Alrededor de unas cincuenta personas de los Campamentos Dignidad en Extremadura realizaron una marcha el sábado desde Fuente de Cantos hasta la finca Los Quintos, en Llerena, propiedad de la familia del exministro Miguel Arias Cañete.
La protesta transcurrió por la carretera que conecta la localidad extremeña con Llerena, fue escoltada en todo momento por un fuerte dispositivo de la Guardia Civil.
Tras el trayecto por carretera, el Campamento Dignidad recorrió los siete kilómetros que separan la entrada a los terrenos de la finca privada. “Monago, mientras usted come canapés, nosotros no llegamos a fin de mes” fue una de las consignas que se escucharon durante la marcha, en referencia al presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago.
Ante la imposibilidad de llegar a la hacienda familiar, los asistentes se concentraron frente a la plaza de toros propiedad de la familia y han realizado una asamblea donde leyeron un manifiesto y comentaron la acción.
El Campamento Dignidad mostró así su indignación ante lo que consideran “el expolio del dinero público”, y denunció la apropiación de innumerables subvenciones agrarias comunitarias desde los años 90 hasta la actualidad. La última de estas ayudas de la Unión Europea, con un importe de 1.800.000 euros, fue concedida siendo Arias Cañete ministro de Agricultura, según han denunciado.
Y es que critican que las subvenciones de la Política Agraria Común (PAC) se las llevan unos pocos grandes propietarios que, como Arias Cañete, se enriquecen de la mano de unas tierras casi improductivas a costa del erario público.
“Ha aprovechado su cargo y que está en los círculos de poder para llevarse el dinero”, dijo Daniel Hierro, miembro del Campamento Dignidad.
Asimismo, Hierro destacó que estas partidas económicas podrían dedicarse a asuntos más urgentes como el fomento del empleo o la Renta Básica. Por ello, han reclamado la creación de un Banco de Tierras en Extremadura que garantice el trabajo de los jornaleros así como la modificación de la normativa de la PAC.