La Junta de Extremadura ha iniciado un procedimiento sancionador contra el Ayuntamiento de Cáceres por presuntas infracciones graves en las obras hechas en la Torre de Bujaco el pasado mes de marzo, que taparon nidos de vencejos en la estructura, ante la denuncia de asociaciones ecologistas.
Con fecha 13 de junio pasado, el director general de Sostenibilidad ha acordado iniciar un procedimiento sancionador por las obras de emergencia en Bujaco, que se tuvo que acordonar por la caída de ripios a la vía pública.
Actuaciones que supusieron la destrucción de una colonia de vencejos, según han informado desde la Asociación Vencejos en Extremadura, que inició las denuncias.
Así, las infracciones administrativas, tipificadas como graves, a las que se enfrenta el Consistorio son haber realizado sin el preceptivo informe de afección a Red Natura 2000, “pudiendo suponer un menoscabo de la ZEPA de la Ciudad Monumental de Cáceres, al cerrar algunos huecos que eran utilizados por los vencejos para su nidificación”.
Asimismo, se contempla como infracción “la propia eliminación de los huecos donde nidificaban los vencejos”.
Por tales hechos, el Ayuntamiento de Cáceres se enfrenta a una multa que oscila entre 6.000 y 60.000 euros que, presumiblemente, “repercutirá en las aportaciones de los contribuyentes y no en los responsables de tales hechos”, ha manifestado la asociación.
Además, el Consistorio debería reparar el daño causado y en su caso, la Junta podría subsidiariamente proceder a la reparación del daño a costa del obligado.
La Asociación Vencejos en Extremadura ha insistido en que viene denunciando “desde hace años el incumplimiento reiterativo de las normas de protección medioambiental de la Zona Zepa de la Ciudad Monumental de Cáceres por parte del consistorio”.
Como ha sucedido en las obras de Torre Bujaco “sin contar con el informe de afección preceptivo de la DG de Sostenibilidad como de costumbre”, ha apuntado.
Tras la denuncia presentada por el colectivo, el Ayuntamiento solicitó a la Dirección General de Sostenibilidad el informe de afección y esta se pronunció autorizando la obra pero con la condición de que se reabrieran los nidos tapados en un plazo máximo de 10 días.
“A fecha de hoy, los nidos siguen tapados y por tanto, la obra realizada sigue sin estar legalizada”, reprocha el colectivo.