La Asociación de Estaciones de Servicio de Extremadura (Aresex) tiene una sensación “agridulce” sobre la intención del Gobierno central de unificar el tramo autonómico del impuesto a los carburantes, pues aunque provocará una subida de los precios en la Comunidad, supondrá por otro lado la desaparición del “efecto frontera”.
Los Presupuestos estatales de 2018, que están en discusión y de momento han superado las enmiendas de totalidad, prevén igualar este impuesto, lo que supondrá una subida en nueve de ellas, que en estos momentos tienen su tramo en un nivel más bajo, incluida Extremadura
El presidente de Aresex, Fernando Mena, ha explicado que toda subida de precios afecta de manera negativa al consumo y, en este sentido, ha dicho que los carburantes se incrementarán dentro de la región en un céntimo de euro por litro, al tener que adaptarse al tipo autonómico uniforme futuro, fijado en 4,8 céntimos por litro.
Sin embargo, en otras comunidades subiría mucho más el precio del carburante al tener que adaptarse a este tipo máximo, ha indicado.
Igualamiento con Castilla y León
En el caso extremeño beneficiará principalmente en su relación con Castilla y León, donde este tramo autonómico se había reducido a cero desde 2016, y por tanto repostar era más barato.
Por tanto, el “efecto frontera” que hacía que los precios en las gasolineras de Salamanca, por ejemplo, fueran mucho más baratos que en las de Cáceres, desaparecería a partir del próximo 1 de enero.
De igual manera que las gasolineras extremeñas de la Autovía de la Plata (A-66) se beneficiarán del aumento considerable del tipo en Castilla y León, las ubicadas en la A-5 se aprovecharán del incremento que se producirá en Madrid, ya que aquí en esta comunidad también era más bajo que en Extremadura
Mena ha lamentado que el tipo fijado por el Gobierno central haya sido el máximo posible (4,8 céntimos por litro) y no otro inferior que supusiera menos desembolso para los bolsillos de los usuarios.
Por otra parte, no cree que esta subida de precios en Extremadura vaya a afectar al número de clientes portugueses que repostan en la comunidad, pues el carburante en el país vecino seguirá siendo más caro.