Baja el número de extremeños satisfechos con la sanidad pública

Las penurias económicas de la sanidad hacen efecto y el porcentaje de extremeños que califica de “bueno” o “muy bueno” el sistema sanitario público ha descendido hasta el 53 %, diez puntos menos que en 2012, según un estudio de la Unión de Consumidores de Extremadura (UCEX)

El informe, “La sanidad extremeña, aún convaleciente”, analiza las consecuencias de los ajustes económicos realizados en la sanidad pública como consecuencia de la crisis.

En la presentación de este estudio, que aparece publicado en el número 90 de la revista “Consumidorex”, el director provincial de UCEX, Roberto Serrano, ha afirmado que el descenso en la percepción óptima de la sanidad pública se debe al “deterioro notorio y evidente” del sistema sanitario.

Se ha entrevistado a 1.300 personas de trece localidades, tanto de zonas rurales como urbanas, a las que ha preguntado sobre su estado de salud, opinión del sistema y principales quejas y reclamaciones, entre otras.

Respecto a la salud de los extremeños, un 73 por ciento asegura que se encuentra bien o muy bien, tres puntos menos que el último informe, y la mayoría acude al Servicio Extremeño de Salud (SES) para consultas.

Faltan a la cita y no avisan

La implantación de las recetas electrónicas ha provocado que los usuarios apenas acudan por ellas físicamente, usuarios que cuando faltan a su cita, solo la mitad avisa para que otros ciudadanos puedan acudir a esa hora libre y así agilizar las listas de espera, ha manifestado Serrano.

En el caso de dolencias leves, sube el porcentaje de pacientes que acuden al médico y baja el número de personas que se automedican. Este último hecho, unido a los que confían en los farmacéuticos, permite descongestionar el sistema sanitario.

Uno de los datos positivos de la encuesta ha sido el aumento del conocimiento de los medicamentos genéricos respecto al año anterior, mientras que el copago de los fármacos, una de las medidas más polémicas, afecta a la economía del 61 por ciento de los encuestados, dato que aumenta hasta el 75 en el caso de los pensionistas.

Para Serrano, “los ciudadanos han percibido la época de recortes y es hora de recuperar la confianza”, pese a que casi el 80 por ciento de los encuestados prefiere el sistema sanitario público al privado.