Se mantuvo el copago farmacéutico y subieron algunos gastos básicos, mientras que las pensiones continuaron “prácticamente igual”. Esto hace concluir al sindicato UGT Extremadura que el pensionista extremeño siguió perdiendo nivel adquisitivo durante 2015.
El secretario de Igualdad y Políticas Sociales de UGT Extremadura, Nereo Ramírez, ha explicado que este tipo de situaciones han afectado al colectivo en la comunidad autónoma, que percibe una pensión media de unos 730 euros. A todo ello se une que, tras la crisis económica, muchos pensionistas extremeños siguen siendo el sustento de familiares más jóvenes que se quedaron sin empleo o perciben un salario muy bajo.
En opinión del representante sindical, la recuperación económica se atisba en las “macrocifras”, en las exportaciones o en las cuentas de resultados de las grandes empresas y de los bancos, pero no en los salarios de muchos extremeños.
Ante estas circunstancias, la situación del pensionista extremeño sigue siendo “difícil”, pues los gastos de luz, calefacción, agua, suministros para el hogar o medicamentos no bajan, pero sus pensiones siguen “congeladas”. En este sentido, el representante de UGT Extremadura ha expresado la “importancia” de que el nuevo Gobierno central afronte una política en favor de los pensionistas.
Ha explicado que la conformación del nuevo Gobierno podría afectar a los pensionistas principalmente a medio plazo, pues sus decisiones “pueden significar beneficios o por el contrario apretarles más el cinturón”.
En este sentido, el último Gobierno “ha hecho perder poder adquisitivo a los pensionistas” con decisiones negativas como la subida lineal de las pensiones o la instauración del copago sanitario. “Si el próximo Ejecutivo siguiera ahondando en cargar parte del déficit público en las pensiones, -ha dicho- el país podría encontrarse con fórmulas futuras que agravaran aún más la situación de este colectivo”. Por este motivo, el representante sindical ha pedido que el Estado suprima el copago farmacéutico y recupere el índice del IPC para la revalorización de las pensiones.
Estas decisiones serían “fundamentales” para el colectivo en la comunidad autónoma, quien de media recibe una de las pensiones más bajas de España, y que por tanto “se ve más afectado” por las medidas en su contra. Aunque la prestación de las pensiones es una competencia nacional, Ramírez cree que los presupuestos autonómicos también pueden beneficiar al sector, en situaciones como el alivio del copago o la cobertura en los temas “básicos”.