CCOO Extremadura piensa que no es una cuestión de empleo, “sino una cuestión ideológica profunda sobre la que hay que ser coherentes”. El sindicato reclama al Gobierno regional que abandone su “indecisión” para caminar hacia una escuela pública laica y no confesional.
La polémica ha rodeado al futuro de los profesores de Religión desde que la Junta anunciara que el nuevo currículum educativo extremeño recupera Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos y reduce Religión. Una decisión que llevó al conjunto de docentes de Religión católica en Extremadura a movilizarse con la denominada ‘Marea Amarilla’.
Critica que ante su “indecisión e intento por contentar a todo el mundo” la Consejería de Educación prevé encargar al profesorado de Religión tareas de responsables de biblioteca, e incluso un nuevo cargo de coordinadores o encargados de la convivencia escolar. Para CCOO esto sería un error más que la Administración aún está a tiempo de rectificar. En concreto pide “coraje, coherencia y responsabilidad”. “La presencia de la religión en las escuelas no es una cuestión de empleo, y en el caso de que lo fuera, deben resolverlo las autoridades eclesiásticas”.
“Viene en su programa electoral”
La apuesta de la Federación de Enseñanza de CCOO es la de una educación de calidad, gratuita, “pluralista, científica, igualitaria, gestionada democráticamente y laica”.
Recuerdan que el programa electoral del Partido Socialista se comprometía a “promover una escuela pública laica donde no quepa la integración de enseñanzas confesionales, ni en el currículum ni en el horario escolar”. Por eso critica la “tibieza” mostrada hasta el momento y que no se haya hecho nada cumplir esta promesa pese a las continuas exigencias del sindicato.
Frente a la polémica “alimentada por los sectores conservadores”, advierte que hay una mayoría social que es partidaria de una enseñanza neutral en lo religioso. “Por este motivo CCOO considera que los responsables de la Administración extremeña se equivocan y defraudan a su electorado cuando no dan los pasos necesarios para ir reduciendo la enseñanza religiosa en la escuela pública”.
¿Compensar a los profesores de Religión?
Ante la pérdida de horas de religión católica, lamenta que se prevea no solo encomendarles la biblioteca, sin un nuevo cargo de coordinadores o encargados de la convivencia escolar. “La biblioteca, y así lo defiende la ley educativa vigente es un lugar de fomento de la lectura y acceso a la información que exige libertad de pensamiento y un ejercicio de espíritu crítico, la defensa del método científico y de la investigación, lo que con toda seguridad discrepará de consideraciones, valores o doctrinas de tipo religioso”.
Además dice que tampoco este profesorado ha sido designado para desempeñar un papel decisivo en materia de convivencia escolar, donde deben primar valores democráticos y centrados en los derechos humanos, y en cualquier caso, lejos de cualquier ideario religiosa.
“En definitiva, estas alternativas no tienen sentido porque hay que preservar la independencia organizativa y el carácter aconfesional del sistema educativo, alejado de cualquier creencia o doctrina que no se base en el conocimiento, los Derechos Humanos y la convivencia democrática”.
Otra de las cuestiones que pone encima de la mesa es que no han pasado por un proceso de libre concurrencia, capacidad y publicidad para ocupar su puesto, tal y como sí ha hecho el resto del personal docente de la escuela pública.
A su parecer el problema del desempleo en el profesorado no se resuelve quitando o poniendo una o dos horas de religión en las escuelas. “Se resuelve sacando una adecuada Oferta de Empleo Público para docentes, que sea mantenida en el tiempo, y en la que brillen con luz propia los principios de mérito, igualdad y capacidad; se resuelve además recuperando las actividades formativas complementarias, bajando las ratios e inyectando recursos humanos y materiales para la atención a la diversidad y el apoyo educativo”.
La Federación de Enseñanza de CCOO ya denunció el curso pasado que la matrícula en la asignatura de Religión había aumentado en el curso escolar 2015-2016 hasta un 150 por ciento en Primero de Bachillerato. Esto es consecuencia de la implantación de la Ley Orgánica del Partido Popular (LOMCE), ya que la nota cuenta para el expediente académico.
Pero en Extremadura, CCOO ha insistido en que se retire la Religión de Primero de Bachillerato, ya que así lo permite la propia LOMCE en su artículo 34, en el que se deja que cada Administración educativa y, en su caso, los centros docentes, puedan ofertarla o no.