La Organización en Defensa de lo Público en Tierra de Barros ha exigido al Gobierno de la Junta de Extremadura y a la Delegación del Gobierno, que de manera inmediata con las organizaciones agrarias, la FEMPEX y con los sindicatos, tomen las medidas necesarias para hacer frente a las problemáticas que se presentan en Tierra de Barros con motivo de la campaña de la vendimia.
Las organizaciones y entidades públicas indicadas, especialmente el gobierno de la Junta de Extremadura, deberían haber previsto lo que ocurre en estas fechas en algunas localidades de Tierra de Barros, especialmente en Almendralejo, puesto que un año tras otro se repiten los mismos problemas. Sin embargo, “permanecen impasibles y miran para otro lado como si las circunstancias que se dan no tuvieran nada que ver con ellas”, dice ese colectivo en un comunicado. “La realidad es que están más preocupadas de elaborar un bodrio de decreto para acabar con el rebusco antes que tomar medidas para resolver los problemas de todo tipo que se presentan en estas campañas”.
En estos días llegan a las localidades de Tierra de Barros un masivo número de personas inmigrantes para buscar trabajo en la cosecha de la vendimia. Se alojan en viviendas o en naves que no reúnen los requisitos mínimos de habitabilidad y salubridad. En la mayoría de los casos un número muy superior al espacio que se requiere para que puedan llevar una vida decente. Además, todas estas circunstancias ocasionan problemas de convivencia con los vecinos y familias que habitan en las calles o cercanías, describe la asociación.
A todo el conjunto de problemas derivados de las condiciones y del hacinamiento de personas en las viviendas se unen los que tienen que ver con las relaciones laborales, contrataciones, los salarios, los destajos, etc. “La realidad es que de estas situaciones se aprovechan gente sin escrúpulos que lo que realmente pretenden es que haya abundante mano de obra para que los salarios sean los más bajos posible”.
Salario más bajo
La Junta, Delegación del Gobierno, Fempex, las organizaciones agrarias y sindicales “conocen todo esto que se repite un año tras otro. Pero no hacen absolutamente nada para evitarlo. Lo que se impone son los intereses de clase: mientras más inmigrantes, más mano de obra y más bajos serán los salarios. Nada más interesa”.
Por todo ello, la Organización en Defensa de lo Público exige que se tomen medidas urgentemente por las administraciones y organizaciones agrarias para desarrollar un Plan de Integración que prevenga y evite muchos de los problemas relacionados con las viviendas (indicados anteriormente) que suceden en estos meses de campaña: pisos en donde se hacinan personas, domicilio sin condiciones higiénicas, sin salubridad, etc.
“Que en el Programa de Integración se destinen educadores sociales y trabajadores sociales para tratar con las personas que vienen de fuera e instruirlas en unos comportamientos relacionados con la ocupación de espacios públicos, limpieza, respeto a la convivencia vecinal, contratos de trabajo, etc”.
Por otro lado las organizaciones agrarias deben exigir a los agricultores que todas las personas que vayan a realizar los trabajos de vendimia sean contratadas a través de las oficinas de empleo. Las Administraciones Públicas deben destinar el suficiente personal funcionario “para hacer cumplir que ningún trabajador o trabajadora esté sin un contrato de trabajo y en condiciones legales, es decir, que se cumplan los convenios agrícolas, que no se paguen salarios de miseria y se persiga exhaustivamente la explotación hasta sus últimas consecuencias”.