El coleccionista alemán que se enamoró de España visita sus cuadros en Badajoz
Al coleccionista alemán Hans Rudolf Gerstenmaier, de 81 años, se le saltan las lágrimas cuando recuerda la primera vez que estuvo delante de un Van Gogh y pudo 'tocarlo'. Fue en el Paseo del Prado de Madrid, hace más de medio siglo. “En aquella época había por lo menos veinte anticuarios en esa calle que te ofrecían obras. Pude tener una gran cercanía con el arte”, revive con una emoción envidiable. Ahí empezó todo.
Desde entonces colecciona cuadros como si fueran amores pasionales. Ahora, parte de su tesoro se expone en el Museo de Bellas Artes de Badajoz (MUBA) bajo el título 'Senderos a la modernidad', una muestra de 78 obras de pintura española de los siglos XIX y XX. Artistas de la talla de Zuloaga, Sorolla, Anglada Camarasa, Francisco Padilla, Álvarez de Sotomayor o Carlos de Haes forman parte de este recorrido que se puede visitar hasta este domingo 15 de mayo.
Gerstenmaier visitó el MUBA el pasado martes y quedó literalmente “maravillado” con el resultado de la exposición. Durante su paseo por el museo contó que vino a España como una aventura en la que conocer el país y aprender el idioma, y ya se quedó para siempre. “Yo soy de Hamburgo y allí no existe la oferta artística que hay aquí”.
Dice que el gusto por coleccionar cosas es algo que todos tenemos en las venas y que hacemos desde que somos niños. “Coleccionar es acumular conocimientos. Coleccionar te abre puertas y ventanas al mundo, porque te permite tener visiones diferentes. Supone saber más, estar más metido en el mundo, enriquecer tu vida”, describe con fervor. Y advierte que, para que funcione, “hay que tener amor a las cosas, no se debe pensar tanto en el valor material, y hay que tener mucho cuidado con que el cuadro nuevo que entre en la exposición haga amistad, incluso amor, con el cuadro de al lado”.
En su recorrido por 'Senderos a la modernidad' se para delante de una obra de Beruete para alabarla. “Es el pintor que descubrió más o menos el paisajismo, porque aquí en España sólo se pintaban retratos y la vida familiar”, explica.
Le cuesta elegir cuál es la joya de esta exposición, y responde con humor: “Yo me adapto a la propaganda y digo que lo mejor es Sorolla”.
Sus obras de arte han recorrido medio mundo (París, México…) y esta muestra en concreto ya ha visitado ciudades como Granada, Vitoria, Gijón o Zaragoza. Sin embargo, en Badajoz, y por expreso deseo del prestador de la colección, se exponen por primera vez diez de los 78 cuadros. En concreto, obras como 'Paisaje de Pollença' de Anglada Camarasa, 'Paisaje con montañas' de Aureliano de Beruete o 'Mar de Jávea' de Sorolla.
“Pienso que coleccionar no es acumular, es enseñar”, sostiene Gerstenmaier. “Decimos siempre que la juventud es lo más importante que hay en la vida. Pero la vejez tiene también su gran importancia, porque todo esto que vemos ahora es una obra formada a través de mis años, y ahora me da mucha satisfacción”.
Su préstamo ha permitido que se pueda disfrutar por primera vez en Extremadura de un exposición pictórica de primer nivel.