El Consejo de Gobierno ha aprobado un decreto por el que se declara el Dolmen del Toriñuelo, en Jerez de los Caballeros, como Bien de Interés Cultural con la categoría y denominación de “Zona Arqueológica del Monumento Nacional Sepulcro Megalítico de la Granja del Toriñuelo”.
Esta zona arqueológica constituye uno de los mayores exponentes del megalitismo en Extremadura, cuyas singulares características hicieron que fuese declarado Monumento Nacional en 1931.
Las primeras exploraciones en el lugar se remontan a finales del siglo XIX, aunque ue José Ramón Mélida quien facilitó la primera documentación científica acerca de la naturaleza y características del monumento.
A partir de entonces se convirtió en referencia obligada para los investigadores que se han ocupado del fenómeno prehistórico megalítico del suroeste peninsular.
El interés que ofrece la Zona Arqueológica del Monumento Nacional Sepulcro Megalítico de la Granja del Toriñuelo reside en sus excepcionales dimensiones y lo monumental de su concepción y en que conserva todavía los elementos esenciales, como son estructura tumular, corredor, cámara ortostática y el arranque original de la cubierta de falsa cúpula y parte del anillo perimetral.
Además cuenta con muestras de arte megalítico y en su proximidades fue hallada una estatua-menhir de clara tradición megalítica.