La secretaria general de Cultura de la Junta de Extremadura, Miriam García, lo ha explicado durante la inauguración en Cáceres del XIX Congreso Internacional de Arte Rupestre IFRAO, que se celebra por primera vez en España.
“La región debe conocer su pasado para protegerlo”, ha dicho. Además, ha explicado que el arte rupestre se puede encontrar en numerosas zonas extremeñas, como Monfragüe, La Calderita, la zona de Arroyo de San Serván y los Ibores.
“Un patrimonio tangible que desde la Junta vamos a tratar de dinamizar”, con un plan de acción “que aún estamos trazando”.
García ha comentado que la difusión de los espacios arqueológicos es uno de los objetivos que “marcarán nuestras líneas de gobierno”, para que “sean accesibles no solo a los extremeños, sino también a los visitantes de fuera de la región”.
El arte rupestre, ubicado en lugares inaccesibles
“Queremos que el patrimonio sea accesible, aunque es cierto que el arte rupestre en ocasiones se encuentra ubicado en zonas que son inaccesibles para el ciudadano, pero sí podemos ofrecerles accesibilidad a través de las nuevas tecnologías”, ha añadido.
De hecho, ha incidido en que el acceso al patrimonio de la región “no tiene que ser sólo físico”, como ocurre con la cueva de Maltravieso, que puede ser visitada a través de su web.
Respecto a esta cueva, cerrada incluso a los investigadores para preservar las pinturas que albergan sus paredes, García ha precisado que hay una comisión en activo que estudia actualmente si se puede en un futuro permitir el acceso a los expertos.
En abril de 2014 se aprobó un protocolo de uso en la cueva para garantizar la conservación de este conjunto de arte parietal, en su dimensión geológica, microbiológica y ambiental, para intentar frenar el deterioro que sufren sus pinturas rupestres.