El administrador estatal de infraestructuras ferroviarias (Adif) ha puesto en servicio este martes parte del baipás de Mérida, que es el tramo de la futura línea de alta velocidad Madrid-Badajoz que evita el paso por la capital autonómica, algo que no obstante ya hacía la antigua vía Cáceres-Estación de Aljucén; en esta última los trenes tomaban otra línea para dirigirse a la capital autonómica.
El baipás tiene 31,2 kilómetros, 14,2 en vía única y 17 en doble, pero solo se ha puesto en servicio la parte que no afecta a las obras de enlace con Mérida, unos trabajos que según Adif estarían terminados el 21 de diciembre.
La empresa pública de infraestructuras ferroviarias ha colocado lo mejor que ha podido las piezas del complicado 'puzzle' que supone el enlace al oeste de Mérida, en las cercanías de la estación de Aljucén (situada en el término municipal emeritense), de la nueva línea de altas prestaciones (futura de alta velocidad), con la antigua Ciudad-Real-Mérida-Badajoz que es la que daba, y sigue dando, conexion con la capital regional.
Se trataba de encajar la continuidad en la circulación de los convoyes habituales, con la realización y terminación de obras para un enlace más rápido entre ambas líneas.
La consecuencia es que buena parte de los usuarios de Mérida tendrán que viajar primero en un tren media distancia a Montijo, y allí conectar con los servicios Alvia Badajoz-Madrid-Badajoz; por contra los usuarios de la estación de Badajoz ganan tiempo al no tener que pasar por Mérida hasta el día 21, al igual que los que proceden de Cáceres se dirijan a Badajoz.
Todo ello obliga a reorganizar horarios de servicios ferroviarios en Extremadura.
Si el día 21 efectivamente se acaban las obras, todos los trenes volverán a pasar por Mérida pero usando ya el nuevo enlace, con lo cual los usuarios de todas las estaciones ganarán tiempo en su viaje a o desde Madrid.
Y es que el enlace nuevo se sitúa junto a la estación de Aljucén, y no 17 kilómetros más al norte (en un punto al noroeste del pueblo de Aljucén, que no tiene nada que ver con la estación del mismo nombre), una distancia que hasta ahora se cubría por la antigua línea Cáceres-Aljucén, más lenta y menos confortable aunque también fue un tramo que se ha electrificado.
Un tramo de 17 km, el único original que queda de la citada línea, que no volverá a usarse y que probablemente será desmantelado en el futuro.
Para mejorar el enlace que siempre se ha producido en Mérida entre la línea Badajoz-Puertollano-Ciudad Real, y la relación Madrid-Cáceres-Mérida-Badajoz, se está renovando toda la infraestructura, con obras que aún durarán muchos meses para que haya doble vía electrificada entre la capital regional y ese punto de conexión.
Según resalta el comunicado oficial de Adif, la apertura parcial del baipás permite conectar directamente Cáceres y Badajoz, agilizando la circulación al evitar el paso obligado por la capital extremeña.
En esta primera fase, que se prolongará hasta el 21 de diciembre, comienzan a operar la vía 2 al completo y parte de la vía 1. Durante estas semanas se desarrollarán los trabajos para la puesta en servicio de la totalidad de la vía 1 y del ramal directo a Mérida y, en paralelo, se ultimarán los trabajos complementarios en los sistemas de control, mando y señalización.
Una vez concluidas estas operaciones y tras la preceptiva autorización de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF), se pondrá en servicio el baipás completo, que “aportará mayor flexibilidad y funcionalidad a la línea, con la posibilidad de servicios directos, además de mayor confort para el viajero y una ruta alternativa ante eventuales incidencias”.
Un proceso “exhaustivo”
La puesta en servicio del baipás se produce tras un exhaustivo proceso según la empresa estata: en septiembre se pusieron en tensión las instalaciones de electrificación y en octubre un tren ‘laboratorio’ de Adif realizó diversas pruebas para certificar el óptimo funcionamiento e interacción de todos los sistemas (vía, catenaria, etc.). Finalmente, se realizaron los recorridos de fiabilidad.
Con posterioridad el operador ferroviario ha realizado las pruebas de formación de maquinistas y, una vez obtenida la autorización de puesta en servicio de esta fase 1 por parte de la AESF, se ha iniciado el servicio comercial.
La velocidad en el baipás podrá ser de hasta 200 km/h, la máxima que permite el sistema de seguridad instalado Asfa, mientras se pone el de alta velocidad que es el ETCS, previsto para dentro de 2025.