almorchón limitados a 50 km/h como máximo pero que desde el terreno los responsables de mantenimiento han pedido a Adif que se baje incluso a 30 por las pésimas condiciones de seguridad.
Un Alvia Madrid-Badajoz, cuatro horas
La renovación completa incluida en los 310 millones abarca también desde Guadalmez/Los Pedroches hasta Puertollano, y el presupuesto se dividiría en total en cuatro lotes que afectan a un trayecto que pasa entre otras estaciones por Almorchón y Cabeza del Buey.
El plazo de obra del primer tramo, Castuera-Guadalmez/Los Pedroches (60 kilómetros), sería de 18 meses y la renovación de vía costaría 40 millones de euros para una mejora total de la misma (balasto, carriles de más peso, y traviesas de hormigón, más nuevo sistema de control de tráfico); el ahorro de tiempo de viaje en esos 60 kilómetros sería de 30 minutos.
Ángel Caballero, de la asociación de amigos del ferrocarril, ha destacado que solo con la renovación de vía en esos 60 kilómetros, se podría poner un tren híbrido (eléctrico/diesel) y de eje intercambiable Alvia S730 que saliendo desde Madrid usara la vía del AVE Madrid-Sevilla, y luego saliera de ella para cambiar ejes (de estrecho a ancho) en Brazatortas y tomar rumbo por la línea de Badajoz, con lo que podría tardar poco más de cuatro horas entre ésta ciudad y Madrid, lo mismo que se pretende con la línea rápida por Cáceres y Plasencia; Mérida quedaría de Madrid a 3 horas y 45 minutos.
En Brazatortas/Veredas está hecha la excavación para un intercambiador de ejes que en 2010 prometió el ministro socialista José Blanco pero nunca se hizo; incluso la vía ha sido desviada de forma provisional ya que la dirección tradicional y también futura pasará bajo el arco intercambiador.
Por poco dinero
Javier Rubio, miembro también de esa plataforma, exige atención a esta línea Mérida-Puertollano, vital para las vegas altas del Guadiana, la Serena, Siberia y la parte occidental de Ciudad Real. Pero no solo eso: “Hay muchos viajeros desde Barcelona o Valencia, que la usan para ir a Badajoz, y nos preguntan cómo es posible que esta línea esté así. Por relativamente poco dinero puede quedar muy bien”.
Al margen del primer tramo para adjudicar que sería Castuera-Guadalmez/Los Pedroches, no confía en ninguna promesa que vaya más allá de las elecciones, como son completar el arreglo hasta Puertollano, o la electrificación de todo el trazado desde Mérida que costaría 180 millones de los 310 previstos.
Si se hiciera, Badajoz quedaría de Madrid a menos de cuatro horas.